Senado deja en manos de la Corte Constitucional decisión sobre objeciones a la JEP
La Corte deberá determinar si los 47 votos en Senado fueron suficientes para rechazar las objeciones del presidente Duque.
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Un acuerdo político puso punto final al confrontación que durante las últimas semanas se vivió en el Congreso de la República, por cuenta de la decisión del presidente de la Republican, Iván Duque, de objetar seis artículos de la ley estatutaria de la Jurisdicción Especial de Paz.
Luego de tres aplazamientos, finalmente la Plenaria del Senado remitió a la Corte Constitucional la totalidad del articulado, para que sea el alto tribunal quien defina si hay lugar o no a aplicar los cambios propuestos por el Gobierno.
La Cámara de Representantes rechazó hace varias semanas las objeciones, pero estaba pendiente la decisión del Senado, que venía siendo aplazada en medio de unas fuertes discusiones sobre el procedimiento para resolver impedimentos, recusaciones e interpretar las mayorías.
Los partidos Conservador, Liberal, Cambio Radical y La U sellaron un acuerdo político para que la Mesa Directiva terminara enviando el proyecto a la Corte.
La estrategia consistió en desistir de la apelación a la decisión del martes pasado, para permitir que se realizara una segunda votación, partiendo del punto de que no se alcanzaron los votos siguientes para hundir las objeciones.
Senadores de varios partidos políticos se retiraron del recinto durante la votación, con lo cual no hubo el quórum suficiente para aprobar o negar las objeciones. Ante esto, el presidente del Senado, Ernesto Macías, confirmó el envío del proyecto a revisión de la Corte, tal y como lo había establecido el alto tribunal.
“Las bancadas presentes hacemos un llamado a construir una agenda para superar el debate entre el Sí y el No y así salir de la polarización que tiene agotado al país. Todos debemos trabajar por una agenda social que ayude a resolver los problemas de los ciudadanos y mejorar la calidad de vida de los colombianos”, explicaron los partidos a través de un comunicado.
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Ante esto, el Gobierno interpretó lo ocurrido como un triunfo, pues con el rechazo de las objeciones en la Cámara y la falta de decisión, en dos votaciones, en el Senado, se aplicaría la discrepancia entre las cámaras y, en ese orden, se caerían los artículos objetados por el Gobierno.
“En nuestra opinión, las partes de los artículos que fueron objetados deben ser archivados, lo cual implica un claro triunfo del gobierno nacional”, indicó el alto comisionado para La Paz, Miguel Ceballos.
Los contradictores de las objeciones tienen otra interpretación y afirman que la Corte les dará la razón sobre las mayorías y en ese orden se entenderían negadas, con los 47 votos del pasado martes.
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La decisión final queda en manos de la Corte y el Senado ahora se concentrará en discutir el Plan Nacional de Desarrollo e intentar salvar otras iniciativas que están en riesgo de hundirse.
Un acuerdo político puso punto final al confrontamiento que durante las últimas semanas se vivió en el Congreso de la República, por cuenta de la decisión del presidente de la Republican, Iván Duque, de objetar seis artículos de la ley estatutaria de la Jurisdicción Especial de Paz.
Luego de tres aplazamientos, finalmente la Plenaria del Senado remitió a la Corte Constitucional la totalidad del articulado, para que sea el alto tribunal quien defina si hay lugar o no a aplicar los cambios propuestos por el Gobierno.
La Cámara de Representantes rechazó hace varias semanas las objeciones, pero estaba pendiente la decisión del Senado, que venía siendo aplazada en medio de unas fuertes discusiones sobre el procedimiento para resolver impedimentos, recusaciones e interpretar las mayorías.
Los partidos Conservador, Liberal, Cambio Radical y La U sellaron un acuerdo político para que la Mesa Directiva terminara enviando el proyecto a la Corte.
La estrategia consistió en desistir de la apelación a la decisión del martes pasado, para permitir que se realizara una segunda votación, partiendo del punto de que no se alcanzaron los votos siguientes para hundir las objeciones.
Senadores de varios partidos políticos se retiraron del recinto durante la votación, con lo cual no hubo el quórum suficiente para aprobar o negar las objeciones. Ante esto, el presidente del Senado, Ernesto Macías, confirmó el envío del proyecto a revisión de la Corte, tal y como lo había establecido el alto tribunal.
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“Las bancadas presentes hacemos un llamado a construir una agenda para superar el debate entre el Sí y el No y así salir de la polarización que tiene agotado al país. Todos debemos trabajar por una agenda social que ayude a resolver los problemas de los ciudadanos y mejorar la calidad de vida de los colombianos”, explicaron los partidos a través de un comunicado.
Ante esto, el Gobierno interpretó lo ocurrido como un triunfo, pues con el rechazo de las objeciones en la Cámara y la falta de decisión, en dos votaciones, en el Senado, se aplicaría la discrepancia entre las cámaras y, en ese orden, se caerían los artículos objetados por el Gobierno.
“En nuestra opinión, las partes de los artículos que fueron objetados deben ser archivados, lo cual implica un claro triunfo del Gobierno Nacional”, indicó el alto comisionado para La Paz, Miguel Ceballos.
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Los contradictores de las objeciones tienen otra interpretación y afirman que la Corte les dará la razón sobre las mayorías y en ese orden se entenderían negadas, con los 47 votos del pasado martes.
La decisión final queda en manos de la Corte y el Senado ahora se concentrará en discutir el Plan Nacional de Desarrollo e intentar salvar otras iniciativas que están en riesgo de hundirse.
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