La ex primera dama de EE.UU. Melania Trump anunció la subasta de tres artículos, entre los que destaca un sombrero blanco que lució durante la visita a la Casa Blanca del presidente de Francia, Emmanuel Macron, junto a su esposa, Brigitte Macron, en 2018.En un comunicado de su oficina sobre la subasta, en la que la puja mínima se ha fijado en 250.000 dólares, Melania Trump concreta que además del sombrero, se incluirá una "exclusiva" pieza de arte en NFT creado por Marc-Antoine Coulon en la que el complemento de moda puede verse en movimiento, además de una acuarela del mismo artista.Se trata del segundo NFT que Trump saca a la venta en menos de un mes, puesto que a finales de diciembre ofreció al mejor postor otro NFT de un dibujo de sus ojos, creado también por Coulon, detallan los medios locales.Según la oficina de la esposa de Donald Trump, parte de los fondos obtenidos con la venta irán a parar a una iniciativa que forma parte del programa contra el acoso escolar "Be Best" que desarrolló siendo la primera dama de EE.UU., aunque no especifica qué porcentaje.El sombrero blanco, que está firmado por Melania Trump y que se considera la pieza central de la subasta, fue creado por su estilista personal, Hervé Pierre, para lucirlo junto al traje en blanco puro de Michael Kors valorado en más de 2.000 dólares que llevó para la ocasión.La presencia de Melania durante la visita de Emmanuel y Brigitte Macron, en abril de 2018, fue seguida de cerca por los medios, puesto que era una de sus primeras apariciones públicas junto a su esposo, tras conocerse el escándalo de las supuestas relaciones extramatrimoniales del expresidente estadounidense con la actriz porno Stormy Daniels.El pago de la subasta podrá hacerse exclusivamente con SOL, una criptomoneda.
Melania Trump, la esposa del expresidente estadounidense Donald Trump, no aspira a ser nuevamente la primera dama del país, un capítulo que considera "se acabó", reveló este domingo la cadena CNN."Ser primera dama de nuevo no es lo que ella quiere", dijo una de las personas con las que conversó CNN y que, según ese medio, tuvo una estrecha relación con la ex primera dama durante su paso por la Casa Blanca."Para ella -añadió la fuente-, fue un capítulo -y se acabó, y eso es todo".La versión periodística señaló que la esposa de Trump sólo ha sido vista públicamente una vez este verano, cuando salía en julio pasado de la Trump Tower en Nueva York junto al hijo de ambos, Barron.También ha aparecido en algunas publicaciones de Instagram de personas que pudieron verla en el club de golf de Trump en Bedminster, en Nueva Jersey.Al describir su estilo reservado, otra persona consultada por CNN reflexionó que la ex primera dama no será vista "en mítines ni eventos de campaña", incluso si Trump se postula para aspirar a un nuevo mandato presidencial.Este papel lo asumirían, según esa persona que no fue identificada, Lara Trump, la esposa de Eric, el tercero de los hijos de Trump, o Kimberly Guilfoyle, novia del mayor de la descendencia del exgobernante, Donald Trump Jr.Y la ausencia de Melania Trump de los mítines y eventos públicos parece haber sido normalizada por los seguidores del líder republicano."El hecho es que su base se acostumbró a no tenerla allí", explicó un operador político que trabajó con el expresidente durante su mandato.Por ahora, la vida de la ex primera dama discurre de forma privada, apuntó CNN, lo que, según otra persona que la conoce socialmente desde hace más de una década, "es como le gusta". "Cuanto más privada sea y no esté en el ojo público, mejor", agregó.En febrero pasado, Melania Trump anunció en Twitter la apertura de su oficina. Ese espacio lo opera desde Palm Beach (Florida) con una plantilla de tres empleados a tiempo completo, añadió CNN, que citó a "tres personas con conocimiento" del tema.
El expresidente de Estados Unidos Donald Trump recomendó este martes a los estadounidenses que se vacunen contra el COVID-19, y en especial a sus votantes, el grupo que más resistencia está mostrando a recibir el suero."Lo recomiendo (vacunarse), y se lo recomiendo a mucha gente que no quiere vacunarse, y mucha de esa gente votó por mi para ser honestos", afirmó Trump en una entrevista con Fox News.Trump y su mujer, la exprimera dama Melania Trump, se vacunaron contra la covid-19 antes de abandonar el poder, aunque no lo hicieron público en su momento.De hecho, los Trump fueron el único matrimonio expresidencial que no participó en una campaña de vacunación que han protagonizado Barack y Michelle Obama (2009-2017), George W. y Laura Bush (2001-2009), Bill y Hillary Clinton (1993-2001), y Jimmy y Rosalynn Carter (1977-1981).La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, instó precisamente este lunes a Trump a "alzar la voz sobre la seguridad y eficacia" de la vacuna al destacar que "todos los otros" expresidentes lo han hecho y dijo que el Gobierno de Biden apoyaría ese gesto.En la entrevista con Fox News, Trump dijo que la vacuna contra el COVID-19 "es buena, es segura y es algo que funciona"."Pero, de nuevo, tenemos nuestras libertades y tenemos que vivir con ello y eso también lo apoyo", afirmó Trump al referirse a la gente que ha decidido no vacunarse.Una encuesta reciente de CBS News indicó que el 34 % de votantes republicanos no tiene intención de vacunarse y que un 24 % todavía lo está sopesando, mientras que entre los demócratas tan solo un 10 % no quiere la vacuna y un 20 % todavía está indeciso.El gobernador de Georgia -el estado que menos gente ha vacunado de todo el país-, Brian Kemp, dijo la semana pasada que se están encontrando "vacilación" entre el grupo de republicanos blancos a la hora de vacunarse.En Estados Unidos, unos 72,1 millones de personas (un 21,7 % de la población) han recibido al menos una dosis de las vacunas de Pfizer, Moderna o Johnson&Johnson, de las cuales 39 millones (11,8 %) están ya completamente inoculadas.La mayoría de estados con un menor número de población vacunada son sureños y tradicionales feudos republicanos como la misma Georgia, Alabama, Tennessee o Texas.El expresidente de Estados Unidos Donald Trump recomendó este martes a los estadounidenses que se vacunen contra el COVID-19, y en especial a sus votantes, el grupo que más resistencia está mostrando a recibir el suero."Lo recomiendo (vacunarse), y se lo recomiendo a mucha gente que no quiere vacunarse, y mucha de esa gente votó por mi para ser honestos", afirmó Trump en una entrevista con Fox News.Trump y su mujer, la exprimera dama Melania Trump, se vacunaron contra la covid-19 antes de abandonar el poder, aunque no lo hicieron público en su momento.De hecho, los Trump fueron el único matrimonio expresidencial que no participó en una campaña de vacunación que han protagonizado Barack y Michelle Obama (2009-2017), George W. y Laura Bush (2001-2009), Bill y Hillary Clinton (1993-2001), y Jimmy y Rosalynn Carter (1977-1981).La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, instó precisamente este lunes a Trump a "alzar la voz sobre la seguridad y eficacia" de la vacuna al destacar que "todos los otros" expresidentes lo han hecho y dijo que el Gobierno de Biden apoyaría ese gesto.En la entrevista con Fox News, Trump dijo que la vacuna contra el COVID-19 "es buena, es segura y es algo que funciona"."Pero, de nuevo, tenemos nuestras libertades y tenemos que vivir con ello y eso también lo apoyo", afirmó Trump al referirse a la gente que ha decidido no vacunarse.Una encuesta reciente de CBS News indicó que el 34 % de votantes republicanos no tiene intención de vacunarse y que un 24 % todavía lo está sopesando, mientras que entre los demócratas tan solo un 10 % no quiere la vacuna y un 20 % todavía está indeciso.El gobernador de Georgia -el estado que menos gente ha vacunado de todo el país-, Brian Kemp, dijo la semana pasada que se están encontrando "vacilación" entre el grupo de republicanos blancos a la hora de vacunarse.En Estados Unidos, unos 72,1 millones de personas (un 21,7 % de la población) han recibido al menos una dosis de las vacunas de Pfizer, Moderna o Johnson&Johnson, de las cuales 39 millones (11,8 %) están ya completamente inoculadas.La mayoría de estados con un menor número de población vacunada son sureños y tradicionales feudos republicanos como la misma Georgia, Alabama, Tennessee o Texas.
El expresidente estadounidense Donald Trump y su esposa, Melania, fueron vacunados contra el COVID-19 en enero cuando aún estaban en la Casa Blanca, dijo una fuente próxima al exmandatario.Al contrario de su sucesor Joe Biden, que recibió la vacuna ante la televisión el 21 de diciembre, Trump nunca dijo que había sido vacunado."El presidente Trump y la Primera Dama fueron vacunados en la Casa Blanca en enero", dijo a la AFP sin más precisiones una fuerte cercana al expresidente.El domingo, en su primer discurso desde que dejó el poder el 21 de enero, Trump dijo que "todos deberían vacunarse".Ese comentario generó un cierto alivio debido a que muchos de sus simpatizantes se muestran escépticos sobre las vacunas.A comienzos de octubre, Trump se contagió del virus y estuvo hospitalizado durante varios días.
Jill Biden, la flamante primera dama de Estados Unidos, hará historia al mantener su empleo de profesora pese a las demandas de su nuevo rol, en el que marcará a buen seguro un fuerte contraste con su predecesora, Melania Trump.Jill Biden, de 69 años, ha dedicado su vida a la educación. Comenzó como maestra de secundaria para niños con necesidades especiales y durante la vicepresidencia de su marido en 2009 compaginó una apretada agenda institucional con su trabajo de profesora de inglés en un colegio universitario en Virginia, donde como primera dama seguirá desempeñando su trabajo.Esa decisión, la de seguir manteniendo su independencia laboral, además de mantenerse al frente de la oficina de la primera dama, es histórica."Para mi es difícil considerar mi decisión en términos históricos, porque ya enseñé durante los ocho años en los que fui segunda dama", explicó el mes pasado en una entrevista con el humorista Stephen Colbert.Pese a la intensa carrera política de Joe Biden, que intentó optar a la Presidencia en varias ocasiones y fue vicepresidente de Barack Obama durante ocho años, Jill ha desarrollado su carrera como docente y ha sido durante este difícil año una defensora de la importancia de los educadores durante la pandemia.La primera dama obtuvo en 2007 un doctorado en educación, un título por el que trabajó durante seis años, pero que recientemente fue objeto de críticas misóginas de un columnista de opinión del diario Wall Street Journal.La columna, repleta de comentarios machistas, criticaba a Jill Biden, que públicamente ha dicho que su doctorado es uno de los logros que más le enorgullecen, por usar públicamente ese título honorífico que posee, pese a no ser "médico ni haber ayudado a traer a alguien al mundo".La exprimera dama Michelle Obama respondió a aquellas críticas recordando que "no hay mejor ejemplo" de persona trabajadora que Jill.Ese ataque es un aperitivo de lo que le espera a Jill Biden en la Casa Blanca, dando forma a un papel en ocasiones ingrato, que ha sido tratado dentro los corsés reservados tradicionalmente para la mujer y que otras primeras damas han querido reformar.Jill y Joe se conocieron en 1975 en una cita organizada por el hermano del segundo. Jill estaba aún terminando su grado de inglés en la Universidad de Delaware y se estaba separando de su primer marido. Joe Biden venía de pasar tres duros años tras la muerte de su primera esposa, Neilia Hunter Biden, en un accidente de tráfico, en el que también falleció su hija Naomi, aún una bebé.Jill vino a reemplazar el vacío de la familia Biden para convertirse, no solo en esposa del entonces senador, sino también en madre para sus hijos, Beau y Hunter. "Puso las piezas de nuevo juntas. Me devolvió la vida y una familia", aseguró Joe Biden en una entrevista.Tras cuatro años de matrimonio, nació la única hija de ambos: Ashley Biden, activista y trabajadora social muy cercana al recién investido presidente.Jill, que creció en el seno de una familia de clase media en Filadelfia, ha intentado mantener un rol discreto e independiente de la política que ha vivido a diario durante décadas, primero en los años de su marido como senador y posteriormente como vicepresidente.Sus estudiantes la llaman "Doctor B" y pronto se enfrentarán al dilema de tratar con la primera dama de Estados Unidos, que compaginará una agenda de trabajo que podría poner prioridad a asuntos como la lucha contra el cáncer, la pandemia del coronavirus o la infancia.
El presidente saliente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, abandonó la Casa Blanca y abordó el helicóptero presidencial, el Marine One, este miércoles para trasladarse a su nueva residencia en Florida, sin asistir a la ceremonia del cambio de mando en la cual su sucesor, Joe Biden, tomará el poder.Trump, de 74 años, caminó por la alfombra roja y abordó un helicóptero acompañado por la primera dama poco después de las 08H15 (13H15 GMT). Al salir se remitió a decir que su mandato fueron "cuatro años fantásticos" y que para él representan el gran "honor" de su vida."Estaremos de vuelta de algún modo", afirmó a sus seguidores en la base aérea Andrews, en Maryland, a las afueras de Washington antes de subirse por última vez al avión presidencial Air Force One rumbo a su mansión privada en Palm Beach (Florida). Trump se dirige a la base aérea militar de Andrews (Maryland), a las afueras de Washington, donde celebrará un breve acto de despedida con seguidores, y posteriormente subirá al avión presidencial, Air Force One, por última vez para viajar a su club privado de Palm Beach (Florida).El magnate neoyorquino rompió así la tradición y no estará presente en la ceremonia de investidura de su sucesor.Trump no ha reconocido la derrota en las elecciones de noviembre pasado y sigue denunciando, sin evidencia, "fraude electoral".Con su salida de la Casa Blanca, concluyen cuatro años turbulentos marcados por la polémica en los que pasará a la historia como el primer presidente de EE.UU. al que se le han abierto dos procesos de enjuiciamiento político, el último de los cuales está pendiente en el SenadoEn desarrollo.
La primera dama estadounidense, Melania Trump, rompió una tradición al no invitar a su sucesora, Jill Biden, esposa del presidente electo de EE.UU., Joe Biden, a realizar un recorrido privado por la Casa Blanca antes de la transferencia del mando, revelaron este martes medios locales.La versión indicó que con ello se rompe con una tradición que se remonta a la reunión que sostuvieron Bess Truman, la esposa de Harry S. Truman (1945-1953) y Mamie Eisenhower, esposa de Dwight David Eisenhower (1953-1961), y que continuó en su momento Laura Bush, cuya hijas, Jenna y Barbara Bush, mostraron a Sasha y Malia Obama "cómo deslizarse por la barandilla de la residencia".También Michelle Obama invitó a Melania Trump, siguiendo al pie de la letra la que se considera una tradición no escrita entre las primeras damas.Brower menciona que, pese a que Betty Ford estaba furiosa cuando su esposo, Gerald Ford, perdió la Presidencia en 1976, recibió a su sucesora, Rosalynn Carter, no sin antes haber cancelado dos intentos previos de reunirse.De otro lado, la autora destaca la transición de los Bush a los Obama como una de las consideradas "más suaves de la historia moderna".Laura Bush, como primera dama saliente, invitó a Michelle Obama dos veces a la Casa Blanca: una sola y otra con sus hijas.La esposa de George W. Bush (2001-2009) incluyó como la primera parada del recorrido en la residencia presidencial las habitaciones que consideró le gustarían más a Sasha y Malia, que entonces contaban con 7 y 10 años de edad, según el artículo.A la ceremonia de posesión de Biden se espera que asistan los expresidentes Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama, que, junto a sus esposas, acompañarán posteriormente al mandatario electo, Joe Biden, a colocar una ofrenda floral en la Tumba del Soldado Desconocido.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, encabezó este sábado un abarrotado acto de campaña para el Senado en el estado de Georgia, mientras los contagios por la COVID-19 se han disparado en el país y las autoridades estatales y locales han llamado a la población a evitar los grupos numerosos y a usar mascarilla.Acompañado de la primera dama, Melania Trump, el gobernante habló ante decenas de personas, muchas de ellas sin cubrirse el rostro, que se congregaron en el aeropuerto de la localidad de Valdosta.La primera dama hizo de maestra de ceremonia de su esposo con una breve intervención en la que aseguró que Trump sigue luchando por sus seguidores "todos los días".La pareja presidencial se trasladó a Georgia para respaldar la candidatura al Senado de los republicanos Kelly Loeffler y David Perdue, quienes el próximo 5 de enero se enfrentará a los demócratas Raphael Warnock y John Ossoff, después de que ningún aspirante consiguiera suficiente margen el pasado 3 de noviembre para evitar una segunda vuelta.Si ambos demócratas se imponen, se acabaría el dominio republicano del Senado en una cámara dividida exactamente por la mitad, 50 a 50.SIN RECONOCER SU DERROTAMás de un mes después de las elecciones, que ha ganado su rival, Joe Biden, Trump insistió este sábado, sin presentar ninguna prueba, que los demócratas hicieron trampa."Sabes que ganamos en Georgia", afirmó el gobernante, pese a que los conteos señalan que fue derrotado en ese estado por más de 12.000 votos."Debes ir a votar y votar temprano a partir del 14 de diciembre. Tienes que hacerlo; hicieron trampa y manipularon esta elección presidencial, pero aun así las ganaremos", agregó Trump, cuyos esfuerzos legales por revertir el resultado presidencial han fracasado.En ese contexto, vaticinó que "también intentarán manipular esta elección", por lo que llamó a sus partidarios a asegurarse de que cuenten "todos los votos".LLAMADA AL GOBERNADORMedios locales revelaron este sábado que antes de su viaje a Georgia Trump llamó al gobernador de ese estado, el republicano Brian Kemp, para presuntamente instarlo a persuadir a los legisladores estatales para que revoquen la victoria a Biden y pedir que ordenara una auditoría de las firmas de los votantes ausentes.Según The Wall Street Journal, que citó a una persona familiarizada con la llamada, el mandatario planteó a Kemp que convocara una sesión especial del legislativo estatal para que los legisladores designaran electores pro Trump que inclinarían el Colegio Electoral a su favor.El diario The Washington Post, basado en dos fuentes, aseguró que el gobernador declinó esa petición."Como le dije al presidente esta mañana, he pedido públicamente una auditoría de firmas tres veces (20/11, 24/11, 3/12) para restablecer la confianza en nuestro proceso electoral y asegurar que sólo se cuenten los votos legales en Georgia", escribió Kemp en su cuenta de Twitter, sin entrar en detalles.Previamente, Trump se había referido al gobernador y al secretario de Estado de Georgia, el también republicano Brad Raffensperger, en un tuit."Ganaré Georgia fácil y rápidamente si el gobernador Brian Kemp o el secretario de Estado permiten una simple verificación de firma. No se ha hecho y mostrará discrepancias a gran escala. ¿Por qué estos dos 'republicanos' dicen que no? Si ganamos Georgia, ¡todo lo demás encajará!", sentenció Trump, cuyo mandato concluye el próximo 20 de enero.
El estado de Georgia (EE.UU.) confirmó este jueves la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales tras completar el recuento manual de los votos que apenas modificó los resultados.Biden obtuvo 2.475.141 votos (49,5 %) por delante del todavía presidente, Donald Trump, con 2.462.857 (49,3 %), según la Secretaría de Estado de Georgia, la autoridad electoral en el estado.Con el recuento manual Trump recortó unos 2.000 votos fruto de errores humanos durante el escrutinio, pero no fueron suficientes para alcanzar a Biden, ganador con una diferencia final de 12.284 sufragios.Biden se convirtió así en el primer demócrata que gana en la sureña Georgia desde que en 1992 lo hiciera Bill Clinton.La Secretaría de Estado hizo público el recuento después de que hoy mismo un tribunal federal en Atlanta (Georgia) rechazase la enésima demanda interpuesta por la campaña de Trump que tenía como objetivo retrasar la certificación (oficialización) los resultados.De este modo, está previsto que Georgia haga oficiales estos resultados este viernes, lo que confirmará la asignación de sus dieciséis compromisarios en el Colegio Electoral a Biden.Al ser la diferencia menor al 0,5 %, la ley electoral en Georgia permite a la campaña de Trump solicitar hasta el próximo martes un nuevo recuento, esta vez mecánico.Trump se ha referido al recuento manual en Georgia en repetidas ocasiones vertiendo acusaciones sin pruebas y ha criticado al secretario de Estado, máxima autoridad electoral, el republicano Brad Raffensperger, que ha recibido amenazas de muerte."El recuento falso que está ocurriendo en Georgia no significa nada, porque no permiten que las firmas sean examinadas y verificadas", afirmó esta semana en Twitter el presidente saliente, que aún no ha reconocido su derrota electoral.Trump y sus aliados han propagado la teoría desmentida por el propio Raffensperger de que en Georgia los votos por correo no pueden verificarse lo que habría llevado a que votaran incluso muertos.Raffensperger, de hecho, ha manifestado que Trump se autoboicoteó al deslegitimar el voto por correo en plena pandemia, lo que resultó en una menor participación de votantes republicanos que en las primarias celebradas en primavera, lo que le habría costado el estado.
La primera dama de EE.UU., Melania Trump, pidió este domingo que se cuente "cada voto legal" y llamó a proteger la democracia del país con "total transparencia", después de que las proyecciones de los medios dieran la victoria electoral al candidato demócrata, Joe Biden.La esposa del presidente estadounidense, Donald Trump, se pronunció después de que Biden fuese declarado ganador de los comicios del 3 de noviembre, resultado que el actual gobernante se ha negado a reconocer.Trump exigió el pasado jueves en su cuenta de Twitter: "¡PAREN EL RECUENTO!", en letras mayúsculas, y posteriormente reclamó que "¡CUALQUIER VOTO QUE LLEGÓ DESPUÉS DE LAS ELECCIONES NO DEBE SER CONTADO!".Al respecto, el portavoz de la campaña del republicano, Jason Miller, explicó ese día a la prensa que el mandatario no quiere que se sigan contando las papeletas que llegaron por correo, un recurso que 65 millones de estadounidenses usaron para evitar aglomeraciones en la jornada electoral debido al coronavirus.Trump se ha posicionado en contra del voto por correo porque los datos muestran que los demócratas usaron esa fórmula en mayor proporción que los republicanos, que prefirieron esperar a la jornada electoral.El sábado, Twitter, la red social preferida por Trump, marcó como "cuestionado" un tuit del gobernante en el que se declaraba ganador de las elecciones, cuando los principales medios del país ya han proyectado la victoria de Biden.En su mensaje, Trump prosiguió las acusaciones de días anteriores según las cuales se habrían producido irregularidades en las votaciones y en el escrutinio, pese a que no existen pruebas de ello.Twitter marcó el mensaje con la nota "Esta acusación de fraude electoral es cuestionada" y evitó esconderlo parcialmente o limitar su difusión como sí ha hecho con decenas de tuits del presidente durante los últimos cuatro días, en los que Trump ha insistido en reclamar la victoria y lanzar acusaciones de fraude.Biden se presentó el sábado en su discurso de la victoria como el líder conciliador que buscará acabar con la polarización en el país y aseguró que "es el momento de sanar a Estados Unidos".La victoria de Biden desató celebraciones en distintas ciudades del país, aunque muchos de los partidarios republicanos y el presidente -que este domingo volvió por segundo día consecutivo a su club de golf a las afueras de Washington- se niegan a reconocer los resultados.
El exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas lanzó un llamado de auxilio a los presidente de Colombia y México para que intercedan a su favor, luego de ser detenido en un asalto policial a la embajada mexicana en Quito el pasado 5 de abril."Estoy en la peor prisión de Ecuador y en huelga de hambre. Ayúdeme", escribió Glas al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, en un manuscrito fechado el 15 de abril y conocido por la AFP este jueves.El exfuncionario, sobre quien pesa una condena por corrupción, se encuentra en una cárcel de alta seguridad de Guayaquil, Ecuador.La incursión armada para capturarlo condujo a México a romper relaciones con Ecuador y a presentar una demanda ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).Quito considera ilícito el asilo político otorgado a Glas un día antes de la operación policial, alegando que esa figura excluye los delitos comunes.Pero el Gobierno mexicano considera que hay indicios de una persecución política contra el exnúmero dos del gobierno del presidente socialista Rafael Correa (2007-2017), que se refugió en la embajada en diciembre pasado cuando se hallaba en libertad condicional.Glas, de 54 años, también agradece a López Obrador por el asilo y le pide "perdón como ecuatoriano" por la irrupción en la sede diplomática."Aquí hay una persecución brutal contra todos los progresistas. Solo la ayuda internacional puede hacer algo", subrayó el exvicepresidente tanto a López Obrador como al mandatario colombiano Gustavo Petro.En su mensaje a Petro, también del 15 de abril, Glas afirma además que fue sacado de la embajada con "tortura".Un video del interior del edificio, anexado por México a su demanda, muestra a los agentes cargando a Glas aparentemente esposado, y también cuando arrastran por el cuello al diplomático mexicano Roberto Canseco.Petro había anunciado previamente que pediría a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) medidas cautelares a favor de Glas, quien debió ser hospitalizado entre el 8 y 9 de abril por negarse a recibir alimento en el reclusorio, según las autoridades ecuatorianas.El exvicepresidente se refugió en la embajada luego de que la justicia dictara una orden de arresto en su contra por otro supuesto caso de corrupción.
Este jueves, 18 de abril, el presidente Gustavo Petro sorprendió al país al anunciar un día cívico para este viernes con el objetivo de ayudar con el impacto de los bajos niveles de agua en algunos embalses y el estrés que hay entorno en el sistema energético."Queremos decretar un día cívico en Colombia, un día cívico para que la gente no utilice la energía eléctrica al máximo posible y podamos guardar una energía que necesitamos en los próximos días y sobre todo para que la gente disminuya en lo que se pueda el consumo de agua potable", dijo el presidente Petro.Sin embargo, en redes sociales, la noticia no tuvo el impacto positivo que espera el jefe de Estado ni el apoyo esperado, pues, algunos, criticaron la decisión del mandatario en especial porque la fecha coincide con su cumpleaños que es este 19 de abril.Miembros de la oposición como María Fernanda Cabal, Miguel Polo Polo, David Luna, Miguel Uribe criticaron la decisión del presidente y aseguraron que “es el temor” por la marcha que han convocado al 21 de abril en contra del Gobierno.“Advertimos desde hace más de 6 meses -como lo hicieron los expertos- la posibilidad del apagón; el Gobierno dijo que no había ningún riesgo, no tomó previsiones. Ahora, en vísperas de marchas en contra del Gobierno, pretende decretar un puente vía decreto para que la ciudadanía no salga a marchar”, criticó la senadora Paloma ValenciaPero algunos miembros del Pacto Histórico y cercanos al Gobierno nacional apoyaron la medida del presidente resaltando el fuerte compromiso con el mandatario tiene con el medio ambiente y la fuerte crisis que atraviesa el país en este momento.Por otro lado, usuarios en redes sociales, ciudadanos del común, han mostrado positivismo por la noticia pese a la negativa de empresas, entidades y otros sectores del anuncio de un día para otro. Por su puesto, los memes también hicieron presencia por parte de cientos de personas.
Al tiempo que avanzan las investigaciones para establecer con claridad los hechos violentos que generaron pánico y consternación en la mañana de este jueves en inmediaciones de la Clínica Medellín en El Poblado, varias han sido las entidades que han manifestado su solidaridad con amigos y familiares del urólogo Juan Guillermo Arístizabal, quien fue ultimado con varios impactos de bala en su consultorio del piso 9.Ante el caso, el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Salud, rechazó estos hechos violentos y a través de un comunicado indicaron que este crimen se “constituyen en una grave violación al Derecho Internacional Humanitario y a la Misión Médica tal como se establece en las convenciones internacionales y en el marco normativo nacional”.“El personal sanitario desempeña un papel crucial en la protección y preservación de la vida de las personas, y es inaceptable que sean objeto de violencia y ataques en el ejercicio de su noble labor. Por ello, es imperativo que se implementen”, indicaron en el comunicado.A esta misma petición se sumó Asmedas en Antioquia, quien a través de su presidente en el departamento, indicó la necesidad de reforzar las medidas de protección tanto en centros de atención públicos como privados."Esto es una expresión de la situación que se vive en el sector de la salud y hoy evidentemente lo que sí requerimos a las autoridades que agilice la investigación sobre los hechos y también a las instituciones que tomen nota de lo que ha ocurrido para que reforcemos la seguridad del personal de la salud en todos los servicios", dijo el representante de Asmedas.En su pronunciamiento el Ministerio también exigió a las autoridades de seguridad y judiciales a realizar una investigación exhaustiva y a tomar las medidas pertinentes para garantizar que los responsables sean llevados ante la justicia y evitar la impunidad.
La Universidad de los Andes anunció que, pese al decreto del presidente Gustavo Petro, sí tendrá clases durante el día cívico del 19 de abril. Argumentó que la medida del Gobierno solo cobija a entidades públicas."Les informamos que este viernes 19 de abril, nuestras actividades académicas y administrativas se llevarán a cabo con normalidad, dado que el decreto del día cívico anunciado por la Presidencia de la República solo abarca a las entidades públicas del orden nacional", informó la universidad en un corto comunicado.En ese sentido, desde el alma mater esperan que este día cívico tanto estudiantes como administrativos asistan a la institución para cumplir con las "habituales clases y actividades programadas".Y es que el presidente Gustavo Petro informó que este 19 de abril será día cívico en Colombia para que la gente no utilice la energía eléctrica, en la medida de lo posible, y ahorrar agua.Según el mandatario, hay que lograr que suban los niveles de los embalses del agua potable en la sabana de Bogotá. Por esto, también recomendó a los bogotanos que salgan de viaje durante este fin de semana a lugares que no están afectados por la escasez de agua.
La Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (Amech) apoyó la ampliación del permiso por paternidad remunerado en México, un elemento importante para el "impulso del desarrollo profesional de las mujeres" y de una sociedad "más igualitaria".En un comunicado, la organización respaldó que estas licencias pasen de los cinco días actuales a los 20, una medida que la Cámara de Diputados aprobó el pasado diciembre como una reforma de la Ley del Trabajo."Representa un avance significativo en materia de derechos laborales y equidad de género. Mejora la retención de talento en empresas al demostrar compromiso con la conciliación laboral", destacó.Aseguró que permite a las mujeres "contar con un mayor apoyo durante los primeros días de crianza" e "impacta positivamente en lo laboral y económico".En opinión de la Amech, el crecimiento de la participación femenina entre 2005 y 2023, que aumentó cinco puntos porcentuales, "ha sido mínimo".Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, el 76,1 % de los hombres estaban en el mercado laboral en el tercer trimestre de 2023 frente al 46,4 % de las mujeres.Sin embargo, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, pidió a mediados de marzo aplazar hasta después de las elecciones del 2 de junio distintas discusiones en el Congreso de la Unión, también la que aprobaría de manera definitiva este aumento.Actualmente, la reforma se encuentra entre los temas pendientes en el Senado.De hecho, la organización reconoció la "controversia" que ha sobrevolado esta ampliación, concretamente por las reticencias expresadas por organismos públicos como el Instituto Mexicano del Seguro Social o la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que pidieron reducir la propuesta a 10 días.La falta de definición de López Obrador sobre estos temas ha generado polémica, en especial porque ha respaldado otras iniciativas laborales, como el aumento del salario mínimo, reformas al sistema de pensiones y la eliminación del “outsourcing” o subcontratación."La ampliación del permiso por paternidad emerge como una necesidad urgente", advirtió la Amech, que apremió al Estado y al empresariado a "reconocer este derecho y a colaborar para su efectiva implementación".