Acuerdo de Escazú, una promesa incumplida del Gobierno de Iván Duque

Uno de los compromisos del presidente Iván Duque con los ambientalistas y con otros sectores que han venido participando de manifestaciones en las calles del país, es tramitar con éxito la ratificación en el Congreso del llamado Acuerdo de Escazú.Sin embargo, hasta ahora ha sido una promesa incumplida, porque en la legislatura pasada, el tema se hundió y ahora, a pesar de que el viernes pasado, coincidiendo con el viaje de Duque a la cumbre COP26 en Glasgow, se presentó el proyecto de nuevo ante el Congreso, la verdad es que pareciera que el gobierno no tiene afán en que se apruebe la iniciativa.Sectores políticos de oposición criticaron que en esta oportunidad, el proyecto haya sido presentado sin mensaje de urgencia, que es un recurso que tiene en sus manos el gobierno, para pedirle al Congreso que priorice asuntos que considera vitales para el país.Este martes, el presidente Iván Duque tuvo una charla con algunos ambientalistas en el marco de la COP26, en la que los jóvenes le criticaron las demoras en el trámite del Acuerdo de Escazú, a lo que el jefe de Estado justificó que el Congreso y el país deben darle una discusión profunda al tema y terminó diciendo que si en algún momento se necesita mensaje de urgencia para que avance más rápidamente, el gobierno utilizará esa figura.¿Por qué es importante el Acuerdo de Escazú? Porque es una herramienta fundamental para la defensa de los derechos de los defensores del Medio Ambiente, actualmente expuestos a intimidaciones e incluso en medio de su asesinato en Colombia, que se ha convertido en el país más peligroso para ejercer ese tipo de liderazgos, según estadísticas de varias Oenegés.Se trata de un tema muy controversial, porque algunos empresarios y políticos consideran que el Acuerdo de Escazú potenciaría la necesidad del uso de consultas previas a comunidades étnicas y raizales, lo que en su opinión, significaría ponerle “freno de mano” a obras de infraestructura, a la minería y a otros temas centrales para el desarrollo de la economía.No la tiene fácil el Presidente Duque, en medio del compromiso que adquirió para ratificar el Acuerdo de Escazú y frente a las voces críticas de su partido político y de un sector empresarial frente a las implicaciones de esa determinación.Escuche el análisis de Ricardo Ospina en Mañanas BLU: