Después de dos días de diálogo, se superó la crisis por el bloqueo de vías que mantenían los campesinos cultivadores de cebolla en la subregión del Catatumbo, en Norte de Santander.
Desde el pasado 30 de enero, tomaron la decisión de permanecer en las vías que comunican Cúcuta-Ocaña y la Costa Atlántica, así como la ciudad de Ocaña con el Catatumbo.
Ante esta situación, llegaron a Ocaña el presidente de la Agencia de Desarrollo Rural, Luis Alberto Higuera, y el ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña. Con ellos sostuvieron mesas de diálogo y lograron acuerdos importantes que permitieron solventar la crisis y, además, levantar el paro de manera definitiva.
Dentro de lo pactado se encuentran: controles con la Policía Fiscal y Aduanera y la DIAN en el sector de Rumichaca en Ipiales, subsidios para resarcir las pérdidas de los campesinos afectados por los bajos precios y la acumulación de cebolla en sus fincas, soluciones financieras de la mano con el Banco Agrario para quienes tienen préstamos con esta entidad y la compra de un porcentaje del total de las toneladas acumuladas de cebolla por parte de la ADR.
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Además, quedó firmado un compromiso para garantizar la salvaguarda de la cebolla que ingresa desde Perú bajo el tratado de libre comercio que existe con Colombia. Este punto, según los labriegos, les permite vender sus cosechas en mercados de Santander, Cundinamarca, Montería, Atlántico y Magdalena. Sin embargo, el Ministerio de Comercio anunció que analizará de manera profunda esta petición durante los próximos 35 días.
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