La Contraloría de Bucaramanga halló un daño fiscal millonario por la pérdida de luminarias y chatarra de las bodegas que tiene la alcaldía para almacenar elementos del sistema de alumbrado público.
Según el informe de la auditoría realizada por un equipo experto de la Contraloría Municipal, el daño fiscal es por $23.442 millones, representados en $21.000 millones de las luminarias reemplazadas y $1.700 millones de luminarias nuevas que también desaparecieron de las bodegas La Hormiga y Villas de San Ignacio.
“La administración central no pudo demostrar, mediante acto administrativo, que estos fueren residuos o chatarra. Asimismo, no se logra demostrar, mediante procedimientos establecidos por la misma administración central, que estos bienes fueran declarados en baja contablemente. Se demostró que la desaparición del material de alumbrado público se llevó a cabo en la vigencia 2024”, dice el informe auditor de la Contraloría de Bucaramanga
El ente fiscal también pudo determinar que el secretario de Infraestructura, Jorge García (para la época de los hechos) solo seis meses después (17 de julio de 2024) se pronuncia ante la Oficina Asesora de Control Interno de Gestión sobre las denuncias de la desaparición de las luminarias.
La denuncia inicial fue interpuesta por el veedor ciudadano Ramiro Vásquez, quien dijo que “no se conoce el paradero de material de alumbrado público que estaba almacenado en el Centro de Desarrollo Infantil de la Inmaculada, frente a Centroabastos, y el depósito de la Alcaldía de la Puerta del Sol”.
El veedor destacó que, aunque algunos de estos materiales podrían haber sido considerados inservibles, debieron seguirse procedimientos legales para darles de baja, "tienen que darle de baja, bien sea que lo vendan como chatarra, pero tienen que sacarlo con unos procedimientos legales establecidos," explicó Vásquez.
Por este hecho, ante la Fiscalía fue denunciado el alcalde de Bucaramanga Jaime Andrés Beltrán, y cuatro funcionarios más de su administración, por la pérdida de material de alumbrado público que desapareció de las bodegas del municipio.
“Eran postes de luz, luminarias, transformadores, cajas de inspección y hasta maniquíes, que tiene un valor millonario y particulares llegaron en camiones y hurtaron ese material que tiene un valor millonario. Era una chatarra valiosa porque todo estaba en buen estado”, aseguró el exconcejal de Bucaramanga Emiro Arias, quien interpuso la denuncia penal contra el alcalde.
En total, fueron 32.526 luminarias y 330 postes metálicos, elementos que, en su tiempo, fueron adquiridos por anteriores administraciones y que fueron dadas como chatarra para los contratos de modernización en la ciudad.
La Contraloría de Bucaramanga informó que en esta auditoria donde se hallaron irregularidades en el manejo del alumbrado público de la ciudad también debe responder el exalcalde Juan Carlos Cárdenas, la exsecretaria de Hacienda, Saray Rojas y otros exfuncionarios de la anterior administración por no haber cumplido con el Manuel de Políticas contables del municipio de Bucaramanga, con relación al manejo de bienes inmuebles e inservibles.
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