SuperSalud defiende designación de contralores en EPS intervenidas: “No hay irregularidades”

El representante a la Cámara, Andrés Forero, denunció un posible conflicto de intereses tras revelarse que los contralores designados por la Superintendencia Nacional de Salud para supervisar las intervenciones de las EPS Sanitas y Nueva EPS son pareja. Esta situación ha generado controversia, debido a la importancia de los contralores en el proceso de intervención de estas entidades, ya que son los encargados de validar si la gestión que realiza la administración temporal impuesta por la Superintendencia es correcta y adecuada.Forero expresó su preocupación y aseguró que, más allá de los vínculos políticos que pudieran existir con algunos congresistas oficialistas, lo que realmente genera alarma es que los responsables del control de estas dos EPS intervenidas sean esposos. Según el representante, esta relación podría comprometer la objetividad e imparcialidad en la supervisión de la administración de las empresas de salud, lo que podría afectar el proceso de intervención.Sin embargo, la Superintendencia Nacional de Salud se pronunció al respecto y defendió la legalidad de los nombramientos. Afirman que no existe ninguna irregularidad en la designación de los contralores, quienes, según la entidad, actúan como personas naturales con responsabilidades individuales y en el marco de las funciones que establece la resolución 2599.La Superintendencia destacó que, de acuerdo con sus normativas, un conflicto de intereses solo ocurriría si uno de los contralores fuera también interventor de la misma EPS, lo que no es el caso en esta situación.Además, la Superintendencia subrayó que la elección de ambos contralores se basó en su experiencia profesional y que fueron evaluados de manera independiente. De esta forma, según la entidad, los nombramientos no implican un riesgo de parcialidad o de toma de decisiones influenciadas por su relación personal.El debate continúa, y algunos sectores insisten en que se debe revisar con mayor detalle la elección de los contralores, para asegurar que la intervención en estas EPS sea completamente transparente y libre de cualquier influencia externa que pueda poner en duda su imparcialidad.