En los últimos días se conoció el caso de una mujer que reside en La Junta en el sur de La Guajira, cerca de Valledupar y se encontraba en una clínica de la capital del Cesar.
Días después de los tratamientos, la mujer, atendida por la EPS Asmet Salud, fue enviada a un motel conocido como Residencias Passion para su recuperación.
La EPS argumenta que no fue la entidad quien tomó la decisión de internarla en el motel y aclara que subcontratan un operador conocido como Vital Medic que se encargó de esta diligencia.
Sin embargo, cuando el caso fue de conocimiento público, la EPS tomó el correctivo y funcionarios de la Secretaría de Salud llegaron a las instalaciones, verificaron que el sitio no cumplía con las condiciones y ordenaron el traslado inmediato a la Clínica Santo Tomás.
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Blu Radio habló con la hija de la mujer y contó que su madre fue internada en el motel el domingo a las 9:00 de la mañana y solo fue trasladada a una clínica el lunes hacia el mediodía.
También se conoció que esas instalaciones de las residencias ya han sido selladas en ocasiones anteriores por parte de la Secretaría de Salud municipal por problemas sanitarios.
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El propietario del motel contó que hizo un contrato verbal con Vital Medic en el que le arrendaban todas las habitaciones, por lo que se presume que si no se hubiese conocido el caso de esta mujer, allí hubieran trasladado a otros pacientes.
En entrevista con Blu Radio, la gerente de la EPS Asmet Salud, Jacqueline Cortés, aseguró que “la señora María Mercedes estuvo hospitalizada en UCI durante dos meses y luego se consideró que debía ser tratada en su casa”.
Sin embargo, aseguró que “desafortunadamente la IPS Vital Medic arrendó un lugar inapropiado y con un antecedente que no es bien recibido socialmente”.
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