Sala Amiga de la Familia Lactante, un espacio seguro para amamantar
Migrantes y nacionales pueden visitar este espacio para amamantar de forma segura e higiénica
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Jolimar Sarmiento es una migrante venezolana del estado Miranda, que llegó a Colombia debido a la difícil situación en su país. Tiene dos hijos con los que pasa la mayor cantidad de tiempo posible, pero también debe salir a trabajar en la plaza del Doce de Octubre, en donde encontró una oportunidad para ganar dinero, sostener a su familia y costear una vida en Bogotá.
“Es mejor no amamantar uno en la calle, todo sudado, todo incómodo. Acá descansamos y los niños también descansan los pies. No estar en la calle sacando el seno y todo eso”, cuenta Sarmiento.
En Bogotá existen 342 “Salas Amigas de la Familia Lactante” y la más reciente inauguración fue la del Doce de Octubre en el centro Abrazar, espacio para que padres y madres migrantes puedan dejar a sus hijos durante el día, recibiendo acompañamiento, comidas y cuidado. Sin embargo, las salas de lactancia están abiertas para todas las ciudadanas que busquen un espacio adecuado para amamantar a sus bebés.
A partir de una alianza entre la Secretaría de Integración Social (SDIS) y la ONG Save The Children, nació este nuevo espacio cercano a la plaza de mercado del Doce de Octubre, en la carrera 51 con calle 72.
La finalidad de las “Salas Amigas de la Familia Lactante” es promover la lactancia por su valor nutricional, en un espacio seguro en el que las mamás pueden dejar su leche y a sus hijos, para que expertos de la SDIS los alimenten con ella.
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Marta Liliana Huertas, subdirectora de Nutrición de la SDIS, explicó que “el reto de todos los que trabajamos en infancia, es que los niños sean amamantados de forma exclusiva con leche materna hasta los seis meses, y de manera complementaria hasta los dos años”.
De hecho, según datos de la Organización Mundial de la Salud, la lactancia materna óptima podría salvarles la vida a 820.000 niños de cinco años o menos, debido al rol fundamental que esta juega en la salud de un neonato. Entre los beneficios, la OMS se refiere a la protección frente a infecciones gastrointestinales y reducción de la mortalidad.