Fue declarada culpable en julio de matar en 2023 a los familiares de su marido -del cual estaba separada- durante un almuerzo que comenzó con una oración y conversación animada, pero terminó en tragedia.
El incremento aparentemente pequeño fue suficiente para hacer que tormentas, olas de calor y otros fenómenos climáticos fueran más mortales y destructivos.