La Personería de Medellín denunció que 35 migrantes irregulares, la mayoría niños, han sufrido deterioros de salud en su travesía por la ciudad para llegar a la frontera con Panamá.
Unos 11.159 haitianos, cubanos y otros extranjeros han llegado desde el sur del país a la terminal de transporte del norte en el último mes para continuar su recorrido hacia el municipio de Necoclí, en el Urabá antioqueño, para luego pasar a suelo panameño en busca del sueño americano.
Si bien no ha habido represamiento, la Personería de Medellín sí ha identificado a estos migrantes con afectaciones a la salud, 75% de ellos menores de edad. Estos extranjeros sufren deshidratación, vómito y mareos, debido al cambio de clima y condiciones de viaje.
Dayana Marcela Vanegas, personera Delegada de la Unidad para la Protección del Interés Público de Medellín, señaló que se hace un monitoreo a las condiciones de los migrantes.
"Hay que evaluar cómo llegan y cómo salen los migrantes. Hemos tenido que han aumentado la atención a los niños porque han venido con deshidratación por el tema del transporte", explicó la funcionaria.
A Necoclí sigue la llegada de migrantes y aumentó hasta 1.000 diarios, pues estarían llegando por otras terminales de transportes diferentes a la de Medellín o por transportes clandestinos.