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Autoridades de gestión del riesgo, INVÍAS y varios municipios atendieron la emergencia presentada en la Autopista Medellín - Bogotá a la altura del municipio de San Luis, donde cientos de metros cúbicos de agua cayeron por la cascada La Cuba, ocasionando al menos tres deslizamientos de tierras.
Por la cantidad de agua la carretera se convirtió en una especie de quebrada durante varios minutos, dejando cientos de vehículos apostados a lado y lado del derrumbe, por más de 12 horas.
Luego de medio día de trabajo, personal del INVIAS logró dar paso a un carril, pero cientos de transportadores como Edwin Rodríguez y Bernardo Valencia llamaron la atención sobre el difícil estado de la carretera.
“Esta vía no está tan óptima como para tener los peajes tan caros, hay muchos huecos y también muchos derrumbes”, dijo el primer transportador.
Muy mala, de El Santuario a Doradal demasiado mala, mucho hueco y ahora los derrumbes por el invierno
En algunos casos los desplazamientos hacia Bogotá, Neiva, Ibagué o Medellín, terminaron duplicando o triplicando el tiempo para los viajeros.
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