Aproximadamente 300.000 jóvenes de Antioquia están apenas regresando a sus lugares de estudio debido al peligro que conlleva, en algunos municipios, acudir a los colegios a raíz de los recientes problemas de orden público que se han presentado en el departamento.
Por eso, en Antioquia, la educación ha sido otra de las preocupaciones, a parte del desabastecimiento de gas, alimentos y problemas de orden público que dejaron el paro armado del Clan del Golfo en el Urabá, Bajo Cauca, nordeste y suroeste de Antioquia.
Juan Correa, secretario de Educación de Antioquia, dijo que Urabá es una de las regiones más afectadas con 70.000 jóvenes sin poder ir a clase, problemática que se da en municipios como San Juan de Urabá, Mutatá, Frontino y Yondó.
“Estamos haciendo una coordinación con todos los rectores de manera permanente, algunos nos han reportado que están llegando nuevamente los estudiantes, otros dicen que están haciendo actividades de trabajo en casa”, indicó el funcionario.
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Correa agregó que las instituciones han sido marcadas con las siglas de los grupos al margen de la ley y que serán los rectores y alcaldes los que decidan si los jóvenes regresan a las clases.
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