Cerca de 500 personas entre comerciantes y empleados de establecimientos de distintos sectores de Cartagena, hicieron un plantón en la tarde de este martes en la Plaza de la Aduana, frente a las instalaciones de la Alcaldía con el fin de solicitarle al alcalde Pedrito Pereira que los escuché y reconsidere la medida que restringe el horario hasta las tres de la mañana y se pueda extender una o dos horas más. Los comerciantes sostienen que las pérdidas son millonarias.
“La idea de Cartagena es seguir siendo destino turístico y vemos que estamos en desventaja de otras ciudades como Santa Marta donde aumentaron horas a la rumba, o en Bogotá donde el alcalde propuso una estrategia en donde los establecimientos que cumplen unas normas y requisitos les aumentaron dos horas. Estamos perdiendo mucho dinero” señaló Alejandro Sarasti, miembro de la junta directiva de Asocomercios.
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Los comerciantes sostienen que en la pasada reunión con la Alcaldía expusieron toda la serie de perjuicios que sufren con el decreto. Aseguran que la administración distrital tomó decisiones sin tener en cuenta sus peticiones.
Varios de los líderes de la protesta argumentaron que generan en promedio cerca de 5.000 empleos en la ciudad.
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Mayra Rodríguez, una madre cabeza de hogar quien desde hace cinco años trabaja en discotecas, asegura que sus ingresos se han visto afectados.
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“Llevábamos once meses esperando este mes, yo gano por comisión y hasta las tres de la mañana no voy a ganar nada”, expresó.