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Tensa situación se vive en el corregimiento de Aguada de Pablo, jurisdicción de Sabanalarga, Atlántico, por la molestia de la comunidad por el no cumplimiento de promesas políticas de años anteriores.
Hacía el mediodía de este domingo, el Esmad de la Policía debió intervenir para retomar el control de la situación. La intervención del escuadrón antidisturbios desencadenó fuertes enfrentamientos con la comunidad que reaccionó lanzando piedras y todo tipo de objetos contundentes.
¿Porqué se presentaron los desmanes en Aguada de Pablo?
Todo inició por una protesta de un amplio número de personas que decidió apostarse a la entrada del único puesto de votación de la zona, pero ante la insistencia de un pequeño grupo por ejercer su derecho al voto se dio la alteración al orden público.
Líderes como Nibier Berdugo advierten que la comunidad está esperando los refuerzos de la Policía con pimpinas llenas de gasolina dispuestos a lanzárselos en llamas para evitar que alguien vote.
“La comunidad se siente ultrajada y maltratada por parte del estado y dicen de que la única forma de poderse defender es con palo y gasolina ante la fuerza que trae la autoridad nacional”, puntualizó el ciudadano.
En esta población hay un potencial electoral de unas 3.000 personas. Hay que decir que en medio de los desmanes la comunidad le partió los vidrios de una camioneta del CTI de la Fiscalía.
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