En el río Magdalena se acabaron los peces

Los colombianos día a día nos preguntamos por qué tantas lluvias, inundaciones, avalanchas y otra gran cantidad de desastres naturales, pero no nos preguntamos de donde sale el agua que nos llega todos los días para bañarnos, para hacer la sopa en el restaurante de la esquina o para lavar la losa que queda sucia.

Tampoco nos preguntamos cómo puede afectar que gastemos bolsas plásticas como si esto fuera un deporte, ni que pasa con todo el humo del carro en el que a diario viajamos cómodamente creemos que no pasa nada, o ni siquiera nos cuestionamos sobre estos temas.

Lea también: Preocupación en el Atlántico por el aumento de los niveles del río Magdalena

Ejemplo: hace 20 años usted metía una red de pesca al río magdalena y sacaba 10 peces; ahora usted hace lo mismo y aparte de sacar latas, botellas y bolsas, si tiene suerte,  puede que saque un pez.

Según un estudio de World Wildlife Fund, que en español traduce Fondo Mundial para la Vida Silvestre, las capturas en la cuenca del Magdalena disminuyeron casi un 90 por ciento desde la década de 1970 y los desembarcos pesqueros en la cuenca del Orinoco declinaron un 85 por ciento entre 1997 y 2009.

En la cuenca del río Putumayo, el descenso registrado en esos años fue cercano al 80%, es decir, que el pescado de río casi que está desapareciendo en Colombia.

Hay organizaciones  que son creadas en otros países, donde si  les interesa el medio ambiente, y donde ya están viendo las consecuencias de no preocuparse por cuidarlo. Por primera vez WWF ha realizado un estudio muy importante sobre los ecosistemas en Colombia y los resultados no son buenos.

De las 1.853 especies de plantas evaluadas, 665 que equivalen a un 36 por ciento se encuentran amenazadas de extinción. La situación de la fauna terrestre colombiana también es preocupante: de 284 especies de animales terrestres, 41 están en peligro crítico, 112 amenazadas y 131 son vulnerables.

De avanzar estas tendencias, Colombia tendría que borrar de la lista de su biodiversidad especies de abejas que cumplen funciones críticas de los ecosistemas, o colibríes, paujiles, loros y monos araña, entre otros.

Básicamente todos los daños que hay en los ecosistemas son causados por los humanos y todas las soluciones también recaen en los  humanos. Ahorrar agua, no usar tantas bolsas plásticas, apagar las luces cuando no sean necesarias, desconectar los electrodomésticos y otras tantas acciones aunque parezcan poco, sí contribuyen con el medio ambiente.

Para acceder de forma rápida a nuestra señal en vivo y contenidos destacados, DESCARGUE ya la app de Blu Radio.