La inclemencia de las lluvias continúa golpeando con gran fuerza a la región Caribe, especialmente a los departamentos de La Guajira, Atlántico; sobre todo en Barranquilla, Magdalena, Córdoba, Cesar y San Andrés y Providencia.
Con lluvias sostenidas durante todo el fin de semana según los pronósticos del IDEAM, se agudiza la alerta en la costa norte colombiana por las fuertes precipitaciones que, en su mayoría, vendrán acompañadas de tormentas eléctricas.
Elalcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, hizo un enérgico llamado a los barranquilleros para "evitar imprudencias" durante la lluvia, a resguardarse ante el riesgo de emergencias y estar atento a los pronósticos que se emiten desde el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, IDEAM.
"Le pedimos a los barranquilleros que estén alertas, especialmente, las familias que viven en zonas adyacentes a los arroyos, pues es importante que se tomen las medidas de precaución para evitar hechos que lamentar", sostuvo el mandatario,
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Así mismo, señaló que "al término de nuestro comité de Gestión del Riesgo, ya tenemos definida una hoja de ruta para atender las emergencias que se han presentado —al menos— en diez barrios que han registrado graves inundaciones, entre los cuales tenemos Bellavista, Villas del Rosario, Juan Mina, Rebolo, La Luz, La Chinita, Don Bosco, entre otros.
En el caso de los municipios del Atlántico, la ola invernal ha dejado más de 3.200 familias damnificadas, cuyas emergencias han llevado a decretar la calamidad pública en 19 municipios, con especial atención en Baranoa, Palmar de Varela, Repelón, Sabanalarga, Manatí, Santa Lucia, Campo de La Cruz, Suán, entre otros.
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¿Qué pasó con el Mercado Público de Barranquilla?
El represamiento de las aguas generó graves emergencias en el Mercado Público de Barranquilla, llevando a que los comerciantes se vieran obligados a bajar esteras y cerrar negocios, pues con el agua hasta las rodillas, no lograron cumplir con la jornada comercial de este jueves en la tarde.
Como "desolador" catalogó Pedro Ramírez, líder del Mercado Público, el panorama que dejó la fuerte lluvia de las últimas 48 horas, pues entre el barro, lodo y basura, los comerciantes han mostrado su preocupación por la baja en las ventas, ya que las aguas represadas imposibilitan el desplazamiento de compradores y camiones de carga.
"Es que el taponamiento de las aguas lleva a que se concentren en el Mercado Público de Barranquilla, pues no tienen por donde salir. Estamos altamente afectados, pues nunca habíamos tenido que cerrar negocios por un aguacero de esa magnitud", dijo.
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Comerciantes como Armando Beleño aseguran "jamás haber visto algo semejante" pues aunque lleva más de 30 años desempeñándose comercialmente en el Mercado de Granos, nunca había tenido que cerrar su negocio por la cantidad de agua que cayó.
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