En medio de reactivación de la controversia por la aplicación de un pico y placa zonal para el centro de Bucaramanga, rechazado por los comerciantes del sector, el alcalde Rodolfo Hernández salió este martes a la calle para comprobar personalmente cuáles son los factores del problema de movilidad.
En su recorrido por vías como las calles 33 y 34, las Carreras 15 y 18 y el Paseo del Comercio, el alcalde se encontró con más de un conductor con su carro en sitios donde está prohibido parquear, incluso que dejaron vehículos abandonados, a quienes increpó a su manera, prácticamente regañandolos por cometer esas infracciones.
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"Vamos a intentar dejar contentos a la mayor parte de los sectores con una medida de pico y placa concertada, son más de 40 grupos de interés a los que vamos a involucrar en el proceso", anunció el mandatario, refiriéndose a las reuniones que sostendrá con gremios y sectores sociales para implementar una nueva restricción a partir de agosto.
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