Diez alimentos que deberían ser refrigerados, pero que no todos lo hacen

La refrigeración adecuada de ciertos alimentos es fundamental para preservar su frescura, sabor y calidad nutricional. A pesar de ello, no todos los alimentos que requieren refrigeración reciben el tratamiento adecuado en este aspecto.En ese sentido, todos conocen que la leche, el queso o la carne necesitan refrigeración, pero también existen muchas personas que pasan por alto otros alimentos.Por lo tanto, los almacenan incorrectamente, lo que puede resultar en una disminución de su vida útil y riesgos para la salud.Alimentos que tienen que ser refrigeradosTortillasLas tortillas contienen ingredientes perecederos como harina y agua. Para mantener su textura y evitar la proliferación de bacterias, es esencial refrigerarlas."La fecha que aparece en su envase es por motivos de calidad, por lo que cuando los alimentos [como las tortillas] se almacenan adecuadamente pueden consumirse más allá de su fecha, si no hay signos de deterioro", explica la Academia de Nutrición y Dietética.PieEl portal especializado Southern Living aconseja que las tortas con relleno de crema o pudin, así como las que son hechas a base de productos lácteos o chocolate, se deben refrigerar una vez se enfríen, al contrario de “las tartas de fruta que pueden conservarse hasta dos días” sin refrigerar.Mantequilla de maníRefrigerar la mantequilla de maní, al contener grasas naturales, ayuda a prolongar su vida útil y mantener su calidad, según explicó Margarethe A. Cooper, profesora de la Universidad de Arizona, al portal MarthaStewart.com."Como no tiene conservantes ni estabilizadores, es mejor refrigerarla para mantenerla fresca y evitar que el aceite se separe", dijo.Huevos"Para mantenerlos seguros, llévese los huevos directamente a casa y guárdelos inmediatamente en el frigorífico a 40 grados Fahrenheit o ligeramente por debajo. Déjelos en su caja y colóquelos en la parte más fría del frigorífico, no en la puerta", aconseja el Departamento de Agricultura de EE. UU.KetchupDebido a sus altos niveles de acidez, el ketchup debe refrigerarse ya que ayudará a mantener las bacterias “a raya y el sabor y la frescura” que caracteriza a la salsa de tomate, detalla la Academia de Nutrición y Dietética.Harina de trigo integralLa harina de trigo integral contiene grasas y aceites naturales que pueden volverse rancios con el tiempo. Para preservar su calidad, es aconsejable almacenarla en el refrigerador."Cuanto más frío y oscuro sea el entorno de almacenamiento, mejor se conservará la harina integral. El calor y la luz aumentan la velocidad de oxidación, por lo que el almacenamiento en el congelador es ideal”, resalta King Arthur Baking Company en su portal web.SyrupAl tener una vida útil bastante corta, según explica la academia, para su preservación óptima, es fundamental refrigerar el syrup.“Almacenado en el frigorífico, el jarabe de arce puede conservarse fresco hasta un año. Sin embargo, si observa la aparición de moho, deséchelo inmediatamente”, explican.CítricosAunque pueden resistir la temperatura ambiente durante un tiempo, los cítricos como naranjas, limones y limas deben refrigerarse para mantener su frescura y jugosidad por más tiempo."Si se refrigeran entre 41 y 42 grados Fahrenheit, los cítricos pueden conservarse de tres a seis semanas", puntualizó a MarthaStewart.com Christina Ward, directora senior de Sunkist Growers.MaízEl maíz en mazorca debe refrigerarse para evitar la pérdida de azucar y mantener su sabor y textura."A menos que vaya a cocinarlo enseguida, guarde el maíz en la nevera -con cáscaras y todo- durante uno o dos días", afirma la academia.MantequillaAunque la mantequilla puede conservarse a temperatura ambiente por un corto período, es preferible refrigerarla para mantenerla fresca y evitar que se vuelva rancia, advierte la Food and Drug Administration.En conclusión, la refrigeración adecuada de estos alimentos es crucial para garantizar su seguridad alimentaria y prolongar su vida útil. Es esencial seguir las recomendaciones de almacenamiento para cada alimento y así disfrutar de su frescura y sabor óptimos. Mantener una adecuada gestión de la cadena de frío es esencial para una alimentación segura y saludable.