En medio de la reciente controversia en torno a las disputas entre el aguardiente Amarillo y las distintas licoreras, la Gobernación del Valle ha reafirmado su posición en contra de la venta y distribución de este licor en la región.
A través de sus redes sociales, la Gobernación del Valle recordó que comercializar aguardiente Amarillo en el departamento es un delito de contrabando, una advertencia llega después de semanas de disputas con diversas licoreras en todo el país.
Según las autoridades, el único aguardiente autorizado para su comercialización en el departamento es el producido por la Industria de Licores del Valle, y cualquier intento de vender o distribuir el aguardiente Amarillo se considerará una violación a la normativa vigente.
Sanciones por comercializar aguardiente Amarillo
El Código Penal colombiano, en su artículo 319 referente al contrabando, establece duras penas para quienes introduzcan o extraigan mercancías en cuantía superior a cincuenta 50 salarios mínimos legales mensuales desde o hacia el territorio colombiano por lugares no habilitados según la normativa aduanera.
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En este contexto, se prevé una pena de prisión de cuatro a ocho años y una multa equivalente al 200 % al trescientos 300 % del valor aduanero de los bienes objeto del delito.
Además, el artículo contempla sanciones para aquellos que oculten, disimulen o sustraigan mercancías de la intervención y control aduanero en cantidades superiores a 50 salarios mínimos legales mensuales, imponiendo las mismas penas de prisión y multa mencionadas anteriormente.
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La disputa del aguardiente Amarillo en la industria de licores
Este no ha sido el único caso donde está prohibida la comercialización del aguardiente Amarillo, pues el abogado de la Licorera de Caldas, Pablo Felipe Robledo, denunció en Blu Radio la prohibición arbitraria impuesta por el departamento de Cundinamarca.
“Esa prohibición es ilegal, porque la Licorera de Caldas tenía un permiso por 10 años que no puede revocarse sin permiso de la misma licorera”, aseguró el abogado en su momento.
Al respecto, también la Licorera de Cundinamarca se ha pronunciado y, en diciembre, su abogado Mauricio Velandia aseguró que la Licorera de Caldas está apelando a "una posible campaña publicitaria falsa acerca de la historia" del aguardiente Amarillo.
"Cuando uno toma el posicionamiento de otro, como Heineken para posicionar su producto desconocido, se llama competencia parasitaria desde el punto de vista legal", completó el abogado.
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Disputa con la Fabrica de Licores de Antioquia
No siendo el único la disputa que ha tenido la Licorera de Caldas con la de Cundinamarca, también hubo en diciembre otra decisión importante por parte de la Superintendencia de Industria y Comercio.
El fallo conocido el mes pasado ordenó retirar inmediatamente del mercado al Aguardiente Amarillo, de la marca Real de la Fábrica de Licores de Antioquia, así como dejar de promocionarlo y comercializarlo, una decisión que celebró en Mañanas Blu Mauricio Vélez, gerente comercial y de mercadeo de la Licorera de Caldas.
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En la entrevista, Vélez explicó que lo que pretendían desde la Licorera de Caldas con la acción jurídica era "proteger nuestra marca y evitar su explotación por parte de los competidores", motivo por el cual acudieron a la SIC
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