En medio de la crisis comercial y diplomática de Colombia con Estados Unidos, el presidente Petro propuso una hoja de ruta a través del encargado de negocios de Estados Unidos en Colombia, Jhon McNamara, para avanzar en temas bilaterales clave, especialmente relacionados con comercio agrícola y lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, desde la Cámara de Comercio de Estados Unidos le pidieron al mandatario mantener un debate con serenidad y propuestas realistas.
“El gobierno de EEUU afronta un cierre por la falta de acuerdo de su presupuesto en el Congreso. Esto hace que no existan decisiones administrativas de ningún tipo. El gobierno de Colombia trabaja en decisiones administrativas sobre aranceles, no como reacción a la amenaza, sino al interés nacional”, aseguró el presidente a través de su cuenta de X.
Ante esto, María Claudia Lacouture, presidenta de Amcham, insistió en que el shutdown no ha paralizado las decisiones del ejecutivo americano, por lo que es necesario que desde el gobierno colombiano se procure proteger el ingreso, lo que implica no encarecer insumos.
“Subir aranceles a bienes de EE. UU. que Colombia no produce en volumen (materias primas, maquinaria, químicos, partes, etc.) se traslada al bolsillo de los colombianos. 70 % de lo importado no se fabrica en Colombia”, indicó Lacouture.
Petro propuso también la posibilidad de que exista cero arancel para producción alimentaria y agroindustrial que exporta Colombia a Estados Unidos. En este sentido, Lacouture explicó que este acuerdo está pendiente de aprobación desde el 5 de septiembre de este año y que se requiere de la negociación activa y responsable por parte del gobierno colombiano.
Sin embargo, Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, advirtió lo que puede ocurrir si hay aranceles a insumos claves para el agro en Colombia. Aseguró que gracias al TLC la mayoría de insumos para la producción de alimentos entran sin pagar arancel a Colombia.
“Si come huevo, cerdo, trucha o tilapia tenga presente que entre el 65 % y el 70 % del costo total de producir estos alimentos, depende principalmente de 3 materias primas que hoy traemos en su gran mayoría de los Estados Unidos. El año pasado importamos más de 8.6 millones de toneladas de estos tres insumos. Incrementar el costo de la producción de alimentos en Colombia, no tiene ningún sentido”, indicó Bedoya.
En cuanto al estímulo a las compras agrícolas, Amcham aclaró que no es viable subsidiar importaciones, pero sí fomentar inversiones a través de financiamiento con garantías, mediante la Corporación Financiera de Desarrollo de Estados Unidos (DFC).
“Estímulos a compras: subsidiar importaciones sería, en la práctica, pagarle a terceros para que nos compren; no es usual ni simple. Vía realista: DFC con financiamiento y garantías para fomentar inversiones y contratos de compra de largo plazo (off-take)”, explicó Lacouture.
Finalmente, respecto a la persecución global de activos del narcotráfico, se destacó que ya existen convenios internacionales como las Convenciones de Viena (1988) y Palermo (2000), además de los estándares del GAFI. La clave, dijo Amcham, está en mejorar la cooperación judicial y la recuperación efectiva de bienes.