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Gustavo Salazar Pineda, histórico defensor de la familia Ochoa, en particular de Fabio Ochoa Vásquez, aseguró en Mañanas Blu, que el excapo que llegó ayer a Colombia, ahora goza de libertad plena y no tiene deudas pendientes con la justicia de Colombia.
¿Libertad o justicia?
Al ser consultado sobre la situación judicial de Fabio Ochoa Vásquez, Salazar afirmó con rotundidad que su cliente ha purgado un total de veinticinco años de prisión en Estados Unidos y Colombia, enfatizando que ha enfrentado y no eludido las leyes. “No hay requerimiento alguno sobre él; es el único que ha purgado sentencia en el cartel de Medellín”, recalcó Salazar.
¿Víctima?
Salazar, además, aseguró que los miembros de la familia Ochoa nunca han colaborado con Pablo Escobar en actividades criminales más allá del narcotráfico. “La familia Ochoa fue víctima de varios actos delictivos por parte de Escobar y su grupo, y nunca mantuvieron una relación de alianza”, puntualizó Salazar.
Las declaraciones de John Jairo Velásquez, alias Popeye, que intentaron vincular a los Ochoa con magnicidios, fueron rechazadas por Salazar. El abogado invita a reflexionar sobre la credibilidad de estos testimonios, sugiriendo que muchos fueron motivados por intereses personales. "El testimonio de Pablo Escobar casi nunca fue documentado con evidencia sólida y muchas de las acusaciones son pura especulación", señaló.
Salazar aseguró que Fabio Ochoa no tendría interés en convertirse en un gestor de paz, a pesar de que se han hecho esfuerzos por sacar a la luz la verdad sobre la violencia en Colombia durante los años de narcotráfico. “No corresponde a la familia Ochoa aclarar los crímenes; otros personajes aún viven y pueden brindar información relevante sobre estos hechos”, agregó.
Su llegada a Colombia
Ochoa Vásquez, de 67 años, llegó en un vuelo junto a otros deportados de Estados Unidos, y Migración Colombia añadió en un comunicado: "Una vez se concluya el proceso de control migratorio, y verificar que el ciudadano no cuenta con ninguna anotación judicial, se espera que este ingrese al país sin novedad".
Tras el proceso de control migratorio, las autoridades confirmaron que "no hay ningún requerimiento" y Ochoa Vásquez "quedó en libertad para reunirse con su familia".
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El exnarcotraficante fue capturado en octubre de 1999 y extraditado a Estados Unidos en 2001, para posteriormente, en 2003, ser condenado a 30 años de prisión por conspiración, trata de personas y distribución de 30 toneladas de cocaína.
Escuche aquí la entrevista:
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