Centenares de personas se reunieron frente a la Unidad de Reacción Inmediata URI de Florencia con el fin de protestar por el asesinato de Mauren, una bebé de 13 meses de nacida que fue abusada sexualmente y luego ahogada en un tanque en una residencia de la ciudad.
La madre de la menor, de 17 años, y el padre, de 20, viajaron desde el Agrado, Huila, para pasar la noche y continuar a San Vicente del Caguán que era su destino final. Sin embargo, en la madrugada notaron que la menor de edad no estaba en su habitación y descubrieron el cuerpo sin vida en otra instancia del lugar.
Las autoridades encontraron a la bebé sin signos vitales y con señales de violencia sexual.
Según el comandante de Policía Caquetá, coronel Javier Navarro, ya hay una persona indiciada por este hecho y pronto será presentada ante las autoridades judiciales.
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La directora general del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Karen Abudinen Abuchaibe, señaló que desde el momento que se supo la noticia del asesinato de la bebé, un equipo de defensoría de la entidad llegó al lugar de los hechos para acompañar a los padres de la menor.
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“Una vez fuimos reportados por las autoridades sobre el asesinato de la niña, de manera inmediata un grupo de profesionales de la entidad llegó en horas de la madrugada a donde pernotaba la menor de edad, para realizar el respectivo acompañamiento psicosocial a los jóvenes padres”, dijo.