Una investigación del Centro Nacional de Memoria Histórica evidencia la manera cómo los grupos armados convirtieron a las mujeres en objetos.
Se estima que 15.076 personas en el país, en los últimos 31 años, vivieron esta tragedia.
En entrevista con BLU Radio, la investigadora Rocío Martínez dijo que la investigación evidencia que estamos ante una realidad ineludible.
“La memoria de los hechos atroces narrados por las mujeres evidencian que todos los grupos armados ilegales, pero también la fuerza pública, han usado la violencia sexual de manera continuada y como un mecanismo para emitir mensajes muy puntuales”, expresó.
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En el caso de las Farc, la antropóloga manifestó que este hecho es evidente gracias a los testimonios de las excombatientes: “La violencia sexual fue usada particularmente contra niñas y adolescentes posterior al reclutamiento forzado”.
En ese sentido, expresó que además de los vejámenes a los que eran sometidas, también existía en el grupo guerrillero una política que obligaba a las guerrilleras a abortar luego de quedar embarazadas.
“No es preciso un aval explicito, pero hay un silencio al interior del grupo armado sobre el uso de la violencia sexual por parte de ciertos frentes. Hay unos privilegios en las jerarquías del grupo”, añadió.
En el caso de alias ‘Raúl Reyes’, mencionado en el informe, titulado: “La guerra inscrita en el cuerpo”, dijo que testimonios arrojan que tenía una preferencia por el reclutamiento de niñas, entre 9 y 15 años.
Más detalles del estudio en El Espectador.
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