La integración económica y financiera, junto con la reinserción productiva, son procesos fundamentales que contribuyen significativamente al desarrollo de los migrantes venezolanos en Colombia, estos procesos los convierten en actores clave para el crecimiento del país y la generación de empleo, según analiza el programa Emprendimientos Productivos para la Paz, liderado por Bancamía en colaboración con USAID.
Según datos de Bogotá Cómo Vamos, el 62% de los migrantes venezolanos, con intención de quedarse en la ciudad, viven en situación de pobreza monetaria, siendo el 65% de ellos de estratos 1 y 2. Además, un estudio del DANE revela que el 81% de los migrantes que desean iniciar un negocio enfrentan dificultades, principalmente el acceso a créditos, siendo las mujeres las más afectadas en este aspecto.
Ante este panorama, Bancamía, en alianza con Usaid, la Corporación Mundial de la Mujer Colombia y la Corporación Mundial de la Mujer Medellín/De Mis Manos, ha estado fortaleciendo el capítulo de Empropaz sobre migrantes en 21 municipios del país con alta concentración de esta población.
Hasta la fecha, el programa ha brindado apoyo a 4.578 migrantes en estos territorios, ofreciendo actividades de gestión empresarial, fortalecimiento empresarial e inclusión financiera. Del total de beneficiarios que recibieron asesoría socioemocional, acompañamiento empresarial y oportunidades de inclusión financiera, el 38% tiene educación secundaria, y el 37% de los emprendedores han materializado sus ideas de negocio. Además, el 76% de los beneficiarios son mujeres, y en promedio, los hogares están compuestos por 4 personas.
El 48% de los emprendedores y microempresarios atendidos se encontraban en situación de pobreza extrema al ingresar al programa, lo que destaca las difíciles condiciones de vida en las que inician este proceso de acompañamiento.
El gerente de Empropaz, Miguel Achury Jiménez, destaca que se han entregado cerca de $1.000 millones en microcréditos para fortalecer a microempresarios y apoyar a emprendedores migrantes, colombianos retornados y comunidades de acogida. Además, resalta que el 19% de los participantes que han completado el programa han logrado superar la pobreza monetaria después de dos años o más de intervención.
El programa también ofrece asesoramiento socioemocional a los migrantes que deseen participar, con 1.534 beneficiarios que han iniciado esta ruta de acompañamiento y se han llevado a cabo 7.912 talleres. Este acompañamiento aborda temas como el autocuidado, la reparación y el arraigo, para que desde la estabilidad emocional, puedan impulsar su desarrollo productivo, como el caso de Irma Seres, quien hace más de 6 años dejó Venezuela para establecerse en Colombia.
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