Ortiz aseguró que es necesario buscar nuevas contribuciones que permitan a la administración tener los recursos necesarios para realizar todos los proyectos contemplados dentro del Plan de Desarrollo.
“Es un plan ambicioso, que aspira a dejar la administración con la posibilidad y recursos, creemos que el plan es completo, tiene fuentes de financiación alternativas, complementarias y busca no perder tiempo y que a partir del 31 de mayo podamos comenzar a ejecutarlo”, indicó Ortiz.
“Aspiramos a que Bogotá sufra una transformación grande en todos los aspectos, el plan es costoso para hacer todo es necesario necesitamos tener recursos, lo que hay es contribuciones voluntarias como el pago para evitar pico y placa y el poder estacionar en zonas azules que ayudan a financiar las obras y que ayuden a tener subsidios cruzados”, añadió.
Sobre el pago para evitar el pico y placa, Ortiz indicó que se busca es que los capitalinos destinen lo que gastan en un segundo vehículo por gasolina e impuestos, a cancelar esta contribución y así poder utilizar estos recursos en inversiones al transporte público.
Ortiz indicó que este plan no solo se diseñó para los cuatro años de la administración de Peñalosa, sino que se hace una proyección en el tiempo para que los nuevos gobiernos de la capital puedan darle continuidad a los proyectos ya estipulados.
“Uno hace un plan de desarrollo para 4 años pero no lo hace con perspectiva de 4 años, sino de muchos años, para evitar que las futuras administraciones entren en gastos que no son sostenibles”, indicó el funcionario distrital.
Para finalizar indicó que los retos de la ciudad están enfocados a la construcción de 30 colegios, 6 hospitales, dos de ellos por alianzas público privadas y al incremento de seguridad con instalación de cámaras y aumento del pie de fuerza.