Representante Wilmer Castellanos: “A entidad que no ejecute no hay que darle más plata”

En medio de la discusión sobre el presupuesto general de la Nación, el representante a la Cámara Wilmer Castellanos, coordinador ponente del proyecto, expresó en una entrevista en Mañanas Blu que el Congreso de Colombia y el Gobierno nacional están en un proceso de revisión exhaustiva de las asignaciones presupuestales. Según Castellanos, la meta es recortar partidas a entidades que no han demostrado una ejecución eficiente en 2024, un aspecto clave en la decisión sobre las asignaciones para el 2025.La cifra inicial propuesta por el Gobierno asciende a 523 billones de pesos, pero ha generado disconformidad entre varios parlamentarios, quienes consideran que este monto está inflado y no refleja la realidad económica del país."Nosotros exigimos al gobierno que sustentara cada una de las fuentes que financian este presupuesto. Desde el primer momento, varios compañeros manifestaron su inconformismo frente a un monto que consideran inalcanzable", explicó Castellanos.Revisión entidad por entidadUno de los puntos clave en la discusión es la necesidad de evaluar la ejecución presupuestal de cada entidad antes de asignar nuevos recursos. Castellanos destacó que esta semana están revisando detalladamente el desempeño de cada ministerio y entidad adscrita al Gobierno."Entidades que hemos visto que son ineficientes, ineficaces para ejecutar, no se pueden premiar con altas asignaciones presupuestales para el 2025", afirmó el representante.Durante las más de diez sesiones que ya han sostenido, se han identificado algunos ministerios con baja ejecución de los recursos asignados en 2024. Entre estos destaca el Ministerio de la Igualdad, encabezado por la vicepresidenta Francia Márquez."El Ministerio de la Igualdad tiene una ejecución bastante baja. Si no ejecutan el presupuesto de este año, no tendría sentido aumentarle la asignación para el próximo", enfatizó Castellanos, tras afirmar que la asignación actual para este ministerio asciende a 12 billones de pesos, una cifra que está bajo revisión.La falta de mecanismos en la ejecuciónCastellanos también señaló que uno de los problemas fundamentales en algunas entidades es la falta de mecanismos adecuados para ejecutar los recursos asignados. Puso como ejemplo al Ministerio de Agricultura, que, pese a haber recibido 52 billones de pesos el año pasado para la Agencia Nacional de Tierras, ha tenido dificultades para hacer uso efectivo de esos fondos."No hay mecanismos suficientes para ejecutar esos recursos, lo que genera una acumulación que no se justifica con más asignaciones", explicó.La discusión actual, según Castellanos, se centra en identificar cuáles entidades tienen proyectos, programas y planes claros que puedan dinamizar la economía mediante la ejecución de sus presupuestos. "Estamos evaluando quiénes realmente tienen la capacidad de ejecutar, porque no tiene sentido seguir financiando a entidades que no logran cumplir sus metas", añadió.Postura del Gobierno ante la reducción presupuestalEn cuanto a la actitud del gobierno en las negociaciones, Castellanos comentó que, aunque inicialmente se mostraron reacios a reducir el monto propuesto, en las reuniones más recientes ha habido una apertura hacia la conciliación."La semana pasada vimos un gobierno más renuente, pero ayer el ministro ya mostró disposición a revisar la asignación presupuestal de las entidades", señaló el representante, sugiriendo que el gobierno parece estar más dispuesto a ajustar el presupuesto a la realidad fiscal del país.La polémica de la ley de financiamientoOtro aspecto crítico en la discusión es la ley de financiamiento que el gobierno presentó para recaudar 12 billones de pesos adicionales, destinados a cubrir parte del presupuesto. Sin embargo, esta propuesta no ha sido discutida en profundidad, lo que ha generado tensiones entre los congresistas y el Ejecutivo. "El inconformismo está en que pusieron una ley de financiamiento de 12 billones sin haber sido discutida", destacó Castellanos, quien también recordó que, si esa cifra no se aprueba, el presupuesto quedaría desfinanciado en 6 billones.En este sentido, el representante Castellanos abogó por un enfoque responsable y prudente en la discusión de la ley de financiamiento, sugiriendo que, si no se logra el recaudo esperado, podrían recurrir a un proyecto de adición en el futuro para ajustar las fuentes de financiación. "Lo lógico sería que bajáramos el monto del presupuesto y, si más adelante el recaudo mejora, entonces podríamos pensar en una adición", concluyó.