Este fin de semana se produjo el primer enfrentamiento público entre los jefes de la antigua guerrilla de las Farc y la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), creada tras el acuerdo firmado hace cinco años en el Teatro Colón.
El telón de fondo del choque, que este domingo llevó a un pronunciamiento conjunto de los antiguos integrantes del secretariado de las Farc, tiene que ver con la inclusión del crimen de lesa humanidad de esclavitud cometida por esa guerrilla contra los secuestrados que tuvieron en su poder.
En el pronunciamiento en el que expresan su desacuerdo con señalar que las Farc cometieron el delito de esclavitud, Rodrigo Londoño, jefe del partido Comunes, explicó que rechazan este señalamiento porque está en juego la dignidad de quienes firmaron el acuerdo de paz, y llega a la “almendra” de la que será su defensa en la apelación que ya anunciaron sus abogados: para las antiguas Farc, la JEP no es un tribunal penal, sino un órgano de justicia restaurativa.
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Timochenko concluye diciendo que “sería faltar a la verdad y quedar en deuda con la historia permitir que se imponga la narrativa de que las Farc-EP fue una organización esclavista”.
Desde comienzos de este año, la Procuraduría había impulsado la solicitud para que se incluyera el crimen de lesa humanidad de esclavitud dentro del mismo caso en el que fueron acusados los antiguos jefes de las Farc por secuestro y otros delitos graves, teniendo en cuenta las evidencias sobre los trabajos forzados a los que fueron sometidos miles de personas plagiadas por ellos.
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La JEP admitió esta petición luego de documentar la imposición de trabajos forzados a las víctimas de las Farc durante su secuestro por parte del Bloque Oriental, Caribe, Noroccidental, Occidental, Magdalena Medio y Sur, como parte de las privaciones de la libertad en el marco del control social y territorial. Dice que las Farc no expidió órdenes para preservar la dignidad de los secuestrados y por eso cada comandante quedó en libertad de imponer trabajos forzados.
Además, señala que los trabajos forzados y el delito de esclavitud contra los secuestrados, “fue parte del ataque sistemático y generalizado de las Farc contra la población civil”.
¿Qué viene ahora? Primero, que las antiguas Farc deben decidir si reconocen o no que cometieron el crimen de lesa humanidad de esclavitud.
Si lo hacen, el caso pasaría rápidamente hacia las instancias en las que se aplicaría una pena restaurativa. Si no lo hacen, tendrían que ir a la Fiscalía de la JEP que en caso de que los encuentre culpables de ese delito, podría condenarlos a penas de hasta 18 años de cárcel efectiva.
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Escuche el análisis de Ricardo Ospina en Mañanas BLU:
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