La escena ocurrió a la 1:30 de la tarde del martes 2 de diciembre, en plena avenida 19 con calle 108, al norte de Bogotá. A esa hora, Jean Claude Bossard, un joven barranquillero de 29 años, fue asesinado tras oponerse al robo cometido por dos criminales que se movilizaban en una motocicleta naranja. Le dispararon a quemarropa y huyeron dejando a la víctima tendida en el suelo.
Sin embargo, lo que vino después quedó registrado en un video que revela la reacción inmediata y solitaria de un patrullero de la Policía que, sin saberlo, sería quien cerraría la vía de escape a los asesinos. El uniformado realizaba su ronda habitual en bicicleta por el andén de la avenida 19 cuando escuchó los disparos y vio, a unos metros adelante, la motocicleta naranja que utilizaban los delincuentes para huir tras atacar a Jean Claude.
El patrullero no dudó. En las imágenes obtenidas por Noticias Caracol se observa cómo suelta la bicicleta, desciende rápidamente hacia la calzada y se planta de frente a los dos delincuentes. El parrillero de la moto, armado, le apunta directamente al uniformado, obligándolo a reaccionar para proteger su vida y detener la fuga. En ese instante, el policía ya con su arma de dotación en la mano, abrió fuego contra los delincuentes que aceleraron con dirección al norte de la ciudad.
La escena, muestra el intercambio de disparos en plena vía y la determinación del uniformado de la Policía por impedir que los criminales escaparan tras asesinar a un ciudadano indefenso. Gracias a esa reacción inmediata, la huida de la banda, conocida por cometer múltiples atracos en ese sector, se vio frustrada. Testigos aseguran que la acción del patrullero evitó que los delincuentes continuaran cometiendo delitos en su recorrido.
Vecinos del sector denunciaron que esta banda ya había protagonizado varios robos similares: intimidaban a sus víctimas con armas cortopunzantes o de fuego, atacaban de forma sorpresiva y huían inmediatamente en la motocicleta naranja que aparece en diferentes videos de seguridad.
En uno de estos registros, se observa cómo uno de los mismos delincuentes desciende de un carro gris, se abalanza contra un ciudadano, lo derriba en el piso y lo amenaza con un arma blanca mientras le arrebata sus pertenencias. Acto seguido, la motocicleta llega, recoge al ladrón y ambos escapan sin dejar rastro.
Ese historial criminal, sumado al asesinato de Jean Claude Bossard, terminó chocando con la reacción de un patrullero que, en cuestión de segundos, se convirtió en la única barrera entre los asesinos y su fuga. Su acción, captada por las cámaras, se ha convertido en una pieza clave para entender cómo se desarrollaron los hechos y cómo la intervención de un solo uniformado logró detener una cadena de ataques que mantenía en zozobra a la comunidad.