Hombre arroja a mujer trans por un barranco tras cita fallida: se conocieron por app

Geraldine N., una mujer transgénero, fue víctima de un brutal ataque en el municipio de Teziutlán, en el estado de Puebla (México), luego de sostener una cita con un hombre que conoció a través de una aplicación de citas. El encuentro terminó en tragedia cuando, tras revelarle su identidad de género, el sujeto reaccionó de forma violenta y la arrojó desde su camioneta en movimiento hacia un barranco de aproximadamente 50 metros de profundidad.Los gritos de auxilio de Geraldine alertaron a vecinos del sector, quienes dieron aviso a las autoridades. Personal de Protección Civil acudió al lugar y logró rescatarla con graves heridas.Posteriormente, fue trasladada a un hospital donde permanece bajo atención médica especializada. La agresión ha sido calificada por organizaciones defensoras de derechos humanos como un crimen de odio motivado por transfobia.Hasta el momento, el agresor se encuentra prófugo y no hay información oficial sobre su paradero. La falta de respuesta inmediata por parte de las autoridades ha generado indignación en redes sociales y entre colectivos LGBTI, quienes exigen justicia y que el caso no quede en la impunidad.La diputada local Gaby Chumacero se pronunció sobre lo ocurrido a través de un comunicado en el que expresó su rechazo al ataque. “Desde el Congreso del Estado de Puebla, expreso mi más enérgica condena ante el violento ataque cometido en contra de Geraldine N., en un claro acto de odio y discriminación por su identidad de género”, señaló.Asimismo, la legisladora hizo un llamado urgente a las autoridades para que el agresor sea localizado y llevado ante la justicia. “No podemos seguir permitiendo que la identidad de una persona sea motivo de agresión o muerte. Nuestro deber es construir una sociedad en la que todas las personas puedan vivir libres y sin miedo”, afirmó.Este caso reabre el debate sobre la violencia que enfrenta la comunidad trans en México, país que según diversas organizaciones, registra uno de los índices más altos de crímenes de odio por identidad de género en América Latina.