Con antelación ya organismos defensores de derechos humanos como Sumapaz y Cahucopana habían llamado la atención de las autoridades pidiendo actuar pronto; a pesar de ello, 40 familias, integradas por 117 personas, tuvieron que dejar sus casas en la vereda Arenales de Segovia, Antioquia, para cuidar sus vidas por la presencia y enfrentamiento del Clan del Golfo con el ELN.
Carlos Morales, de Cahucopana, le contó a Blu Radio que, desde mediados de junio, están sufriendo los hostigamientos de grupos armados en la zona y que "les están pidiendo plata a las comunidades en los retenes. Les piden plata a las personas que transitan por ahí y no estaban tampoco dejando transitar ganados para los campesinos que iban a una subasta".
El coronel Carlos Martínez, comandante del Departamento de Policía Antioquia, confirmó que más de un centenar de personas han tenido que abandonar sus casas en zona rural de Segovia por la confrontación a sangre y fuego que sostienen esos dos grupos armados criminales.
"Desde el 29 de junio, en la vereda Arenales, distante a cuatro horas del municipio de Segovia, se han presentado confrontaciones entre grupos armados ilegales. Esto ha generado que 117 personas, 40 familias se desplacen a la vereda Rancho Quemado, a 20 minutos en tiempo del sitio donde están las confrontaciones", explicó Martínez.
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Los combates entre Clan del Golfo y la guerrilla del ELN se presentan, al parecer, por el control territorial de la zona, que es rica en minería aurífera.
A esta hora las autoridades tratan de ingresar a la zona de las confrontaciones en Segovia y continúan al frente de un Puesto de Mando Unificado para establecer las acciones a seguir con la población afectada.
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