A pocas horas de que dos soldados profesionales fueran asesinados y dos más resultaran heridos por parte del Clan del Golfo en el municipio de San Andrés de Cuerquia, Antioquia, nuevamente el temor se apoderó de comunidades en zona rural del municipio de Segovia por cuenta de confrontaciones entre ese mismo grupo ilegal con miembros de las disidencias de las Farc.La situación fue denunciada por la Corporación Acción Humanitaria por la Convivencia y la Paz del nordeste antioqueño desde donde manifestaron que los hechos ocurrieron en la tarde de este martes, 4 de febrero, en límites entre la vereda Arenales y Rancho Quemado en esa localidad del nordeste del departamento, la misma zona donde en los últimos meses han sido frecuentes los reportes de situaciones similares, incursiones armadas e inclusive desplazamientos y confinamientos de la población.Un líder de la zona que prefirió reservar su identidad por motivos de seguridad, comentó a Blu Radio que en las últimas semanas en la zona a pesar de no haber confrontaciones como las actuales, sí hay una constante tensión por la presencia de estos grupos armados."La situación ha estado bastante tensa en el territorio, lo que es el Nordeste, sur de Bolívar y Magdalena Medio. Aparte de que hay una avanzada paramilitar, pues hay unas tensiones bastante fuertes entre insurgentes del ELN, entre ellos la compañía Nororiente que está en el territorio", manifestó.También relató esta persona que hay preocupación por la posibilidad de que el panorama humanitario en las subregiones del Norte y el Nordeste del departamento se siga agravando al punto de llegar a vivir algo similar a lo que viene ocurriendo en el Catatumbo."Hemos realizado las asambleas comunitarias, hemos realizado llamamientos humanitarios para que lo que pasó en el Catatumbo no se traslade a la zona del Nordeste, pues ya hay un conflicto que es entre paramilitares y guerrillas, y que tener un conflicto interno ya en las insurgencias sería un caos para el territorio", añadió.Tanto en este municipio como en otros cercanos que incluyen el sur de Bolívar han sido recurrentes los enfrentamientos armados en los últimos meses, pues grupos ilegales están tras el control del territorio, rentas ilícitas especialmente producto de la minería y rutas estratégicas para el movimiento de tropas y armas.
En medio de las disputas por el territorio entre el ELN, las disidencias de las Farc y el Clan del Golfo en el Nordeste de Antioquia hay zozobra en el municipio de Segovia, luego de que se conociera que la base militar instalada en el corregimiento Carrizal en el antiguo ETCR será retirada del sitio.Esto, debido a que finalizó la renta del predio donde estaba ubicado el pasado 31 de diciembre, con lo que se queda sin base fija el batallón especial energético y vial #8, cuyos uniformados se encontraban acantonados en la unidad básica de carabineros.El personero del municipio, Hambler André Patiño, mostró su preocupación porque lo que queda en el territorio son tropas móviles que siempre han estado en la región, por lo que no serán, en su concepto, las mismas condiciones de seguridad que tener una base militar fija al tener que patrullar una zona tan extensa. Esto, teniendo en cuenta que antes tenían los uniformados patrullando y los de la base militar, al tiempo, lo que reduce el pie de fuerza.“La preocupación es que, al llevarse en tropas, quitan esta zona donde estaba acantonado el Ejército. Este Ejército daba un margen de seguridad, no solamente en Carrizal, sino en todo el entorno y sabemos que es una zona que en este momento está en disputa por el Clan del Golfo con las disidencias de las Farc y el ELN”, relató el personero.Teniendo en cuenta que esta base militar fue instalada allí para brindar protección a los firmantes de paz, tras el acuerdo de las Farc con el Gobierno, Blu Radio consultó a la ARN en Antioquia, que confirmó que en este espacio siguen 24 reincorporados con sus familias y 17 más en las veredas, a quienes se les siguen brindando medidas de seguridad, así lo explicó Luz Nelly Osorno Ospina, coordinadora de esta entidad en el departamento.“Nos informan que no es verdad que se retire el Ejército, sino que se mantiene móvil y que el anillo tres se encuentra a menos de 4 kilómetros del espacio, es decir, del ETCR en aras de garantizar la seguridad de los y las firmantes del acuerdo de paz”, aseguró.Osorno señaló que, sin embargo, dada la situación que se presenta en este territorio y la alerta permanente, la ARN mantiene contacto constante tanto con fuerza pública como con los y las firmantes para monitorear permanentemente la situación.También señaló que en el tema de la seguridad se requiere la intervención de las alcaldías, tanto de Remedios como de Segovia, así como la Gobernación de Antioquia y entidades del orden nacional para garantizar el orden público, tanto con la presencia de esta población, como cuando sean trasladados de esa zona rural hacia el municipio de Yalí.
Por el crimen del líder sindical y exconcejal Luis Carlos Olarte Gaviria, ocurrido el 3 de octubre de 2003, fue capturado el exalcalde de Segovia, Antioquia, Albert José Rodríguez Luján, por su presunta participación en este crimen. El arresto se produjo en el aeropuerto internacional Ernesto Cortissoz de Barranquilla, donde fue detenido por funcionarios del CTI de la Fiscalía para que atendiera una medida de aseguramiento de detención preventiva en centro carcelario impuesta en su contra por su presunta participación intelectual en dicho crimen. Es de recordar que este crimen fue perpetrado por el Bloque Central Bolívar de las extintas AUC, quienes tomaron por sorpresa al líder sindical, al interceptarlo cuando se movilizaba en una motocicleta para dispararle hasta causarle la muerte. Al parecer, el ataque sicarial fue en retaliación por las denuncias que Olarte Gaviria estaba realizando sobre la presunta práctica de minería ilegal en el nordeste antioqueño. "Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos vinculó formalmente al exmandatario municipal a una investigación por el delito de homicidio agravado y le resolvió la situación jurídica de acuerdo con los parámetros de la Ley 600 de 2000 (anterior Sistema Penal)", indicó la Fiscalía a través de un comunicado de prensa. "Por estos hechos, recientemente fue condenado el exjefe paramilitar Carlos Mario Jiménez Naranjo, alias Macaco, a 23 años, un mes y seis días de prisión por los delitos de homicidio en persona protegida, actos de terrorismo y concierto para delinquir agravado", agregó el ente investigador.
Con un lamentable balance en materia de quemados cierra el 2024, pues según la Gobernación de Antioquia, en las últimas 24 horas se reportaron 5 nuevos casos de lesiones por pólvora, de los cuales dos ocurrieron en Medellín, ciudad en la que van 42 quemados, donde una mujer de tan solo 25 años sufrió quemaduras de primer grado en el rostro y daño ocular a causa de voladores, además, un hombre de 26 años también sufrió laceraciones producto de la manipulación de totes.Sin embargo, la capital antioqueña no sería el único lugar con quemados, pues en Segovia, donde hasta ahora van 5 quemados, un hombre de 19 años sufrió laceraciones y quemaduras de primer grado en su miembro inferior, producto de manipular juegos pirotécnicos. De igual manera, en El Santuario, un hombre de 34 años sufrió laceración, contusión y quemaduras de primer grado en la mano, por maniobrar papeletas. En Amalfi, también hubo un caso, pues un hombre de 27 años sufrió quemaduras de segundo grado en la mano, por manipulación de voladores. La secretaria de Salud, Marta Cecilia Ramírez, realizó una petición a la ciudadanía para evitar el uso de pólvora durante la víspera de año nuevo."El 31 de diciembre es el día más crítico. Si usted está pensando en quemar pólvora o permitir que su familia queme pólvora, piense en que se puede amputar sus manos, sus dedos, perder sus ojos, incluso sus oídos y lesiones graves para toda la vida con secuelas que no se recuperan", expresó la funcionaria.Después de Medellín, los municipios más afectados son Bello con 6 casos, Guarne, Itagüí, Caucasia, Segovia con 5 y La Ceja con 4. Entre los lesionados se encuentran 31 menores, 13 personas que han sufrido daño ocular y 9 que han presentado amputaciones y afectaciones con secuelas de por vida.Vale la pena recalcar, que desde la Gobernación indican, que históricamente, la noche del 31 de diciembre reporta el mayor número de personas lesionadas por pólvora en Antioquia y en toda Colombia, por eso recomiendan retirarse de lugares donde se esté quemando pólvora, cerrar puertas y ventanas, cuidar a los menores y a los animales, y denunciar en la línea 123 o en las estaciones de Policía de los municipios a quienes fabrican, venden, transportan y usan pólvora.
La Corporación Acción Humanitaria por la Convivencia y la Paz del Nordeste Antioqueño reportó que en las últimas horas se registraron enfrentamientos entre el Clan del Golfo y disidencias en la vereda El Socorro, en Segovia, Antioquia, lo que generó el confinamiento de las familias del caserío por el temor que produce la disputa territorial entre estos grupos armados. Durante los combates, los habitantes también vieron restringida su movilidad.Cahucopana señaló que el pasado 28 de diciembre, hombres armados del Clan del Golfo ingresaron a las veredas mencionadas, donde presuntamente robaron a los habitantes, los retuvieron por varias horas y los señalaron injustamente de tener vínculos con la guerrilla.La corporación advierte que actualmente hay al menos cinco retenes ilegales instalados por este grupo en la zona rural, aumentando la tensión y el temor entre los campesinos que se sienten desprotegidos ante estas acciones violentas.Ante esta grave situación, la organización hizo un llamado urgente al Ejército Nacional para que intervenga y brinde garantías de seguridad a las comunidades afectadas, ya que el confinamiento continúa afectando a la población, especialmente durante las noches.
En medio de una operación sostenida en todo el departamento de Antioquia contra la extorsión, el Gaula y la Seccional de Inteligencia Policial lograron la captura de cinco hombres, presuntos miembros del Clan del Golfo. Según las autoridades estas personas serían las responsables de realizar las extorsiones en el Nordeste antioqueño.La información que dio a conocer la Policía Antioquia evidencia que los hombres pertenecían a la subestructura 'Jorge Iván Arboleda Garcés' y que tenían especial injerencia en los municipios de Segovia y Remedios. En estas localidades los más afectados por las 'vacunas' eran los comerciantes y los mineros.Precisamente, sobre la minería en la subregión el coronel Luis Muñoz, comandante (e) de la Policía Antioquia, destacó la captura de alias 'Niche', cabecilla financiero del Clan del Golfo en esta zona del departamento."Entre los capturados se encuentra alias 'Niche', cabecilla financiero de los municipios de Segovia y Remedios, encargado de la adquisición y venta de explosivos a los mineros informales de la zona", aseguró el uniformado.Por su parte y producto de las acciones delictivas que cometían estas personas en el Nordeste del departamento, las autoridades revelaron que las rentas ilícitas podrían alcanzar los 500 millones de pesos al mes. Además, los capturados tendrían relación con otras conductas delincuenciales en esta zona que se disputan con el ELN y las disidencias.Con la desarticulación de esta banda al servicio del Clan del Golfo se le da un alivio a los habitantes de la subregión, mientras que los hombres deberán responder por el delito de concierto para delinquir agravado con fines de extorsión.
Inquietud y cierto temor por su seguridad tienen varios de los líderes y representantes de la Mesa Minera de Segovia y Remedios, en el Nordeste de Antioquia, luego de que hace pocos días fueran notificados al menos seis de ellos frente al desmonte total o significativo de los esquemas de protección que les venían siendo asignados por parte de la Unidad Nacional de Protección.Yarley Marín, presidente de la Mesa Minera y vocero de la Coordinadora Nacional Minera, indicó que a pesar de interponer los recursos legales necesarios y lograr a través de medidas cautelares conservar sus esquemas, no saben en qué momentos podrían volverselos a quitar y si detrás de estas decisiones más allá de criterios técnicos hay otro tipo de intereses que buscan debilitar la labor de liderazgo social que vienen ejerciendo."No sabemos que lo que está pasando con nosotros, si es una persecución o es una retaliación por las denuncias que hemos hecho y por las demandas que exigimos ante el Gobierno nacional, pues esa situación nos preocupa", manifestó Marín.Insistió el directivo que los riesgos en materia de seguridad son latentes en la región por los intereses en el sector minero que tienen grupos como el Clan del Golfo, el ELN y las disidencias de las Farc."Lo que nosotros exigimos a la UNP es que se garantice el debido proceso de los líderes y de las comunidades mineras, porque además sobre eso tenemos unas medidas cautelares. Estamos dentro del proceso de la JEP como el único colectivo minero reconocido ante ese tribunal por todo este tema de violación de derechos humanos y todas las denuncias que hemos venido haciendo", señaló.La solicitud recalcó Marín, se hace mucho más urgente, teniendo en cuenta situaciones como la ocurrida a inicios de mayo de este año cuando hombres armados atentaron contra la camioneta del esquema de protección en la que se trasladaba Bladimiro Roldán, otro de los líderes de la Mesa Minera.Aunque el hombre salió ileso, tanto esa acción violenta como constantes mensajes intimidatorios son muestra, según los afectados, del riesgo latente que corren en el ejercicio de sus funciones.
La población civil sigue siendo una de las más afectadas por cuenta del accionar de grupos armados que tienen injerencia en varias subregiones de Antioquia, entre ellas el Nordeste.La más reciente víctima se trata de un campesino de la vereda Arenales en el municipio de Segovia, donde la comunidad pedía de manera urgente ayuda humanitaria para lograr un traslado helicoportado del hombre que resultó gravemente herido en varias partes del cuerpo tras pisar una mina antipersona.Aunque la víctima del artefacto recibió atención primaria por parte de personal del Ejército en la zona, era necesaria su evacuación para recibir una atención adecuada en un centro hospitalario y así por ejemplo evitar que las lesiones pudieran infectarse.Por eso, soldados de la Brigada 14 en colaboración con la Fuerza Aérea se encargaron del traslado de este hombre al municipio de Rionegro donde ya fue hospitalizado.Este incidente se produce en medio de los frecuentes reportes por parte de la fuerza pública frente a la identificación y desactivación controlada de explosivos instalados en zonas rurales tanto de esta población como de localidades cercanas: Remedios, Toledo y Briceño.En estos lugares hacen presencia grupos armados como el Clan del Golfo, las disidencias de las Farc y la guerrilla del ELN, quienes instalan estos dispositivos en zonas de tránsito comunes para afectar a sus enemigos con los riesgos que esto conlleva para habitantes de estos lugares que pueden resultar lesionados como en el reciente hecho.
La situación de orden público en el Nordeste del departamento de Antioquia vuelve a poner en alerta a las autoridades, en este caso, a habitantes y defensores de derechos humanos que confirmaron enfrentamientos armados entre el Clan del Golfo, ELN y disidencias de las Farc en algunas veredas de Segovia y Remedios. Según el reporte que se ha conocido de manera preliminar los combates se extendieron por varias horas.Recordemos que en esta zona la injerencia de grupos delincuenciales ha azotado a la población civil en los últimos meses, evidenciándose desplazamientos, confinamientos y asesinatos. Tanto la Policía como el Ejército han insistido que la disputa del territorio es la mayor problemática de la subregión."Se presentaron fuertes enfrentamientos. Parece ser que son entre el Clan del Golfo y la alianza que hay entre disidencias y el ELN. Y bueno, está ocurriendo cerca de Cancha Manila, esos son límites entre Remedios y Segovia", reportó el defensor de los derechos humanos de la Fundación Sumapaz, Óscar Zapata.Aunque las autoridades no han llegado a estos municipios ni han entregado un reporte oficial de los hechos, la preocupación que hay entre las comunidades es que en las veredas afectadas por los combates armados habría más de 500 personas que podrían ser víctimas de diferentes flagelos como desplazamiento o confinamientos.Hasta ahora la Fuerza Pública tendría reporte de enfrentamientos en el sur del departamento de Bolívar y no en Antioquia, sin embargo, la información entregada recientemente por asociaciones y comunidades aumenta la preocupación en la subregión luego de recientes incursiones en estos municipios.
La información entregada por la Décima Cuarta Brigada del Ejército Nacional confirmó que uniformados ubicaron dos minas antipersonales que fueron instaladas en la vereda Cancha Manila de Segovia por un grupo ilegal aún por determinar. Hay que recordar que esta vereda fue el lugar donde hace un par de meses hubo enfrentamientos armados entre Clan del Golfo, ELN y Disidencias de las Farc que generaron el desplazamiento de cientos de personas a otras zonas del municipio.Ahora este lugar habría sido utilizado como campo minado para prevenir que los demás grupos delincuenciales con injerencia en el Nordeste del departamento hagan presencia y tenga contacto directo con las comunidades de Segovia. El comandante de la Décima Cuarta Brigada, coronel José Ávila, informó sobre la situación registrada por el equipo de explosivos y demoliciones."Este material al parecer pertenecía al grupo delincuencial organizado conocido como Ejército Libertadores de Colombia el resultado de esta operación incauta, dos armas largas así mismo 600 cartuchos de varios calibres y cuatro artefactos explosivos", aseguró el uniformado.Además, el Ejército aseguró que en los últimos meses se han identificado y detonado 15 artefactos explosivos en el Nordeste antioqueño, evidencia que está subregión es una en las que la disputa por el territorio causa más afectaciones a la población rural y urbana que tienen que vivir con el temor de caer en medio de dichos enfrentamientos.Por ahora la Fuerza Pública hace presencia constante en Segovia, Remedios o El Bagre, municipios constantemente golpeados por el actuar criminal de grupos al margen de la ley en Antioquia.