"Cirugías plásticas bajo la lupa", editorial de Ana Cristina Restrepo

Este es el Editorial de Ana Cristina: "El Ministerio de Educación acaba de anunciar que presentará un proyecto de ley para regular la convalidación de títulos de cirugía plástica obtenidos en el exterior por médicos colombianos. La decisión es la respuesta a las denuncias de pacientes que han sido víctimas de malas prácticas de cirugía plástica y estética, en manos de médicos que exhiben títulos obtenidos en instituciones del extranjero, cuya reputación y calidad formativa es dudosa. El proyecto de ley para regular la convalidación de títulos de cirugía plástica obtenidos en el exterior, retoma la idea que presentara el senador Jorge Iván Ospina, y que solo llegó hasta dos de los cuatro debates necesarios en el Congreso. Dicho proyecto fue engavetado por vencimiento de términos. El pasado mes de mayo, el Ministerio de Educación había suspendido por un lapso de un mes, las convalidaciones en trámite de posgrados de cirugía plástica y estética otorgados por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Perú), la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Nacional de la Plata (Argentina) y la Universidad Veiga de Almeida (Brasil). El propósito de la suspensión fue verificar la autenticidad de la documentación presentada entre 2010 y 2014 por decenas de médicos colombianos. Según la ministra de Educación, Gina Parody, se solicitará asesoría a la Universidad de Antioquia para la definición de requisitos más rigurosos para la práctica de cirugías plásticas y estéticas. La ministra Parody convocó al Tribunal de Ética Médica para que sancione a los médicos que incurren en faltas a la práctica idónea, segura. También llamó la atención de la Superintendencia de Industria y Comercio para controlar la publicidad, cuyas promesas atraen a más de un incauto. Solo en el Área Metropolitana ya van nueve mujeres muertas después de cirugías plásticas en lo que va corrido de 2016. Es preciso aclarar que no todos estos casos son producto de negligencia o impericia médica. Es cuestión de ética médica como dice la ministra Parody, pero también de regulación y de sanción por parte de las autoridades competentes. No solo estamos hablando de cuerpos que quedan deformes o maltratados después de una cirugía, estamos hablando de cadáveres. Es hora de que se sacudan las agremiaciones de médicos y sancionen socialmente a sus colegas cuya titulación sea de dudosa procedencia o cuya negligencia e impericia haya sido comprobada. Finalmente, ya hemos escuchado los dolorosos testimonios en esta cabina de Bluradio, nosotros, los ciudadanos, también tenemos responsabilidades: es fundamental conocer la carrera del cirujano que practicará el procedimiento (diplomas, universidad de donde proceden, experiencia en la práctica quirúrgica) y es imperioso entender los riesgos a los cuales se expone el paciente (toda cirugía estética o de otra índole conlleva riesgos). El proyecto de ley para regular la convalidación de títulos de cirugía plástica obtenidos en el exterior no se puede quedar en una promesa que emerge de la presión coyuntural de los medios de comunicación. Muchas vidas dependen de ello".