En una carta enviada al presidente, Iván Duque, la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez y al director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, Eduardo José González; el defensor nacional del pueblo, Carlos Camargo, solicitó la reubicación urgente de la comunidad Buraudo en Lloró, Chocó.
Son cerca de 1.200 habitantes afros e indígenas que obtienen los sustentos de los ríos Atrato y Andágueda, sufriendo graves afectaciones constantemente por su cercanía a los afluentes, ante la falta de servicios públicos y agua potable.
Luego de un recorrido por el departamento de Chocó, el defensor del Pueblo dijo lo siguiente:
De tal manera, lo observado corresponde a afectaciones en vivienda, salud, infraestructura de educación, agua y saneamiento básico, seguridad alimentaria, asistencia psicosocial, entre otros.
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Las acciones comprendidas dentro de la atención de la emergencia se encuentran limitadas a escasas actividades propuestas y ejecutadas a través del PMU vigente. El departamento, los municipios y las comunidades afectadas, demandan atención.
El defensor pidió la reubicación “con urgencia” de la comunidad que vive en un estado de zozobra por las inundaciones y enfermedades.
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A esto se suma que la única sirena de alerta que tenían, y que fue instalada gracias a una donación que llegó desde Envigado en Antioquia, resultó destruida por la última creciente de los ríos.
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