Aunque uno de los primeros en reaccionar a la adjudicación de las obras finales de las turbinas 3 y 4 de Hidroituango a la empresa colombiana Schrader Camargo, fue el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, que en sus redes sociales celebró la salida de CCC Ituango y agregó que esa contratista, con la que ha tenido bastantes desencuentros, está conformada por empresas vinculadas al escándalo de Odebretch y condenadas fiscalmente por Hidroituango.
Insistió que supuestamente las tres empresas que conforman el consorcio hicieron todo tipo de estrategias para seguir ganando billones reparando los daños que ellas mismos causaron.
Sin embargo, ya aparecen cuestionamientos a la empresa colombiana. Esta vez por parte del diputado de Antioquia, Luis Peláez, quien señaló que actualmente Schrader Camargo está en Hidroituango como subcontratista de General Electric, muy cercanos al alcalde Daniel Quintero, pero ha sufrido retrasos por una protesta de dos días que hicieron sus trabajadores en las instalaciones de turbogeneradores en septiembre, además de que está participando en la licitación por la segunda etapa y se adjudica un contrato de más de 300.000 millones de pesos, cuando sus ingresos no superaran los 100.000 millones de pesos anuales.
Sumado a eso, el diputado Luis Peláez cuestiona que recibe un contrato millonario a dedo, pues fue adjudicación directa:
“Responden realmente a un contrato a dedo. Es una denuncia gravísima frente a este tema, pero recordemos que este mismo contratista en la turbina 1 y 2 tiene retraso de mes y medio. Es increíble que esté retrasado en la obra y le hayan adjudicado un nuevo contrato, eso es inaudito”.
A diferencia de las dos primeras turbinas que se encenderían antes del 30 de noviembre de este 2022 con 600 megavatios de energía, las generadoras 3 y 4 deben entrar en operación antes del 30 de noviembre de 2023, de acuerdo con el cronograma de Hidroituango.
Ante este panorama y a un mes del plazo máximo para el encendido de Hidroituango, la Asamblea de Antioquia hará este martes un debate de control político ante las demoras y la incertidumbre sobre el futuro del megaproyecto. A la sesión están citados los representantes de EPM y el alcalde de Medellín, Daniel Quintero.
La tensión por la puesta en marcha de Hidroituango se traslada al recinto de la Asamblea de Antioquia, donde los diputados exigirán respuestas a la incertidumbre que ha rodeado a la hidroeléctrica que ha tenido tres aplazamientos en su inauguración.
Si bien EPM ya señaló que el 15 de noviembre y el 25 de este mismo mes se encenderían las dos primeras turbinas, todavía no hay certezas porque dependerían de unas pruebas adicionales que se adelantan en el megaproyecto y que llevarían a retrasar aún más.
Esto tiene preocupada a la Asamblea de Antioquia, porque si se incumple el plazo máximo del 30 de noviembre, el proyecto se enfrenta a sanciones por 5.7 billones de pesos.
Por ahora, está pendiente de la adjudicación de la segunda etapa de la megaproyecto que compete a la construcción de las turbinas de la 5 a la 8, proceso de licitación pública que se abrió en marzo y después de cuatro aplazamientos se espera que este viernes 4 de noviembre se reciban las ofertas económicas de las diez firmas interesadas en adjudicarse este contrato en Hidroituango.
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