Desde el Seminario de Misiones de Yarumal, donde se formó monseñor Jaramillo y creó las misiones de evangelización a lugares apartados de Colombia, África y Asia, recuerdan su legado y celebran que llegue a los altares.
En Yarumal los misioneros nunca se imaginaron que el joven que el 3 de diciembre de 1936 hizo sus votos de fe iba a llegar a los altares. El misionero Jorge Iván Fernández, quien estudió con él y estuvo en sus últimas predicaciones del evangelio, recordó su paso por el Seminario y lo que significa que sea beatificado por el sumo pontífice.
"Es un motivo de mucha alegría porque anteriormente parecía que los santos solo se producían en Italia y en Europa, el señor va suscitando personas que se entreguen", expresó
Quienes conocieron a Monseñor Jaramillo no escatiman en calificativos para recordar su legado; su cualidad como orador es una de las que más destacan.
Para el Seminario de Misiones extranjeras de Yarumal es un nuevo personaje que se suma al cuadro de honor en el que están, además de reconocidos sacerdotes, el expresidente Belisario Betancur, el escultor Rodrigo Arenas y el poeta Eduardo Escobar; todos ellos recorrieron sus pasillos.
Como rector del Seminario de Yarumal, Monseñor Jesús Emilio Jaramillo soñaba con enviar el evangelio a África, el lugar donde hoy los misioneros más que nunca están proclamando el legado del que será el nuevo beato colombiano.
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