Los habitantes de San Gil, Santander, vieron impotentes cómo las calles de su municipio parecían ríos caudalosos.
Las lluvias acompañadas de fuertes vientos, que por cerca de tres horas se registraron, obligaron a resguardarse. Las autoridades empezaros a adelantar el censo para determinar la gravedad de las afectaciones.
El director de la Unidad departamental de Gestión del Riesgo, César García, dijo que de la mano de las autoridades locales empezaron a adelantar el censo para determinar la gravedad de las afectaciones.
“Hasta ahora hemos establecido que no hubo víctimas ni daños graves en viviendas o establecimientos comerciales”, sostuvo.
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Estamos en el inventario y lo que hemos hablado con los organismos de socorro es que además de algunas casas inundadas no ocurrieron hechos que lamentar
Sin embargo, el funcionario precisó que en algunos barrios los muros se habrían afectado con la fuerza de las aguas, aunque no provocaron personas heridas.
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García también hizo un llamado a los alcaldes de la región para que actualicen y estén atentos con los planes de contingencia, ante el incremento de las lluvias que se registrará en los próximos días.