Con profundo dolor por la muerte de su hija, Karina Blanco Durán, la joven que fue violada, asesinada y su cuerpo arrojado al río Cáchira en Norte de Santander, el padre de la adolescente, César Blanco, habló sobre las aspiraciones de su hija, quien este año se graduaría de bachiller.
“Estaba ya con aspiraciones de entrar a la universidad, cursaba undécimo grado y quería estudiar psicología. Ella era una niña muy madura, juiciosa, sabía ya lo que quería”, expresó el padre de Karina.
No comprende cómo el agresor, quien fue linchado por la comunidad, pudo haber cometido el atroz crimen.
“Ella era una niña linda, con su carita bonita, no demostraba su edad y el hecho como confiesa lo que le hizo a la niña”, manifestó.
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Según el padre, su hija le había comentado unas amigas que un hombre la perseguía desde hace varios días.
“Lo que la niña había comentado con unas amigas de ella es que sentía que el hombre la estaba acechando desde días anteriores, por eso cuando ocurrió ella alcanza a enviar unas fotos del agresor que con eso fue que la comunidad lo identificó”, aseguró el padre.
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Sobre el agresor de Karina Blanco Durán se conoce que era de nacionalidad venezolana, de 37 años, y en el momento de su captura habría confesado que violó, asesinó y arrojó el cuerpo de la menor al río.
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