Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Dos militares fueron condenados a 26 años de prisión por el caso de Wilfredo Quiñones Bárcenas. El joven que fue desaparecido, torturado y asesinado por militares para hacerlo pasar como guerrillero. La sentencia fue celebrada por familiares y amigos de la víctima en Barrancabermeja.
Eduardo Carreño, abogado del caso y miembro del colectivo José Alvear Restrepo afirmó que “lo que demuestra el proceso es presentar civiles como muertos en combate pertenecientes a una guerrilla es absurdo, pero esa es una práctica del Ejército. Ahora, Prieto Ribera lo hizo cuando era teniente, pero tiene varios procesos por otros crímenes en otros municipios y departamentos”.
Según testigos del hecho, el 3 de septiembre de 1995 a las 8:30 p.m. Quiñones Bárcenas, de 18 años de edad, salió junto con José Gregorio Romero Reyes y Albeiro Ramírez a una fiesta que se realizaría en el barrio la Floresta en Barrancabermeja, y nunca regresaron.
Su cuerpo fue hallado en el barrio La Paz, en la vía al Llanito, con nueve disparos y signos de tortura. Según el informe del Ejército, él habría sido “dado de baja” en combate ya que se encontró un arma junto a su cadáver.
Dos amigos de la víctima, que lo acompañaban el día del crimen, y que murieron en las mismas circunstancias, también corresponderían a casos de falsos positivos.
BLU RADIO BUCARAMANGA 960AM