¿Pagaría $99 millones por un arriendo? La millonaria cifra que cobran en estas zonas de Bogotá
Las viviendas dentro de este segmento no se destacan por su amplitud, sino por la experiencia de confort y exclusividad que ofrecen.
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Para muchos ciudadanos, vivir en arriendo sigue siendo una de las alternativas más accesibles y prácticas para independizarse o convivir con su familia. Sin embargo, el segmento premium en Bogotá está lejos de ser una opción al alcance de todos.
En la capital, los precios del mercado de lujo alcanzan cifras históricas. Una casa de gran formato puede llegar a costar hasta $99 millones mensuales, mientras que una casa lote ronda los $65 millones. Un apartamento de lujo se ubica cerca de los $60 millones, una casa campestre en $30 millones y un apartaestudio con diseño exclusivo puede alcanzar los $15 millones.
Las zonas más exclusivas de Bogotá se concentran en barrios como Rosales, El Nogal, Chicó Norte, La Cabrera, Seminario, Santa Bárbara, Country Club y La Carolina. Son sectores reconocidos por su cercanía a embajadas, clubes privados, centros financieros y colegios internacionales, lo que los convierte en el lugar preferido de altos ejecutivos, empresarios extranjeros y diplomáticos.
Vivir en una zona lujosa no es tarea fácil. Según datos de plataformas como Fincaraiz, las altas tasas de interés y la limitada oferta de vivienda han llevado a muchos a preferir el arriendo antes que la compra de un inmueble propio. Esta tendencia ha dinamizado el mercado en ciudades como Bogotá y Medellín, donde los cánones mensuales oscilan entre $15 y $99 millones.
Las viviendas dentro de este segmento no se destacan por su amplitud, sino por la experiencia de confort y exclusividad que ofrecen. Casas campestres, penthouses y apartamentos que superan los 1.500 m² incluyen terrazas con vista panorámica, acabados de alta gama, gimnasios privados, cine en casa, jacuzzi, sauna, salas de reuniones y vigilancia las 24 horas.
Estas propiedades no solo funcionan como residencias, sino como espacios diseñados para quienes buscan privacidad, comodidad y ubicación estratégica. En la mayoría de los casos, los arrendatarios son personas extranjeras que demandan condiciones de vivienda con estándares internacionales.
El sector de arriendos de alto valor ha dejado de ser únicamente un símbolo de estatus para convertirse en una inversión que ofrece calidad de vida y seguridad. Analistas del sector aseguran que su crecimiento responde a una combinación de factores: la escasa oferta, la demanda internacional y el posicionamiento de Bogotá como centro corporativo y diplomático.
Asimismo, la llegada de profesionales extranjeros y la expansión de los negocios globales han consolidado un mercado de vivienda premium que hoy se compara con el de ciudades como Ciudad de México, Madrid o Miami.