Un juez especializado de Antioquia sentenció a 60 años de cárcel a Luis Eduardo Echeverri, alias “Lucho”, por la desaparición y muerte de 10 personas, el secuestro de seis adultos y cinco menores de edad y el hurto de vehículos de alta gama, en la masacre cometida en Sopetrán, Antioquia, el 24 de abril de 2011.
Según la Fiscalía, a una finca ubicada en la vereda El Rodeo, en Sopetrán, llegaron integrantes de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia – AGC – al mando de alias “Lucho”, portando distintivos de la Policía y preguntaron por dos integrantes de la banda La Oficina: alias “Barnie” y “Gomelo”.
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Al no encontrar a los dos presuntos delincuentes, las AGC retuvieron a 10 personas que estaban en la finca de recreo y las sometieron a vejámenes. Además, un mes después, el CTI de la Fiscalía encontró nueve de los 10 cuerpos de las víctimas, enterrados y desmembrados. Un solo cuerpo permanece desaparecido.
El ente acusador también aseguró que luego de cometer los múltiples asesinatos, los hombres al mando de alias “Lucho” “hurtaron cuatro camionetas, tres motos, joyas, equipos celulares y dos portátiles”, algunos elementos que fueron abandonadas en el barrio Moravia de Medellín, un vehículo fue encontrado incinerado en el río Cauca y una de las motos fue hallada en un operativo de allanamiento y registro en el inmueble de alias “Lucho”.
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El juez entonces dictó pena máxima para este cabecilla, por nueve homicidios agravados, 10 desapariciones forzadas, seis secuestros simples, cinco secuestros agravados, así como hurto calificado y agravado.
Por estos mismos hechos y tras llegar a un preacuerdo con la Fiscalía, alias “El Chato” fue sentenciado a 34 años de cárcel, junto a alias “Gally".
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