Registraduría deja en manos de altas cortes el futuro de la consulta popular

El registrador nacional, Hernán Penagos, dejó en manos de las altas cortes (Corte Constitucional, el Consejo de Estado) el futuro de la consulta popular convocada vía decreto por el Gobierno del presidente Gustavo Petro. Anunció, además, que elevará una solicitud de concepto a la Sala de Consulta del Consejo de Estado, a la Agencia Nacional de Defensa Jurídica del Estado y a la Procuraduría, sobre si se cumplen o no los requisitos para la convocatoria. El registrador Penagos advirtió que con esta decisión está en juego la democracia. "Lo que procede ante esta controversia que no tiene precedente en la historia reciente del país, lo pertinente es dejar en manos de las altas cortes para que decidan si continuamos o no con el trámite de esta convocatoria", dijo Penagos en rueda de prensa.El funcionario también indicó que, de aprobarse la consulta, no podría llevarse a cabo el 7 de agosto, como dice el decreto del presidente Petro, ya que para ello se necesita de al menos tres meses."Esta consulta requiere un proceso juicioso y ordenado. En el caso de esta consulta, serían cerca de 112.000 mesas de votación. Además, tendrán que llevarse material electoral a 67 países y a 124 consulados. La tarea de distribución es difícil, porque no solo se trata de una tarea de la Registraduría, sino también de unas acciones de cada país", explicó Penagos.En ese sentido, reiteró que "solo el proceso de distribución conlleva meses para que llegue oportunamente", sumado a que, en el caso del exterior, debe abrirse la votación con una semana de anticipación.Del Gobierno, el primero que reaccionó a la decisión de la Registraduría fue el ministro del Interior, Armando Benedetti. Desde el Congreso afirmó: "Está desacatando el decreto, él es un operador logístico. Él no tiene por qué estar haciendo una excepción constitucional de una excepción constitucional que hizo el Gobierno".