"Hace más o menos dos meses comenzaron las amenazas telefónicas y por correos, donde me decían que no podía seguir esculcando lo que estaba revisando en la Gobernación y que me daban 24 horas para salir del departamento, ya que tenían identificada a toda mi familia y a mí para asesinarme", dijo.
Tras esas amenazas el gobernador encargado para La Guajira habló con el fiscal general, Néstor Humberto Martínez, y puso las respectivas denuncias. Posterior a esto le reforzaron su seguridad y a sus familiares.
Incluso dijo que había aportado varias pruebas a la Fiscalía y que las amenazas solo reafirman que estaba haciendo bien su trabajo.
"Lo que hicieron fue ratificarme más y seguir dando todo el trabajo y toda la lucha que estamos dando dentro de la administración. Pisamos el callo que era porque a mucha gente le dolió esa situación", explicó Jorge Enrique Vélez.