Nissan tomo dura decisión con una de sus plantas en Japón debido a su situación económica

El fabricante japonés Nissan anunció que suspenderá la producción de vehículos en su planta de Oppama, al sur de Tokio, a partir de marzo de 2028, como parte de una amplia estrategia de reestructuración derivada de su compleja situación financiera.La decisión fue confirmada por la compañía este martes, e implica el traslado e integración de las operaciones de Oppama a una instalación ubicada cerca de Fukuoka, en el suroeste de Japón, medida que afectará a una de las plantas históricas de la marca, inaugurada en 1961 y especializada en la producción de vehículos híbridos, que actualmente emplea a unas 2.400 personas.¿Cuándo cerrará su fábrica?El cierre se ejecutará al finalizar el ejercicio fiscal 2027, es decir, en marzo de 2028. Nissan indicó que las demás funciones de Oppama, como investigación y desarrollo o pruebas de choque, se mantendrán en operación. En cuanto al futuro laboral de los empleados, la compañía explicó que se mantendrán en sus cargos hasta ese momento y que su situación será discutida con los sindicatos.Este anuncio forma parte de un plan más amplio que Nissan viene implementando desde noviembre de 2023, cuando comunicó su intención de reducir su capacidad global de producción en un 20%. Según los objetivos establecidos, la compañía busca pasar de 17 a solo 10 plantas de producción en todo el mundo antes del cierre del ejercicio fiscal 2027. Asimismo, pretende limitar su capacidad anual (sin incluir China) a 2,5 millones de vehículos.A esta reestructuración se suma un recorte significativo en su fuerza laboral: Nissan proyecta eliminar cerca de 20.000 empleos en todo el mundo en el mismo período.El director ejecutivo encargado del plan de recuperación, Ivan Espinosa, declaró que esta determinación fue tomada tras un análisis cuidadoso. "Hoy, Nissan ha tomado una decisión difícil, pero necesaria. No fue fácil (...) pero estoy convencido de que es un paso esencial para superar nuestros desafíos actuales", afirmó Espinosa.La medida responde a los resultados financieros adversos de la empresa durante el año fiscal 2024-2025, periodo en el que Nissan registró pérdidas netas cercanas a los 4.100 millones de euros (aproximadamente 4.700 millones de dólares). La compañía atribuyó estas pérdidas principalmente a los costos asociados al plan de recuperación, sumados a una disminución sostenida en las ventas en sus principales mercados y una elevada carga de deuda.Nissan argumentó que la transferencia de la producción a la planta de Fukuoka representa “la solución más eficiente”, teniendo en cuenta factores como las capacidades productivas, la rentabilidad y el potencial de inversión de las instalaciones.