Por esta razón el terremoto de 8.8 en Rusia no dejó ninguna víctima fatal

Pasaron más de 10 para que el mundo volviera a encender alarmas a raíz de un terremoto, pues desde el que se registró en 2011 en Fukushima, Japón, el del pasado 29 de julio en Rusia ha sido el más fuerte en muchos años con una magnitud de 8.8.Y si bien el fenómeno fue un motivo para alertar a todo el mundo, en especial por la alerta de tsunami por parte de países como Estados Unidos, Japón, Chile, Ecuador, entre otros, no se registró ninguna víctima fácil y Rusia, que fue el epicentro, solo presentó daños materiales y todo gracias a algo que desde hace años atrás se hizo en este país.Por esto no hubo muertes en Rusia tras el terremoto de 8.8Un informe realizado en G1, medio en Brasil, con el apoyo de expertos en este tipo de hecho, indicó que todo se debe a varios factores tanto naturales como sociales, pero también influyó el trabajo hecho por Rusia en los últimos años en su infraestructura."Existe toda una infraestructura global de monitoreo y alerta de tsunamis que ha estado en funcionamiento desde mediados de la década del 2000", explicó José Marengo, coordinador de Investigación y Desarrollo del Cemaden. Según él, los países con un historial de este tipo de desastres, especialmente los de la Cuenca del Pacífico, han desarrollado sistemas de alerta eficientes y una cultura de respuesta rápida entre sus poblaciones. "Cuando suena una sirena, todos ya saben qué hacer", afirmó en el medio mencionado.Desde 2004, tras el tsunami que cobró la vida de 230.000 personas en Asia, Rusia se empeñó en evolucionar su infraestructura local, tanto en edificios como en herramientas de detección y respuesta en toda la región, algo que les permite identificar esto con tiempo y permitir evacuaciones oportunas en zonas donde se pueda presentar un hecho como este.“La propia región de Kamchatka, donde se produjo el terremoto, mantiene una red de 88 estaciones sísmicas y centros de mando capaces de emitir alertas de tsunami validadas en tiempo real. En julio de 2025, por ejemplo, las autoridades rusas probaron con éxito los protocolos de evacuación tras un terremoto de magnitud 7,4”, añadieron en la explicación.