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El pasado 14 de julio la JEP imputó 22 militares por 296 casos de falsos positivos que se presentaron, principalmente, en el departamento del Casanare. Tas la imputación, a ellos se les concedió un tiempo para que aceptaran o negaran la responsabilidad en los hechos.
El militar de más alto rango involucrado fue el general en retiro Henry Torres Escalante, excomandante de la Brigada XVI del Ejército, quien aceptó su responsabilidad.
“Acepto los cargos de autor mediato de crímenes de lesa humanidad, de asesinato y de desaparición forzada de personas”, señaló a la JEP.
En los casos en que los militares decidan no aceptar su responsabilidad podrían enfrentar un juicio en la JEP que, si son hallados responsables, los podría llevar a pagar penas de hasta 20 años de prisión.
“La Sala estableció como fecha límite el 8 de noviembre de 2022 para que todos los comparecientes reconozcan los hechos que les fueron imputados y su responsabilidad o, por el contrario, los rechacen. Igualmente, los comparecientes pueden reaccionar, aportando argumentos o evidencia adicional. Por su parte, las víctimas acreditadas y el Ministerio Público tienen el mismo tiempo para reaccionar frente a lo descrito en el auto”.
Los imputados hicieron parte del Gaula Casanare, el Batallón de Infantería No. 44 ‘Ramón Nonato Pérez’ y de los batallones de Contraguerrilla 23, 29 y 65, también hay dos civiles.
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