Reforma a la salud en Colombia: ¿se debe acabar con las EPS?

Con el nombramiento de Carolina Corcho como ministra de Salud del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, crece el temor frente a la reforma a la salud y la posible eliminación de las EPS.Por esta razón, Mañanas Blu, cuando Colombia está al aire, consultó a tres expertos del sector salud para saber qué tan conveniente es acabar con todas las EPS y cuáles serían los riesgos para los ciudadanos.Uno de los primeros en opinar fue Juan Gonzalo López, miembro de la Junta Directiva de Acemi, gremio que reúne las EPS, quien señaló los puntos positivos de estas instituciones.“Quiero resaltar los aspectos positivos del sistema. (…) Las EPS hemos sido un punto central en términos de la gestión de riesgos, tanto en salud, financiero, reputacional y comercial. (…) A veces parece sencillo, pero es una articulación de miles de puntos de atención que tienen que ver con atención primaria, complementaria, dispensación de medicamentos, la realización de laboratorios, todas aquellas actividades de un aseguramiento”, destacó.Por su parte, Luis Gonzalo Morales, exsecretario de salud de Bogotá, explicó en qué consiste la Ley 100 y pidió no poner en riesgo el servicio en millones de colombianos.“Hay que recordar lo que hizo Colombia en el 93 con la Ley 100, y es que adoptó un sistema de aseguramiento social, que busca la protección financiera y hacer una mejoría al acceso de la población”, dijo.En ese sentido, añadió: “Otra cosa es que se discuta si deben ser públicas o privadas; pero un sistema de aseguramiento social que adoptó Colombia en el 93 se debe preservar. Me parece sensato decir que la ministra se va a sentar a escuchar los sectores. Lo más importante es no poner en riesgo la prestación de los servicios”.Posteriormente, dio su opinión el exministro de Salud Augusto Galán, que afirmó que, si bien no es el mejor sistema de salud, sí es reconocido a nivel internacional.“Yo creo que llevamos cerca de 30 años construyendo una institucionalidad en el sector salud y hay que partir de ahí. Nuestro sistema de salud no es el mejor, pero tampoco es el peor. Es un sistema reconocido a nivel internacional. Es un referente desde hace muchos años y llegar a ese punto no ha sido fácil”.