Superintendencia de Salud ordenó vigilancia especial a red de clínicas Esimed

Luego de varios meses de incumplimientos, cierres de clínicas en todo el país, conflictos con los trabajadores y escándalos como el del bebé de 12 días de nacido que murió luego de varias quemaduras en su cuerpo producidas en una incubadora en una de las clínicas en Bogotá, la Superintendencia de Salud ordenó una estricta medida de vigilancia especial durante los próximos tres meses. Con esta acción también se remueve al revisor fiscal contratado por Esimed y se designa a una firma de auditoría que hará las labores de contralor encargado para revisar cada uno de los movimientos financieros de Esimed. La superintendencia asegura que no hay evidencia de un programa de tecnovigilancia para los equipos biomédicos, por lo que “no se puede asegurar la disponibilidad, funcionalidad, operatividad, y conservación en todas las sedes a nivel nacional”, explica el comunicado. Agrega que Esimed, con más de treinta sedes en todo el país, no garantiza la prestación adecuada de los servicios de manera oportuna y continua.Vea también: Enfermeras de Esimed insistieron en falta de personal antes de muerte de bebé “No presenta disponibilidad de agenda de algunas especialidades estando habilitadas, esto es, ortopedia, cardiología, medicina interna, radiología e imágenes diagnósticas”, señala la superintendencia. En las últimas horas fue clausurada la sede de Santa Marta por la Secretaría de Salud Departamental. Además, cabe que recordar que BLU Radio publicó los detalles de un giro de cerca de 9.000 millones de pesos desde Esimed hacia Prestnewco, la empresa holding dueña de la red de clínicas y de la EPS Medimás, por cuenta de un contrato de asesoría para el pago de unas acreencias de Cafesalud. Y otro movimiento financiero por $45.000 millones que fueron extraídos de Esimed con destino a un contrato de outsorcing con la empresa Corporación IPS que, según el documento de compraventa, debía ser pagado a través de una capitalización de los nuevos accionistas, pero se canceló a partir de las cuentas generales de Esimed. Es decir, de los recursos públicos para la salud. Como lo reveló BLU Radio en su momento, fuentes aseguraron que esos dos movimientos debilitaron gravemente el estado financiero de la compañía y la llevaron a una crisis que hoy se mantiene y que tiene como víctimas finales a los pacientes. La superintendencia del gobierno anterior encontró todos estos hallazgos, pero solo solicitó un plan de mejora a la entidad.