Con la celebración de la Eucaristía en Eribil, la cuarta ciudad de Irak, capital de la Región Autónoma Kurda -tan importante para la humanidad porque se le considera la ciudad más antigua que ha estado habitada permanentemente desde el siglo XXIII a. C.- terminó el Papa Francisco su extenuante viaje a Irak. Fue una celebración para 10.000 feligreses en el estadio "Franso Hariri", el segundo más grande del país, con un aforo de 30.000 personas.El viaje estuvo lleno de encuentros emocionantes y elocuentes para el mundo. Por ejemplo, la reunión con el ayatolá chiita Ali al-Sistani; o el encuentro con Abdullah Kurdi, papá del pequeño Aylan, quien naufragó con su hermano y su madre en las costas turcas en septiembre de 2015 cuando intentaban llegar a Europa, y cuya foto muerto en una de esas playas se hizo viral; o el momento de oración con líderes de otras denominaciones religiosas en la Patria de Abraham, Ur de Caldea.A lo largo del viaje retumbaron tres mensajes muy fuertes:1. Los líderes religiosos no pueden abandonar a los que sufren. El papa asumió todos los riesgos por acompañar a los casi 300 mil católicos romanos que viven en esta región. El compromiso de los líderes espirituales tiene que ser más intenso con los más necesitados.2. La religión no puede ser fruto de división y violencia. Tenemos que entender que la fraternidad está más allá de cualquier creencia religiosa. Vivimos nuestra fe apasionadamente, pero somos respetuosos de los demás. Me emocionó la frase de Najeeb Michael, arzobispo caldeo de Mosul, quien dijo: "Juntos decimos no al fundamentalismo. No al sectarismo y la corrupción".3. Recordarnos que ser discípulos de Jesús implica ser instrumentos de Paz. Dijo el Papa Francisco: “Jesús nos libera y nos fortalece, para que sepamos resistir a la tentación de buscar venganza, que nos hunde en una espiral de represalias sin fin. Con la fuerza del Espíritu Santo nos envía, no a hacer proselitismo, sino como sus discípulos misioneros, hombres y mujeres llamados a testimoniar que el Evangelio tiene el poder de cambiar la vida” cierro cita.Esperemos que la fuerza simbólica de este viaje se refleje en un cambio de actitud en aquellos que creen que la violencia es la solución de los problemas, o de quienes se creen mejores seres humanos por tener tal o cual creencia religiosa. Somos hermanos, eso es lo más importante.Escuche la reflexión y el análisis de Alberto Linero en Mañanas BLU:
El papa Francisco partió de Irak el lunes por la mañana al término de la primera visita en la historia de un sumo pontífice a este país inmerso desde hace años en la violencia, un viaje en el que defendió la causa de la comunidad cristiana iraquí.La visita del papa de 84 años, que había llegado a Irak el viernes pasado, transcurrió sin incidentes.Durante su estadía, Francisco visitó la capital Bagdad, así como Mosul y Qaraqosh, estos dos últimos en el norte del país que sufrió el terror de los yihadistas del Estado Islámico (EI).En la ciudad santa de Nayaf (sur), el papa se entrevistó con el gran ayatolá Alí Sistani, una referencia religiosa para la mayoría de los musulmanes chiitas del mundo."Irak siempre permanecerá conmigo, en mi corazón", dijo Francisco el domingo por la noche, después de una misa frente a miles de fieles en un estadio de Erbil, en el Kurdistán iraquí.El Papa Francisco estaba ansioso por conocer a los cristianos de Irak (el 1% de la población actualmente, contra el 6% hace 20 años) y dedicó a este país mayoritariamente musulmán su primer viaje al extranjero en 15 meses.Debido a la pandemia de covid-19, salvo el domingo en Erbil, el papa no pudo reunir a multitudes como sucede en cada uno de sus viajes al extranjero.Sin embargo, viajó 1.445 km a través de Irak, la mayor parte del tiempo en avión o helicóptero, sobrevolando zonas donde todavía existen células yihadistas clandestinas, tras la derrota del Estado Islámico a fines de 2017.En Irak, el papa denunció el "terrorismo que abusa de la religión", pidió "paz" y "unidad" en Oriente Medio y lamentó la salida de los cristianos de la región como un "daño incalculable".También participó en una oración ecuménica con las diferentes religiones presentes en Irak desde hace milenios en Ur, lugar natal según la Biblia del patriarca Abraham, padre del monoteísmo.
En medio de las ruinas dejadas por los yihadistas, el papa Francisco rezó el domingo por las "víctimas de la guerra" contra el grupo Estado Islámico (EI) en la ciudad iraquí de Mosul, "capital del califato" derrocado hace tres años.En el tercer y último día de su histórica visita a Irak, bajo fuertes medidas de seguridad, el papa abordó el destino de la comunidad cristiana iraquí, una de las más antiguas del mundo, pero también una de las que más se ha exiliado."La trágica disminución de los discípulos de Cristo, aquí y en todo Oriente Medio, es un daño incalculable no sólo para las personas y las comunidades afectadas, sino para la misma sociedad que dejan atrás", dijo.En este país de 40 millones de habitantes, casi todos musulmanes, hay 400.000 cristianos, una cifra muy inferior en comparación con los 1,5 millones de antes de la invasión estadounidense en 2003.En Mosul, próspera ciudad comercial desde hace siglos, las autoridades católicas no consiguieron encontrar una iglesia en buen estado para recibir al papa argentino, que efectúa el primer viaje de un sumo pontífice a Irak.En total, 14 iglesias de la provincia de Nínive (norte), cuya capital es Mosul, fueron destruidas, entre ellas siete templos de los siglos V, VI y VII.Por ello, se tuvo que instalar un escenario en las ruinas de cuatro iglesias de diferentes diócesis, entre las que figura la iglesia Al Tahira de Mosul, de más de mil años de antigüedad.Es en este lugar que el papa se dirigió a una pequeña multitud entusiasmada.En los alrededores, se desplegaron fuerzas de seguridad y controles en toda la provincia, donde todavía persisten células yihadistas, pese a la derrota militar del EI a finales de 2017.En alertaDomingo es el día en el que los guardaespaldas y las fuerzas de seguridad tienen que estar más alerta.Los pocos kilómetros que el papa hizo por carretera fueron en coches blindados. La mayor parte de los 1.445 km del itinerario emprendido el viernes los recorrió en avión o helicóptero para sobrevolar las zonas y evitar aquellas en las que todavía se esconden células yihadistas clandestinas.Y todo ello en medio de un confinamiento total decretado hasta el lunes (día de su partida) para hacer frente a los contagios por COVID-19 que están alcanzando récords en el país.Pero a pesar de este complejo contexto, los cristianos iraquíes quieren ver en esta visita papal un mensaje de esperanza."Pueblo de amor""El papa Francisco llega con su hábito blanco para anunciar a todo el mundo que somos un pueblo de paz, de civilización, de amor", afirma Butros Chito, sacerdote católico, mientras acaba de colocar los últimos adornos en la iglesia Al Tahira de Qaraqosh, cerca de Mosul.En esta localidad cristiana, con una historia más que milenaria, el papa de 84 años se reunió con fieles que todavía dudan en volver definitivamente a sus pueblos.Su comitiva fue recibida por los vítores de los cristianos que huyeron hace años de la ocupación yihadista de la ciudad, vestidos con trajes tradicionales y agitando palmas, constató la AFP. Allí, rezó con ellos el Ángelus."Ahora es el momento de reconstruir y volver a empezar", les animó.En la llanura de Nínive, vivía la mayoría de los cristianos de Irak, pero muchos huyeron de sus localidades en 2014 y se refugiaron en el Kurdistán iraquí. Desde entonces sólo han vuelto unas decenas de miles de ellos.Muchos dicen temer a los exparamilitares hoy integrados en el Estado y que han ganado el terreno al EI.Las palabras pronunciadas el sábado por el ayatolá Alí Sistani, gran figura del chiismo que dijo al papa que trabaja para que los cristianos de Irak vivan en "paz", en "seguridad" y con "todos sus derechos constitucionales", podrían animarlos.Misa en un estadioEl papa argentino no ha dejado de denunciar en Irak "las armas", el "terrorismo" que "abusa de la religión" y "las intolerancias".De nuevo, en su oración del domingo, reiteró su mensaje: "No nos está permitido matar a nuestros hermanos [en] nombre" de Dios, "no nos está permitido hacer la guerra en su nombre".Tras los encuentros con los cristianos de Mosul y Qaraqosh, el papa oficiará una misa por la tarde en un estadio de Erbil, la capital del Kurdistán, en el norte, ante miles de fieles.Francisco podrá aprovechar la ocasión para conversar con algunos fieles y probablemente saludarlos desde el papamóvil, que por el momento no ha utilizado.
Tras esta reunión inédita, en la ciudad santa chiita de Nayaf, el papa inició su etapa más espiritual del viaje: la peregrinación a Ur para rezar por la "libertad" y la "unidad, y poner fin a las guerras y al "terrorismo".A este lugar, cuna del patriarca Abraham, uno de los grandes profetas del cristianismo, el islam y el judaísmo, ya quiso venir el papa Juan Pablo II en 2000, pero Sadam Husein lo impidió.Francisco, conocido por tender la mano a todas las religiones, rezó junto a responsables yazidíes --pequeña minoría iraquí martirizada por los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI)--; sabeos y zoroastristas --comunidades milenarias en el país--; y musulmanes, tanto chiitas como sunitas.Poco antes, el jefe de 1.300 millones de católicos en el mundo se reunió durante casi una hora con el gran ayatolá Sistani, referencia religiosa para la mayoría de musulmanes chiitas, en uno de los encuentros religiosos más importantes de la historia.- "Paz" para los cristianos iraquíes -De la reunión sólo trascendieron dos cosas: un foto de los dos ancianos y, sobre todo, un comunicado de la oficina de Sistani.El dirigente chiita de 90 años, que lucía el turbante negro de los descendientes del profeta Mahoma, nunca realiza apariciones públicas, responde por escrito a los fieles y periodistas, y sus representantes leen sus discursos.Con motivo del encuentro, el hombre, de barba larga y complexión frágil, hizo publicar un comunicado en el que agradece al papa Francisco su visita a Nayaf.El gran ayatolá aseguró al pontífice, vestido de blanco, "la atención que presta al hecho de que los ciudadanos cristianos puedan vivir como todos los iraquíes en paz y en seguridad, con todos sus derechos constitucionales".Tras reunirse con el clero católico a su llegada el viernes a Bagdad, el papa de 84 años quiso tener este gesto de apertura hacia el islam chiita, dos años después de firmar en Abu Dabi un documento sobre "la fraternidad humana" con el gran imán sunita de la mezquita Al Azhar de El Cairo, Ahmed Al Tayeb, una de las grandes autoridades sunitas.En el segundo día de la primera visita de un papa a Irak, el pontífice argentino también quiso hacer hincapié en las guerras que desolan el país desde hace cuatro décadas y, en general, los conflictos en Oriente Medio.Ante el área arqueológica en la que afirman fue la casa de Abraham en la llanura de Ur, Francisco afirmó que los creyentes "no pueden callar cuando el terrorismo abusa de la religión" . "Hostilidad, extremismo y violencia no nacen de un espíritu religioso; son traiciones a la religión", clamó Francisco rodeado de los representantes de las religiones que forman este mosaico de civilizaciones que es Irak, suníes, chiíes, zoroastrianos y yazidíes, aunque no de los judíos.En 2014, un tercio del territorio iraquí estaba en manos del EI.Recordó a la comunidad yazidí, "que ha llorado la muerte de muchos hombres y ha visto a miles de mujeres, jóvenes yniños raptados, vendidos como esclavos y sometidos a violencias físicas y a conversiones forzadas"Los yazidíes sufrieron en aquel entonces terribles atrocidades, recordó el papa. Los yihadistas mataron a miles de hombres de esta comunidad, reclutaron a niños e hicieron a miles de mujeres esclavas sexuales. Para la ONU, podría tratarse de un "genocidio".Más de 6.400 yazidíes fueron secuestrados por los yihadistas, la mitad de los cuales siguen en paradero desconocido. En Ur, el papa dijo que rezaba para que "pronto regresen a sus hogares".El EI también hizo estragos en la vecina Siria, que el sumo pontífice no deja de mencionar en sus discursos desde el viernes.- "Siria martirizada" -Francisco abogó por pasar "del conflicto a la unidad" en "todo Oriente Medio" y "en particular en (...) la martirizada Siria"."No habrá paz sin compartir y acoger, sin una justicia que asegure equidad y promoción para todos, comenzando por los más débiles. No habrá paz sin pueblos que tiendan la mano a otros pueblos", defendió.La víspera, durante una recepción de las autoridades en Bagdad, el pontífice ya habló de Siria, donde la guerra iniciada hace 10 años tras una revuelta popular ha dejado más de 387.000 muertos.Y, como ya había hecho en Marruecos, otro país musulmán que quiso visitar, el papa defendió "la libertad de conciencia y la libertad religiosa"."Son derechos fundamentales, porque hacen al hombre libre de contemplar el Cielo para el que ha sido creado", agregó Francisco, en este país musulmán, donde su minoría cristiana (1% de la población) se dice víctima de discriminaciones.La próxima etapa del viaje es una misa en una iglesia de Bagdad, en lo que será su primer encuentro con fieles católicos de Irak.El obispo auxiliar de Bagdad, Basilio Yaldo, explicó a EFE que este encuentro en Ur era para ellos algo "histórico" pues se esperaba desde hace mucho, cuando ya lo había organizado Juan PabloII y tuvo que renunciar al viaje."Hoy realmente su deseo (de Juan Pablo II) se ha cumplido. Para nosotros este momento es de hermandad, paz y convivencia", agregó.La visita del papa --bajo fuertes medidas de seguridad-- tiene lugar en medio de un confinamiento total de la población tras el aumento de casos de COVID-19, que ronda los 5.000 contagios diarios.
"Que callen las armas", reclamó este viernes el papa Francisco poco después de llegar a Irak para la primera visita de un pontífice a este país diezmado por las guerras y las persecuciones, saludando a los cristianos que decidieron permanecer.Entre fuertes medidas de seguridad y con mascarilla por las medidas anticovid, el papa de 84 años viajó como "un peregrino de la paz" para reconfortar a una de las más antiguas comunidades cristianas del mundo, marcada por la violencia y la pobreza.Durante su estancia, que terminará el lunes tras recorrer 1.445 kilómetros especialmente por aire para evitar las zonas donde se esconden los yihadistas, el pontífice argentino también tenderá la mano a los musulmanes y se reunirá con el gran ayatolá Alí Sistani, la máxima autoridad chiita.El jefe de los 1.300 millones de católicos del mundo evocó todos los asuntos candentes en Irak ante sus principales dirigentes, entre ellos el presidente Barham Saleh, quien le envió una invitación oficial para esta visita sin precedentes.- "Basta de violencia" -"Basta de violencia, de extremismos, de facciones, de intolerancias", dijo el papa. Basta también de "corrupción", el motivo por el que cientos de miles de iraquíes manifestaron a fines de 2019.Entonces, Francisco también urgió al país a dejar de reprimir a sus jóvenes que pedían justicia. "Hay que construir la justicia", reiteró este viernes.Y "que ninguno sea considerado ciudadano de segunda clase", sobre todo los cristianos --1% de la población en este país musulmán-- ni los yazidíes, minoría perseguida por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) que vendió a miles de sus mujeres en "mercados de esclavos".El pontífice denunció así "una barbarie insensata y deshumana" perpetrada en Irak, la antigua Mesopotamia, "cuna de la civilización".El argentino recordó "la antiquísima presencia de los cristianos en esta tierra", donde según la tradición nació Abraham, y abogó por "su participación en la vida pública" como "ciudadanos que gozan plenamente de derechos, libertad y responsabilidad".Tras esta etapa política, el papa inició la parte más espiritual y popular de su viaje.- Catedral mártir -El ambicioso programa comenzó a final del día con una oración en la catedral Nuestra Señora de la Salvación, una iglesia católica del centro de Bagdad que fue el escenario en 2010 de la toma de rehenes más mortal contra cristianos en Irak (53 muertos).Ante un grupo reducido de personas, recordó a los "hermanos y hermanas que murieron en el atentado terrorista (...) y cuya beatificación está en proceso" y agradeció al clero iraquí por su "presencia" y su "cercanía" con los cristianos.A continuación, viajará a Nayaf, Ur, Erbil, Mosul y Qaraqosh. En cada etapa, sólo verá a pocos centenares de fieles, salvo por la misa del domingo en un estado del Kurdistán, en presencia de varios miles.Bagdad aseguró haber adoptado todas las medidas de seguridad "terrestres y aéreas". Y, muestra de una inesperada calma en las tensiones entre Irán y Estados Unidos en Irak, uno de los grupúsculos que suele revindicar disparos de cohetes contra intereses estadounidenses anunció una tregua durante la visita papal.Sobre las injerencias extranjeras, Francisco llamó a las "naciones" a no imponer sus "intereses políticos o ideológicos" en Irak.Para Saad al Rassam, cristiano de Mosul, una ciudad que sigue en reconstrucción tras la guerra contra el EI, este viaje se produce en el momento justo en este país cuya tasa de pobreza afecta al 40% de la población en 2020. "Esperamos que el papa explique al gobierno que debe ayudar a su pueblo", dijo a la AFP.A pesar de las dificultades en materia de seguridad o económicas que padecen 40 millones de iraquíes, los cristianos denuncian discriminaciones y la poca ayuda del gobierno para recuperar sus casas o sus tierras.
El actual Irak es la tierra de Abraham, quien salió de Ur de Caldea a la Tierra Santa; es el escenario del libro de Jonás, que predicó en Nínive, y también, el territorio en el que el pueblo bíblico vivió el exilio cuando el imperio de Babilonia destruyó Jerusalén.En este sentido, el Papa Francisco va a Irak como un peregrino que asiste a Tierra Santa a renovar su fe, pero también, como quien preside en la fe a un grupo de hermanos que viven en este país.Se cree que son entre 200.000 y 300.000 personas, sabiendo que antes de la invasión estadounidense que derrocó a Saddam Hussein en 2003, eran 1.5 millones. Recordemos que también hay una modesta presencia de otras iglesias católicas, a saber, la Latina, la Maronita, la Greco-Católica, la Copta y la Armenia; y otras no-católicas como la Iglesia Asiria.El Papa va como un anciano valiente a hacer "un acto de amor" y también en medio de una pandemia y de los nuevos episodios de violencia en la región.Es un viaje extenuante, además de peligroso: Su primera estación se desarrolla en Bagdad, la catedral Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, justamente el lugar donde yihadistas de Al Qaeda llevaron a cabo, en el 2010, un secuestro masivo y asesinaron al menos 53 personas, entre feligreses, sacerdotes y miembros de las fuerzas de seguridad. El segundo lugar a visitar es Nayaf, a 150 kilómetros al sur de Bagdad, un sitio más significativo para los musulmanes de este país, ya que allí se encuentra la tumba del imán Alí, yerno del profeta Mahoma y figura fundadora del Islam Chiita.Uno de los momentos más intensos estará en Ur, donde hará una oración conjunta con musulmanes, yazidíes y sabeos, en un gesto de unión más allá de la religión.También visitará Mosul y Qaraqosh, lugares arrasados por los Yihadistas. Y terminará en Erbil, en el norte del país, donde ofrecerá una ceremonia al aire libre. Se trata de un feudo kurdo musulmán que abrió sus puertas a cientos de miles de cristianos, yazidíes y musulmanes que huyeron de los terroristas. Allí celebrará una misa para 10 mil personas, en un espacio que tiene aforo para 30 mil, es decir, habrá distanciamiento físico. Los otros eventos no tendrán más de 100 personas para cumplir las normas de bioseguridad.En un mundo que cree que la violencia es la solución a los problemas, Francisco da testimonio de que los humanos somos hermanos y siempre nos podremos respetar y ponernos de acuerdo.Escuche la reflexión y el análisis de Alberto Linero en Mañanas BLU:
En medio de una gran expectativa, el papa Francisco llegó este viernes a Irak, donde hace realidad la visita que soñó Juan Pablo II en el jubileo del año 2000. Se trata de un periplo histórico en uno de los países más conflictivos de Medio Oriente, donde el argentino guarda férreas medidas de seguridad. Siga en vivo la transmisión:El aterrizaje del papa se dio a la 1:55 de la tarde, hora de Bagdad, que será su punto de partida en su visita, la primera de un papa al país. "Estoy contento de retomar los viajes" después de 15 meses sin realizar desplazamientos, dijo Francisco en el avión, al pie del cual le esperaba en Bagdad el primer ministro iraquí, Mustafá Al Kadhemi. "Este viaje emblemático es también un deber hacia esta tierra mártir desde hace tantos años", agregó el papa argentino antes de aterrizar.Aunque está descartado que Francisco use un chaleco antibalas, ha trascendido que no usará papamóvil por los riesgos de seguridad que implicaría y que se desplazará en vehículos blindados.Se trata del viaje número 33 de Francisco como jerarca católico, el cual es considerado por la prensa como el más arriesgado. El periplo incluye Bagdad y Erbil, dos ciudades donde recientemente se dispararon cohetes contra intereses estadounidenses.El pontífice, además, tiene programada una etapa en Mosul, antiguo bastión de los yihadistas de Estado Islámico.El sábado, el papa Francisco visitará la antigua Ur, una etapa con fuertes vínculos espirituales, ya que fue cuna del cristianismo, la tierra del profeta Abraham, padre de las tres religiones monoteístas.
El papa Francisco inició este viernes en Irak una visita histórica en medio de altas medidas de seguridad y en plena pandemia, en un país martirizado donde espera reconfortar a una de las más antiguas comunidades cristianas del mundo, destruida por los conflictos y las persecuciones.Su avión despegó a las 6:45 de la mañana de Fiumicino, el principal aeropuerto de Roma, y está previsto que llegue hacia las 11:00 a Bagdad.El soberano pontífice de 84 años, que aseguró que realizará esta primera visita de un papa a Irak como "peregrino de la paz", tenderá también la mano a los musulmanes chiitas en un encuentro con el gran ayatolá Alí Sistani, la máxima autoridad religiosa de esta rama del islam.Durante esta visita de tres días por varias ciudades, el papa se encontrará con poca gente en las carreteras, arregladas para esta ocasión, debido a un confinamiento total decretado en el país, donde el número de casos ha batido esta semana un récord desde el inicio de la pandemia de covid-19, con más de 5.000 contagiados diarios.El jefe de los 1.300 millones de católicos del mundo, que ha dicho sentirse "enjaulado" en los últimos meses en un Vaticano a cámara lenta por el covid-19, iniciará en vehículo blindado un viaje sin gente, "virtual" para los iraquíes que lo seguirán por televisión, y principalmente por aire. El helicóptero o el avión papal sobrevolará a veces zonas donde se esconden todavía yihadistas del grupo Estado Islámico (EI).En las etapas del viaje, se congregarán solo unos centenares de personas, con excepción de la misa del domingo en el estadio de Erbil, en el Kurdistán, en la que participarán varios miles de fieles que han reservado su plaza con antelación.El programa papal es ambicioso e incluye Bagdad, Nayaf, Ur, Erbil, Mosul y Qaraqosh. Recorrerá 1.445 km en un país que el miércoles fue golpeado por disparos de cohetes, último episodio de las tensiones irano-estadounidenses que siguen latentes en Irak.
Elisabetta Pique, periodista en el Vaticano, habló en Mañanas BLU 10:30 sobre la histórica visita del papa Francisco a Irak. El pontífice emprende el viernes una visita histórica, bajo enormes medidas de seguridad, al país de Oriente Medio confinado por la pandemia y azotado por años de violencia."El objetivo del papa es llevar un mensaje de paz. Esto lo ha dicho él en la pandemia: hay que acordarse que todos somos hermanos", declaró la comunicadora. "Es el primer viaje de un pontífice a Irak, país de mayoría musulmana. Él va a cumplir el sueño del pablo Juan Pablo II que para el jubileo del año 2.000 quiso peregrinar. Lo hace contra viento y marea", añadió. De acuerdo con Pique, aunque está descartado que Francisco use un chaleco antibalas, ha trascendido que no usará papamóvil por los riesgos de seguridad que implicaría y que se desplazará en vehículos blindados. "El papa no solo quiere animar a los cristianos en Irak, también a la minoría yazidí que sufrió un genocidio por parte del Estado Islámico", sostuvo la periodista. Se trata del viaje número 33 de Francisco como jerarca católico, el cual es considerado por la prensa como el más arriesgado. El periplo incluye Bagdad y Erbil, dos ciudades donde recientemente se dispararon cohetes contra intereses estadounidenses.El pontífice, además, tiene programada una etapa en Mosul, antiguo bastión de los yihadistas de Estado Islámico.El sábado, el papa Francisco visitará la antigua Ur, una etapa con fuertes vínculos espirituales, ya que fue cuna del cristianismo, la tierra del profeta Abraham, padre de las tres religiones monoteístas.Escuche a la periodista Elisabetta Pique en entrevista con Mañanas BLU 10:30, cuando Colombia está al aire:
El papa Francisco aseguró este jueves en un video mensaje a los iraquíes que viaja a ese país "como un peregrino de la paz" tras "años de guerra y terrorismo"."Voy como peregrino (...) a implorar al Señor perdón y reconciliación tras años de guerra y terrorismo (...) y voy entre ustedes como un peregrino de la paz", dijo el pontífice la víspera de su viaje de cuatro días (del 5 al 8 de marzo) a Irak.Francisco emprende el viernes una visita histórica, bajo enormes medidas de seguridad, a un país confinado por la pandemia y azotado por años de violencia."Anhelo conocerlos, ver sus caras, visitar su tierra, antigua y extraordinaria, cuna de la civilización", reconoció el pontífice argentino, quien quiso cumplir el sueño del papa Juan Pablo II, que jamás llegó a realizar."Voy como un peregrino de la paz en busca de la fraternidad, animado por el deseo de rezar juntos y caminar juntos también con hermanos y hermanas de otras religiones", recalcó al referirse a un país eminentemente musulmán donde los pocos cristianos que han logrado permanecer han sufrido amenazas y agresiones."Conservan en sus ojos las imágenes de casas destruidas e iglesias profanadas, y en el corazón las heridas causadas por los lazos rotos y los hogares abandonados", aseguró al mencionar a las minorías cristianas, que han tenido que conocer "a tantos mártires"."Que los muchos, demasiados mártires que han conocido nos ayuden a perseverar en la humilde fuerza del amor", clamó. La iglesia "los anima a seguir adelante". "No permitamos que prevalezca el terrible sufrimiento que han experimentado y que tanto me entristece", agregó.El papa emprende el viernes el viaje número 33 de su pontificado, considerado por la prensa el más arriesgado, durante el cual visitará Bagdad y Erbil, dos ciudades donde recientemente se dispararon cohetes contra intereses estadounidenses.El pontífice tiene programado también una etapa en Mosul, antiguo bastión de los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI).La visita del pontífice argentino a Irak estará marcada por la ausencia de multitudes y lo obligará a utilizar casi siempre un automóvil blindado. El sábado, el papa visitará la antigua Ur, una etapa con fuertes vínculos espirituales, ya que fue cuna del cristianismo, la tierra del profeta Abraham, padre de las tres religiones monoteístas.
El ministro de Salud, Fernando Ruiz, anunció este lunes en el programa del presidente Duque, 'Prevención y Acción' que con la resolución 303 se oficializa el inicio de la segunda etapa del Plan Nacional de Vacunación contra el COVID-19 para el talento humano en salud.El ministro también afirmó que se expidió la resolución 302 con la que se realiza la asignación de vacunas de Sinovac para inmunizar a las personas mayores de 80 años. Recordemos que cerca de un millón y medio de vacunas han llegado al país y con este primer envió, desde el sábado, domingo y este lunes, se estarán distribuyendo vacunas para cubrir el 85% de la población mayor de 80 años a nivel nacional.De esta manera, con la llegada este fin de semana de casi un millón y medio de vacunas contra el COVID-19 de la farmacéutica china Sinovac, Colombia en total suma 2.015.816. Del total, el país ha aplicado 296.240, según el Gobierno.
La directora de Prosperidad Social, Susana Correa, afirmó que desde este martes, 9 de marzo, se dará inicio al pago de los dineros correspondientes al programa Familias en Acción 2021.El anuncio lo hizo durante el programa Prevención y Acción que dirige el presidente Iván Duque en los medios de comunicación.Según Correa, esta jornada se realizará de manera progresiva y finalizará el próximo 4 de abril de 2021.Cabe resaltar que el programa Familias en Acción ofrece a todas aquellas familias con niños, niñas y adolescentes menores de 18 años, un apoyo económico para tener una alimentación saludable, controles de crecimiento y desarrollo a tiempo y permanencia en el sistema escolar.Finalmente, según explicó la funcionaria, se espera atender a más de 2.2 millones de familias con una inversión de 330.000 millones de pesos.
La activista y premio Nobel de la Paz Malala Yousafzai ha firmado un contrato con Apple para producir series, documentales y ficciones infantiles que se incluirán en el catálogo televisivo de la compañía.La empresa tecnológica ha confirmado este lunes a Efe que el contrato se extenderá varios años con el objetivo de incorporar contenido que "inspire a todo el mundo" en Apple TV+, que ya trabaja con Oprah Winfrey, Steven Spielberg, Martin Scorsese y Alfonso Cuarón, entre otros.“Creo que las historias tienen el poder de unir familias, forjar amistades, crear movimientos y ayudar a los niños a soñar. Y no puedo imaginar un mejor socio que Apple para hacer realidad todas estas historias", ha indicado Yousafzai en un comunicado.La activista acaba de inaugurar su productora audiovisual, "Extracurricular", con la que pretende dar voz a otras mujeres y escritores jóvenes en el mercado televisivo.Yousafzai tiene ahora 23 años, en 2014 se convirtió en la persona más joven en recibir el Premio Nobel de la Paz por su labor como activista, especialmente por los derechos de las mujeres en su país natal, Pakistán, donde hay muchos obstáculos para que puedan estudiar.APPLE REFUERZA SU ESTRATEGIA EN TELEVISIÓNEn los últimos meses la compañía tecnológica no ha escatimado en presupuesto para fichar a rostros populares de la televisión como Jennifer Aniston, Oprah Winfrey y Keira Knightley, junto a iconos del cine como J.J. Abrams, Martin Scorsese, Sofia Coppola, Ewan McGregor y Tom Hanks.Este año su plataforma, Apple TV+, estrenará una decena de series que incluyen las comedias "Mythic Quest" y "Schmigadoon!" y el drama "Physical", protagonizado por Rose Byrne. Además ganó el Globo de Oro a la mejor comedia por "Ted Lasso".
La presentadora de televisión estadounidense Oprah Winfrey aclaró este lunes que ni la reina Isabel II ni su marido, el príncipe Felipe, hicieron ningún comentario sobre el color de piel que tendría el hijo del príncipe Enrique y Meghan Markle."Enrique no compartió la identidad conmigo, pero me aseguró que si tenía la oportunidad de hacerlo dijera que no fueron ni su abuela ni su abuelo", explicó Winfrey durante una intervención en el programa "CBS This Morning".Ninguno de los duques de Sussex reveló la identidad de las personas que mostraron dudas por la apariencia del hijo, ni delante ni detrás de las cámaras, agregó la presentadora, pero dejaron claro que no fueron la actual monarca o el príncipe consorte.La declaración de Markle fue uno de los titulares de la explosiva entrevista emitida este domingo en Estados Unidos, donde la duquesa de Sussex reveló que durante ese embarazo tuvo pensamientos suicidas y afirmó que la Casa Real se negó a ayudarla.La duquesa precisó que esos presuntos comentarios racistas se pronunciaron en "conversaciones que la familia tuvo" con Enrique, pero se negó a identificar a quienes los articularon, al afirmar que "eso sería muy dañino para ellos".Cuando se incorporó más tarde a la entrevista, el príncipe Enrique confirmó que la conversación giró en torno a "qué aspecto iban a tener los hijos" que tuviera con Meghan, que es mestiza y con raíces afroamericanas, pero se negó a dar más detalles al respecto."Es una conversación de la que nunca voy a hablar", afirmó Enrique, quien agregó que fue "chocante".Markle, que está embarazada de su segundo bebé y anunció durante la entrevista que se trata de una niña que nacerá este verano, aseguró que cuando esperaba en 2019 el nacimiento de su primer hijo, Archie, se enteró de que la Casa Real "no quería que fuera un príncipe" ni que "recibiera seguridad".Añadió que se sintió abrumada por la idea de que su hijo "no fuera a estar seguro, y que al primer miembro de color de esta familia no se le diera un título de la misma forma que a otros nietos se les daría".El Partido Laborista británico ha pedido investigar las acusaciones de presunto racismo en la Casa Real vertidas por los duques de Sussex, frente al silencio del Gobierno conservador del primer ministro, Boris Johnson, que asegura no haber visto la entrevista emitida anoche en Estados Unidos y el lunes en el Reino Unido.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, vuelve a ser tendencia en las redes sociales luego de decir que el tapabocas debe cubrir “hasta la pantorrilla”.Este nuevo lapsus lo tuvo mientras hacía varios anuncios a su nación, como una nueva cuarentena estricta para evitar los contagios del COVID-19.Sin embargo, dedicó parte de sus palabas en su programa habitual de televisión para hacer recomendaciones sobre cómo se debía llevar de manera correcta la mascarilla."Es lo mínimo que podemos pedir: colaboración. Quédate en tu casa, resguárdate. Tapabocas, que no falte jamás. Tapabocas es tremendo instrumento”, dijo Maduro.“A veces alguna gente cree que no es así y se lo quita o lo carga mal puesto. Lo carga aquí (tapándose la nariz) o lo carga a lo loco, por aquí (en la frente) El tapabocas debe ir bien puesto. Mira, bien: que cubra bien, aquí, la pantorrilla", indicó.El hecho en pocos minutos se volvió tendencia en redes sociales, no obstante a los pocos segundos corrigió que quería decir era barbilla.Aquí las imágenes: