Medios de Texas (EE.UU.) divulgaron un nuevo video en el que se observa a múltiples policías armados esperando en un pasillo de dos aulas de la escuela de la localidad de Uvalde, donde ocurrió el tiroteo en el que murieron 19 estudiantes y dos maestras el pasado 24 de mayo.Los oficiales habrían esperado cerca de una hora, pese a que las puertas al parecer nunca estuvieron cerradas, según el diario Austin Statesman y el canal KVUE-TV, que publicaron la noche del lunes las imágenes."Múltiples oficiales estaban dentro de la escuela primaria Robb con rifles y al menos un escudo balístico a las 11.52 (hora local) del día del tiroteo, muestra un nuevo video y otras pruebas. No entraron al salón de clases por otros 58 minutos", aseguró el periodista investigativo Tony Plohetsk, que trabaja para ambos medios.Las imágenes se suman a las quejas de padres que, desde el mismo día de la masacre, suplicaron a los agentes que entraran a la escuela y han cuestionado desde entonces la demora de las autoridades para hacerlo.Las investigaciones señalan que pasaron al menos 77 minutos entre la entrada del autor del tiroteo, Salvador Ramos, de 18 años, y su muerte, abatido por los oficiales. Los investigadores creen que Ramos no pudo haber cerrado la puerta de la clase.Los oficiales en el pasillo querían entrar de inmediato a las aulas 111 y 112, que estaban interconectadas, y donde incluso estaba la hija de un oficial, pero no estaba claro quién se encontraba a cargo.Ramos puedo entrar a la escuela sin problemas con un fusil, un AR-15 después de disparar en la cara a su abuela en su residencia.Un agente especial que llegó a la escena, unos 20 minutos después del despliegue inicial, preguntó a los policías: "¿No saben si hay niños allí?". Y agregó: "Si hay niños allí, debemos entrar allí"."Quien esté a cargo lo determinará", fue la respuesta que tuvo, detalló hoy el Texas Tribune. Después de ese comentario, pasó casi otra hora antes de que un equipo táctico de la Patrulla Fronteriza rompiera las puertas del salón de clases y matara al pistolero.Las autoridades han compartido información contradictoria sobre quién estaba a cargo, quién confrontó al tirador y en qué momento. En medio de la polémica está el jefe de Policía de las escuelas de Uvalde, Pete Arredondo, quien aseguró que las puertas sí estaban cerradas y a la espera de una llave maestra.Escuche el podcast “Zorros y Erizos” y conozca las reacciones del Pacto Histórico tras capturas de miembros de la Primera Línea:
El Departamento de Justicia de Estados Unidos llevará a cabo una revisión de la respuesta policial al reciente tiroteo masivo en una escuela primaria de Uvalde, en el estado de Texas (sur), en medio de los crecientes críticas sobre la actuación de las autoridades durante la masacre."El objetivo de la revisión es proporcionar un informe independiente de las acciones y respuestas de las fuerzas de seguridad ese día, e identificar las lecciones aprendidas y las mejores prácticas para ayudar a los primeros a responder", dijo el portavoz del Departamento de Justicia, Anthony Coley, en un comunicado.La revisión fue solicitada por el alcalde de Uvalde, Don McLaughlin, y "será justa, transparente e independiente", añadió Coley.Salvador Ramos, un adolescente de 18 años, irrumpió el martes armado en la escuela primaria Robb de Uvalde, matando a 19 niños y dos profesores, el último episodio de una serie de tiroteos masivos mortales en Estados Unidos.Tras el tiroteo, el comportamiento de la policía ha sido objeto de un severo escrutinio al conocerse el tiempo que tardaron en actuar. Las autoridades de Texas admitieron el viernes que hasta 19 policías estuvieron en el pasillo de la escuela durante casi una hora antes de irrumpir en el aula en la que estaba el pistolero y matarlo.El máximo responsable de la seguridad del estado dijo el viernes que policía tomó una "decisión errónea" debido a que pensaron erróneamente que el atacante había dejado de matar y que estaba atrincherado.Escuche el podcast “Zorros y Erizos” y conozca las últimas movidas de los candidatos presidenciales antes de la primera vuelta:
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su esposa Jill visitan este domingo Uvalde, la pequeña localidad de Texas consternada después la masacre en una escuela primaria que dejó 21 muertos.En momentos en que se conocen crudos testimonios de los niños que sobrevivieron al ataque, el mandatario instó a actuar para prevenir futuras masacres en un país donde los esfuerzos para endurecer las regulaciones de armas de fuego han fracasado repetidamente."No se puede hacer que los dramas sean ilegales, lo sé. Pero se puede hacer que Estados Unidos sea más seguro", expresó Joe Biden en un discurso el sábado, lamentando que "tantas personas inocentes hayan muerto"."Así que hago un llamado a todos los estadounidenses en este momento para que se unan y hagan oír sus voces y trabajen juntos para hacer de esta nación lo que puede y debe ser", dijo el presidente.Mientras, trascendían inquietantes relatos de niños que sobrevivieron a la matanza del martes, cuando Salvador Ramos, de 18 años, abrió fuego con un rifle semiautomático. Ramos ingresó a un aula, cerró la puerta y se dirigió a los niños: "Van a morir todos", antes de abrir fuego, relató un sobreviviente, Samuel Salinas, de 10 años, al canal ABC.La policía admitió haber tomado una "decisión errónea" al demorar su ingreso al centro educativo tras ser alertada del tiroteo.En efecto, tardó cerca de una hora en poner fin a la masacre, a pesar de varias llamadas de niños que pedían una intervención. Los 19 agentes que se encontraban en el lugar esperaban la llegada de una unidad especializada.A la postre, Ramos fue ultimado por la policía."Nadie gritó" Los sobrevivientes del ataque dijeron haber realizado llamadas susurradas y suplicantes al 911. Algunos se hicieron los muertos para evitar llamar la atención del tirador. Samuel Salinas contó que se tiró al piso para simular su muerte.Lo mismo hizo Miah Cerrillo, de 11 años, para escapar de la atención de Salvador Ramos. La niña se cubrió con la sangre de un compañero, cuyo cadáver estaba junto a ella, dijo a la cadena CNN fuera de cámaras.Acababa de ver como Ramos mató a su maestra después de decirle "buenas noches". Otro estudiante, Daniel, contó al periódico The Washington Post que mientras las víctimas esperaban a que la policía viniera a rescatarlos, nadie gritó."Estaba asustado y estresado, porque las balas casi me pegan", dijo. Su maestra, que resultó herida, les susurró que "mantuvieran la calma" y "quedaran quietos". Finalmente fue rescatado por la policía, que rompió las ventanas de su salón de clases. Desde entonces, sufre recurrentes pesadillas.- Impulso de solidaridad -Desde el miércoles, vecinos de esta pequeña ciudad y de otras localidades acuden a todas horas al memorial improvisado con 21 cruces de madera blancas instaladas en la plaza con el nombre de 19 niños y dos maestras muertos.Los asistentes, en silencio, forman un círculo en torno al memorial, se dan las manos y rezan. También dejan flores y peluches que se unen a los numerosos mensajes de cariño escritos en las cruces, palabras como "Te quiero" o "Te extrañaré"."Es importante estar aquí, darle el pésame a la comunidad", dice Rosie Varela, de 53 años, que viajó una hora desde la ciudad texana de Del Río, con su marido y su hijo adolescente."No están solos; estamos aquí para apoyarlos. Habría sido triste que nadie viniera aquí", añade con lágrimas en los ojos. "Tenemos que ayudar a estos niños a salir de este trauma, de este dolor", dijo por su lado Humberto Renovato, de 33 años, quien nació y creció en Uvalde. "Tener coraje" La vicepresidenta Kamala Harris, quien a mediados de mayo estuvo en el funeral de una de las diez víctimas negras asesinadas en un tiroteo racista en Buffalo, Nueva York, dijo que "no permitiremos que aquellos que están motivados por el odio nos separen o nos asusten".También urgió a los legisladores a actuar. "El Congreso debe tener el coraje de enfrentarse, de una vez por todas, al lobby de las armas y aprobar leyes razonables de seguridad de armas", tuiteó en alusión a la poderosa e influyente Asociación Nacional del Rifle (NRA).El tiroteo de Uvalde es el peor que sufre Estados Unidos desde que 20 niños y seis adultos fueron acribillados en 2012 en la escuela primaria de "Sandy Hook", en Newtown, Connecticut.Escuche el podcast “Zorros y Erizos” y conozca las últimas movidas de los candidatos presidenciales antes de la primera vuelta:
Varias decenas de personas se concentraron en la plaza central de Uvalde, Texas, sur de Estados Unidos, convertido en lugar de homenaje a las víctimas de la matanza registrada en una escuela, donde resultaron asesinados 19 menores y dos maestras a manos de Salvador Ramos, un joven de 18 años."Es importante estar aquí, darle el pésame a la comunidad", dice Rosie Varela, de 53 años, que viajó una hora desde la ciudad texana de Del Río, con su marido y su hijo adolescente."Tenemos que ayudar a estos niños a salir de este trauma, de este dolor", dijo por su lado Humberto Renovato, de 33 años, quien nació y creció en Uvalde."Van a morir todos" La policía admitió el viernes que tomó una "decisión errónea" al demorar su ingreso al centro educativo luego de ser alertados el martes del tiroteo.En efecto, tardaron cerca de una hora en poner fin a la masacre, a pesar de varias llamadas de niños que pedían una intervención. Los 19 agentes que se encontraban en el lugar esperaban la llegada de una unidad especializada.Mientras, en el interior de la escuela, un grupo de alumnos estaba encerrado en un aula con el tirador, Salvador Ramos, de apenas 18 años y equipado con un rifle semiautomático y chaleco táctico.Tras entrar en la aula, Ramos cerró la puerta y se dirigió a los niños: "Vais a morir todos", antes de abrir fuego, relató un sobreviviente, Samuel Salinas, de 10 años, al canal ABC."Creo que me estaba apuntando", confesó el niño, pero una silla entre él y el tirador bloqueó la bala.Se tiró al piso cubierto de sangre para hacerse el muerto."Mantener la calma"Lo mismo hizo Miah Cerrillo, de 11 años, para escapar de la atención de Salvador Ramos. La niña se cubrió con la sangre de un compañero, cuyo cadáver estaba junto a ella, dijo a la cadena CNN en un testimonio fuera de cámaras.Acababa de ver al atacante matar a su maestra después de decirle "buenas noches".Otro estudiante, Daniel, contó al periódico The Washington Post que mientras las víctimas esperaban a que la policía viniera a rescatarlos, nadie gritó."Estaba asustado y estresado, porque las balas casi me pegan", dijo.Su maestra, que resultó herida, les susurró que "mantuvieran la calma" y "quedaran quietos".Una niña, también herida de bala, había pedido amablemente a su maestra que llamara a la policía, diciendo que "sangraba mucho", relató Daniel, que ya no puede dormir solo y tiene pesadillas.Los niños sobrevivientes "están traumatizados y tendrán que vivir con eso toda la vida", subrayó su madre, Briana Ruiz.Samuel Salinas también dijo tener pesadillas en las que ve al tirador. La idea de volver a la escuela, o incluso volver a ver a los compañeros de clase, sigue siendo aterradora."No tengo muchas ganas", confesó, y añadió que quería "quedarse en casa" y "descansar". Biden el domingo El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su esposa Jill visitarán Uvalde el domingo para "compartir el luto" de los habitantes de esta pequeña localidad consternada por una de las peores masacres con arma de fuego de los últimos años en el país."No se puede hacer que los dramas sean ilegales, lo sé. Pero se puede hacer que Estados Unidos sea más seguro", expresó Joe Biden en un discurso el sábado, lamentando que "tantas personas inocentes hayan muerto"."No permitiremos que aquellos que están motivados por el odio nos separen o nos asusten", dijo su vicepresidenta, Kamala Harris, quien a mediados de mayo estuvo en el funeral de una de las diez víctimas negras asesinadas en un tiroteo racista en Buffalo, Nueva York.El tiroteo de Uvalde, descrito en la prensa estadounidense como el "nuevo Sandy Hook" en alusión a la espantosa masacre en una escuela primaria de Connecticut en 2012, volvió a despertar los traumas de Estados Unidos por incidentes similares con armas de fuego.Los rostros de las víctimas muy jóvenes, de entre 9 y 11 años, retransmitidos repetidamente por televisión, y los testimonios de sus seres queridos devastados han conmovido al país, reavivando el debate para imponer controles más estrictos para acceder a las armas de fuego, tema que genera fuertes divisiones en el Congreso.Biden, que ha denunciado regularmente la "epidemia" de violencia armada, no ha logrado que el Congreso apruebe legislación alguna para aumentar los controles a la venta de armas."El Congreso debe tener el coraje de enfrentarse, de una vez por todas, al lobby de las armas y aprobar leyes razonables de seguridad de armas", tuiteó la vicepresidenta Harris, aludiendo a la poderosa e influyente Asociación Nacional del Rifle (NRA).En tanto, los demócratas del Senado de Texas instaron al gobernador republicano Greg Abbott a convocar una sesión de emergencia de la legislatura para aprobar proyectos de ley que, entre otras medidas, aumenten la edad mínima para la compra de armas de fuego.Sin embargo, las posibilidades de que ello ocurra lucen escasas, pues Texas es desde hace mucho tiempo uno de los estados más amigables con las armas de todo el país.Escuche el podcast El Camerino:
El autor del tiroteo que el martes dejó 19 niños y dos maestras muertos en una escuela de Uvalde (Texas, EE.UU.) alertó unos 15 minutos antes en un mensaje de Facebook que se disponía a disparar en un centro escolar, informó este miércoles el gobernador del estado.En una rueda de prensa, el republicano Greg Abbott explicó que aproximadamente media hora antes del tiroteo, Salvador Ramos, como ha sido identificado el atacante, escribió en Facebook que iba a disparar contra su abuela.Unos minutos después, publicó otro en el que dijo que ya había atacado a su abuela -que resultó herida de gravedad-, y en un tercer mensaje, publicado un cuarto de hora antes de la masacre en la escuela, indicó que se disponía a atacar un colegio.Por otro lado, Abbott explicó que además de los 21 muertos hay 17 heridos por este suceso, tres de ellos agentes de Policía, aunque no se teme por sus vidas.El gobernador texano también detalló que el arma usada por Ramos fue un rifle AR15, y que, por lo que se sabe hasta la fecha, el joven no tenía antecedentes penales ni un historial de problemas mentales.El atacante fue abatido por un agente de la Patrulla Fronteriza de Texas.Escuche el podcast de Cómo como aquí:
El adolescente que abrió fuego el martes en una escuela primaria en Uvalde, Texas, matando al menos a 19 niños y un adulto, acababa de dispararle a su abuela en este pequeño pueblo al oeste de San Antonio, informaron las autoridades, que ignoran la motivación de sus acciones.Identificado como Salvador Ramos, de 18 años, el joven era ciudadano estadounidense y estudiante de la preparatoria de Uvalde, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, sin precisar si se había graduado este año.Una foto policial que circuló en los medios locales muestra a un joven con cabello castaño hasta los hombros, de rostro pálido e inexpresivo.Antes de perpetrar este asesinato, habría "disparado a su abuela", continuó Abbott, enfatizando que no conocía los vínculos entre los dos eventos.Según un legislador local, la mujer fue transportada a un hospital en San Antonio.El Hospital Universitario de Salud de San Antonio confirmó que admitió a una mujer de 66 años en "estado crítico" tras ser baleada, sin confirmar su identidad.Luego, equipado con un chaleco antibalas y un rifle, según el sargento Erick Estrada del Departamento de Seguridad de Texas, el joven huyó en un automóvil que abandonó cerca de la escuela primaria Robb luego de sufrir un "espectacular accidente".Alrededor de las 11:30 de la mañana hora local, tras ser encontrado por la policía, el agresor entró corriendo a la escuela y abrió fuego en varias aulas, dijo el sargento Estrada.En la cuenta de Facebook de Elsa G. Ruiz se revelaron imágenes de la entrada de Ramos al plantel.Para los alumnos, de diez años como máximo, y los profesores de esta escuela de 500 estudiantes, en su mayoría hispanos, el fin de año estaba fijado para el jueves.Un video difundido por la cuenta de Sheena Rodríguez muestra los momentos de angustia y zozobra vividos al interior del plantel durante la masacre.El oficial aclaró que la policía local no había informado de persecuciones de automóviles, lo que parece sugerir que el accidente de tráfico no fue provocado.El joven murió durante un tiroteo con la policía. Dos agentes también sufrieron heridas leves, dijo el gobernador Abbott.Según Pete Arredondo, jefe de policía del Distrito Escolar de Uvalde, a cargo de la investigación, el atacante actuó solo.Los investigadores están tratando de obtener "información detallada sobre el perfil" del asesino, "sus motivos, el tipo de armas utilizadas y si tenía permiso para poseerlas", dijo Abbott.El sargento Estrada dijo ignorar si la policía tenía conocimiento del joven.En las redes sociales se le asocia con una cuenta de Instagram, borrada tras la masacre, que contiene varias fotos: dos autorretratos en blanco y negro donde aparece con una chaqueta con capucha, el pelo hasta la nuca, y la foto de un cargador de rifles. En otra toma, se pueden ver dos rifles semiautomáticos.
En la matanza registrada en Texas, EE. UU. el martes de 24 de mayo, 21 personas fallecieron tras los disparos de un joven que de cumpleaños se compró varias armas de fuego. Entre los fallecidos hay 19 menores de edad y dos maestras, una de ellas fue Eva Mireles.Mireles era una maestra con casi dos décadas en la docencia, superaba los 40 años de edad y según algunas versiones, habría servido como escudo humano ante el ataque armado.Su tía Lydia Martínez confirmó dicha versión heroica en The New York Times, además señaló que habría sido la primera víctima mortal del ataque.Eva era madre de un menor y esposa de un oficial de policía. Además, tenía tres mascotas: Callie, Kane y Koda.Su tía también resaltó las cualidades de Eva, quien se caracterizaba por ser una persona muy animada y entusiasta: "era el alma de la fiesta".Por otra parte, Lydia también señaló que algo como lo ocurrido fue inimaginable en la ciudad de Uvalde, ya que es una pequeña población con algunas decenas de miles de personas.Escuche el podcast Titanes del ciclismo:
Una nueva matanza se produjo el martes 24 de mayo en Estados Unidos, la cual ha dejado, hasta ahora, 21 personas fallecidas, 19 de ellas menores de edad. El autor de esta masacre fue un joven de 18 años identificado como Salvador Ramos, quien para celebrar su cumpleaños se compró varias armas de fuego con las que cometió el crimen en la escuela Robb, de la ciudad de Uvalde, Texas.En Mañanas BLU se consultó a la excongresista demócrata Debbie Jessika Mucarsel, una partidaria de aumentar el control y la restricción de las armas en Estados Unidos.Según explicó, junto a Giffords, organización que busca proteger a las comunidades de la violencia con armas, han presionado al gobierno en Washington D.C. para que se tomen medidas reales que puedan evitar tragedias, ya que pese a las diferentes masacres que se presentan, cada vez más seguido, en EE. UU. no se han implementado leyes.A su vez, señaló que los líderes están más preocupados por el "lobby armamentista" que por proteger la vida de las personas, especialmente los niños.La excongresista Mucarsel declaró que las leyes en ese país son muy laxas para personas que quieren hacer daño o hacerse daño a sí mismas."Las leyes aquí en los Estado Unidos, desafortunadamente, dan mucho acceso a personas que quieren hacer daño, que quieren asesinar, o que quieren hacerse daño a ellos mismos. Cómo es posible que estamos viviendo en un país donde un joven de 18 años puede tener acceso a estos rifles", explicó.Además, explicó que el gobernador de Texas, Greg Abbott, pasó una ley que permite el porte de armas, sin ningún permiso o revisión de antecedentes. Medidas que de forma directa han influido en el aumento de violencia.Escuche la entrevista de la excongresista Debbie Jessika Mucarsel en Mañanas BLU:
Salvador Ramos, autor de la matanza de Uvalde en Texas (EE. UU.) la cual deja como resultado a 21 personas muertas, menores de edad en su mayoría, también le quitó la a su abuela antes de salir a llevar a cabo la masacre.El joven latino recién cumplía 18 años, razón por la que tuvo la posibilidad de comprar algunas armas, las mismas que utilizó para asesinar a los niños que estaban a dos días de salir a sus vacaciones de verano.Hasta el momento van 21 personas fallecidas, entre las que hay menores de edad como Javier López y Miranda Matiz, de 10 años cada uno, quienes son hasta ahora los dos únicos nombres que se conocen de los niños asesinados.Sin embargo, Salvador empezó su crimen momentos antes de llegar a la escuela de la masacre, pues su abuela, de 75 años, fue la primeva víctima.Según relató uno de sus familiares a medios locales, le propinó casi 10 disparos a la señora porque ella pretendía impedir que llevara a cabo la matanza."Todo comenzó en la casa de ella, cuando el muchacho quiso salir con todas las armas y ella trató de pararlo, él se volteó y comenzó a tirarle a su abuelita, le tiró, la tumbó y todo, le tiró como ocho, nueve balazos", describió el familiar.En el trayecto a la escuela, alcanzó a tener un accidente de tránsito, pero esto no le impidió entrar a la escuela con una pistola, un chaleco antibalas y un rifle, para empezar a disparar discriminadamente.
El papa Francisco dijo este miércoles que tenía "el corazón roto" tras la matanza en una escuela primaria de Texas que dejó 22 muertos, incluyendo al agresor, y denunció el comercio "incontrolado" de armas."Tengo el corazón roto por esta matanza cometida en una escuela primaria de Texas. Rezo por los niños y por los adultos muertos y por sus familias. Es hora de decir 'basta' al tráfico incontrolado de armas", dijo, tras la audiencia general del Vaticano.Un adolescente de 18 años mató el martes a 19 niños y dos maestros en una escuela primaria de Uvalde, una pequeña localidad de Texas, situada cerca de la frontera con México.En la escuela estudian una mayoría de niños hispanos, de entre 7 y 10 años, muchos de ellos de familias modestas.El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, dijo en conferencia de prensa que el sospechoso, a quien identificó como Salvador Ramos, era un residente local y ciudadano estadounidense y también falleció, muy probablemente abatido por las fuerzas de seguridad.El tiroteo fue el más mortífero desde el de Sandy Hook en Connecticut en 2012, en el que murieron 20 niños y seis adultos.Escuche aquí el podcast de Cómo como aquí:
Ciro Quiñonez y Giovanny Ayala protagonizaron una intensa pelea en un centro comercial de Bogotá, la cual fue capturada en video y rápidamente se hizo viral. En las imágenes se puede observar cómo Quiñonez golpea a Ayala en la cara, incluso, hay patadas entre los equipos de los cantantes.Ante la polémica, Ciro Quiñonez se pronunció a través de sus redes sociales, expresando su arrepentimiento por el incidente. “Con mis abogados hemos tomado la decisión de recoger todas las pruebas, todos los argumentos y la demanda. La verdadera historia de los sucesos se los hemos entregado a La Red para que ustedes se enteren de la verdad de todo lo que ha pasado detrás de esto”, afirmó el cantante.Además, enfatizó que no desea que este tipo de incidentes reflejen la imagen que quiere proyectar a sus seguidores y a los amantes de la música popular. “Hemos entregado todas las pruebas, video, audios y fotos para que se den cuenta del porqué de la situación”, agregó.Por su parte, Valentina Ayala, hija de Giovanny Ayala, también se pronunció en redes sociales. En una historia de Instagram, aseguró que ya se están recopilando las grabaciones de las cámaras de seguridad del centro comercial donde ocurrieron los hechos, así como de las redes sociales, con el fin de presentar las denuncias correspondientes ante la Fiscalía. “Ya se están haciendo las respectivas denuncias y los videos del centro comercial donde este tipo llegó”, escribió la joven.La expectativa crece entre los seguidores de Ciro Quiñonez, quienes aguardan ansiosos el capítulo de este sábado de La Red, transmitido por Caracol Televisión, donde se espera que se aborden más detalles sobre el incidente.Algunos fanáticos especulan que el enfrentamiento podría haber sido una estrategia promocional para un nuevo tema musical, aunque no se ha confirmado esta hipótesis.
Estos fueron los temas tratados y debatidos este jueves, 03 de octubre, en Bla Bla Blu:La comediante Camila Dever habló sobre su nuevo show 'Me río para no llorar'. Además, contó cómo empezó a realizar stand up comedy.Sergio Borja, libretista y asesor de contenidos, compartió con los oyentes las situaciones en las que uno piensa "trágame tierra".Escuche el programa completo aquí:
En las últimas horas, ha surgido una polémica relacionada con un documento del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) que detalla más de 100 nuevas ocupaciones u oficios para determinar la cuota de aprendices que las empresas pueden contratar.La controversia se centra en que algunas de estas ocupaciones incluyen trabajos sexuales y prácticas poco comunes, lo que ha generado revuelo en distintos sectores.Dentro del documento, que cuenta con más de 600 páginas, se mencionan oficios como prostituta, gigoló, acompañante de club nocturno, trabajador sexual a través de teléfono o Internet, pareja de baile, modelo webcam, lector de tarot, terapeuta de poesía, quiromántico, dama y caballero de compañía, entre otros.¿Qué dice el Sena?La entidad aclaró que este listado, contenido en el Acuerdo 10 de 2023, es solo una actualización de un documento previamente expedido en 2005. Este listado es consultado por las empresas para contratar aprendices del SENA de acuerdo con las funciones que desempeñan. Además, se subrayó que dicho acuerdo adopta las clasificaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Jorge Eduardo Londoño, director del SENA, se refirió al tema: "Muchos de esos oficios no serán del agrado de algunos sectores, pero esto es lo que hace la Organización Internacional del Trabajo. En nuestro listado de ocupaciones lo que hacemos es asumir esa clasificación. Lo que se busca es promover la igualdad de oportunidades en todos los aspectos y, sobre todo, proteger a los trabajadores contra la discriminación." El SENA también aclaró que estos oficios no forman parte de los programas de formación que ofrece la entidad, sino que son un reflejo de las ocupaciones reconocidas a nivel internacional.Críticas a los oficicios del SenaEntre quienes criticaron al Sena por este hecho está la senadora María Fernanda Cabal, quien publicó en X: “Más de los oficios que tiene el SENA en el gobierno Petro “para determinar la cuota de aprendizaje que le corresponde a las empresas obligadas; Modelo Webcam, Prestador de servicios sexuales, Pitonisa, Vidente, Sra de compañía”
El exfiscal Francisco Barbosa respondió a las acusaciones del presidente Gustavo Petro, quien en un acto público en Montería lo señaló de no entregar tierras a las víctimas de los paramilitares.A través de un comunicado, Barbosa sostiene que la administración de esos bienes es responsabilidad de la Unidad de Víctimas, que depende del presidente Gustavo Petro, y no de la Fiscalía.“El listado de los bienes de Justicia y paz se entregaban siempre por parte de la dirección de justicia transicional al fondo de reparación a víctimas en procedimientos reglados. En esos procedimientos no tiene injerencia el fiscal general de la Nación. Hoy muchos de los bienes que está entregando el presidente son bienes que fueron perseguidos y judicializados por mi administración”, destacó el exfiscal.El exfuncionario afirmó que entre 2006 y 2019, la unidad entregó 483 mil millones a víctimas, y en su administración se cuadruplicó esa cantidad.“La Fiscalía General de la Nación durante mi administración le entregó al Fondo de reparación de víctimas que administra la Unidad de Víctimas 1600 bienes por la suma de 1.8 billones de pesos. Estos bienes fueron perseguidos por el paramilitarismo por la Dirección de justicia transicional de la entidad”, indicó Barbosa en un comunicado.Agregó a eso datos que bajo su Fiscalía imputó 85,085 hechos delictivos al paramilitarismo, incluyendo 24,408 imputaciones a Salvatore Mancuso.El exfiscal aseguró que nunca discutió con el presidente Petro la entrega de esos bienes y criticó al jefe de Estado por su enfoque de “paz total”, denunciando un supuesto intento de beneficiar a narcotraficantes.“Jamás en las conversaciones que sostuve con el presidente Petro se abordó el procedimiento de entrega de esos bienes al fondo de reparación de víctimas. Esas reuniones se realizaban entre la Unidad de Víctimas y la dirección de justicia transicional. Mi preocupación cuando conversé con él, como el país lo conoce, era que su gobierno pretendía buscar la salida de narcotraficantes del Clan del Golfo y otras organizaciones de la cárcel. A todas esas solicitudes dije no como fiscal general”, dice uno de los apartes del comunicado.Barbosa recordó que el presidente Petro firmó una resolución en 2023 para suspender órdenes de captura de narcotraficantes, lo cual él no cumplió. Suma en ese comunicado la denuncia de un proyecto de ley que buscaba, según él, legalizar el narcotráfico.
Desde el pasado lunes 30 de septiembre, tres personas se encuentran desaparecidas en Bogotá bajo circunstancias que han despertado preocupación entre sus familiares y amigos. Según los testimonios, un hombre identificado como Víctor Hugo Morales, de 55 años, y una pareja que residía en el barrio Galán, salieron a realizar un negocio en uno de los populares San Andresitos de la ciudad. Desde entonces, no se ha vuelto a tener noticias de ellos ni del vehículo en el que se transportaban.Uno de los hombres fue visto la última vez alrededor de las 5:40 de la mañana, cuando Víctor Hugo salió de su residencia, ubicada en el sector de Cali con Calle 13, para recoger a Juan Diego y a su esposa en el barrio Galán. El objetivo del encuentro era dirigirse al San Andrés de la Calle 38 para cerrar una transacción comercial que involucraba una suma considerable de dinero en efectivo. Sin embargo, tras salir hacia su destino, los tres desaparecieron sin dejar rastro.Lo que más desconcierta a las familias es que los teléfonos celulares de los tres se encuentran apagados, con la excepción de uno de ellos, que fue encontrado en el sector del 7 de agosto. Según la información proporcionada por la familia de Víctor Hugo Morales, un hombre respondió la llamada realizada al número, afirmando que había encontrado el celular en una ubicación diferente en la ciudad. Desde entonces, no se ha logrado obtener más información que ayude a esclarecer el paradero de los desaparecidos.Uno de los hijos de Víctor Hugo, que reside en Estados Unidos, ha sido uno de los principales voceros en la búsqueda. "Él tiene cincuenta y cinco años, es alto, gordito y calvo. La última vez que lo vieron fue cuando salió a 5:40 de la mañana. Cualquier persona que pueda verlo, de todo corazón le agradecería que nos lo hiciera saber”, manifestó en diálogo con El Ojo de la Noche.A pesar de las denuncias presentadas ante la Policía y la Fiscalía, los familiares de las tres personas desaparecidas aseguran que hasta el momento no se ha avanzado significativamente en la investigación. La falta de respuestas ha generado desconfianza y desesperación entre los seres queridos de los desaparecidos, quienes esperan una acción más efectiva por parte de las autoridades.