Los municipios de Río de Oro, González, Pailitas, Pelaya, San Martín, La Gloria, La Paz, Manaure, Agustín Codazzi, La Jagua de Ibirico, San Diego y Valledupar se han convertido en el refugio de 360 desplazados que llegaron de la región del Catatumbo huyendo de la violencia.Ante la crisis humanitaria que se presenta, la gobernadora del Cesar, Elvia Milena Sanjuan Dávila, convocó al primer Comité Extraordinario de Justicia Transicional.Durante la instalación de dicho Comité, se refirió al decreto nacional de conmoción interior que emitió la Presidencia de la República y que incluye a dos municipios cesarenses.En este sentido, la mandataria pidió al Gobierno que cualquier decisión que se tome frente a los municipios de González y Río de Oro sea concertada con las autoridades locales. “Queremos pedirle al Gobierno Nacional que cualquier medida o decisión que se vaya a tomar en razón de los habitantes de estos dos municipios de nuestro departamento sea concertada con nuestras autoridades municipales y departamentales”, dijo inicialmente la gobernadora.“Que la fuerza pública conozca de cada una de las actuaciones que se determinen desde el Gobierno nacional y los altos mandos militares que vayan en beneficio de restablecer el orden público de este lugar”, agregó.En el Comité extraordinario de Justicia Transicional se concluyó, a través de un acto administrativo, que el Gobierno del Cesar adopta el decreto de conmoción interior para tomar acciones estratégicas.De igual manera, se convocará el lunes a un consejo de seguridad departamental, indicó el secretario de Gobierno departamental, Eduardo Esquivel.“Vamos a convocar para el día lunes a un consejo de seguridad departamental extraordinario. En alrededor de 14 municipios ya contamos con desplazados en ese aspecto, así que instalaremos un puesto de mando unificado donde le estaremos notificando, de manera diaria, al Ministerio del Interior el número de desplazados que hoy sobrepasa los 300”, sostuvo Esquivel.La alcaldesa del municipio de González, Katherine Mora, relató que recibieron un grupo de personas que huyeron del conflicto, se tienen 25 núcleos familiares que suman 61 personas, entre los que se cuentan 22 campesinos, entre veredas y corregimientos como El Jaguar, Cerro Azul y Tequendama.La Alcaldía, junto a la Personería Municipal, adelantan un censo para poder garantizar la atención humanitaria a esas personas.Por su parte, el alcalde de Río de Oro, Arnoldo Osorio, dijo que tienen 29 personas desplazadas, y agradeció la gestión de la Gobernación del Cesar, que les envió ayudas humanitarias.
Horas complejas en materia de orden público enfrenta el Norte de Antioquia por disputas que siguen generando temor entre el Clan del Golfo, las disidencias de las Farc y la guerrilla del ELN.Y es que al difícil panorama del municipio de Briceño, donde ya se han desplazado más de 130 personas del corregimiento Pueblo Nuevo al casco urbano, ahora se suma el municipio de Yarumal, donde las autoridades locales confirmaron enfrentamientos en el corregimiento de El Cedro, en límites con Anorí y Valdivia.Según Cristian Céspedes, alcalde de Yarumal, este panorama se vive hace cerca de seis meses cuando el Clan del Golfo tomó la decisión de incursionar en territorios donde han hecho presencia tanto las disidencias como la guerrilla del ELN."Desde hace unos seis meses hay una incursión de clan del Golfo a la zona y se han venido generando una serie de asesinatos en esa región que está en disputa entre el clan del Golfo y las disidencias de las Farc. En la zona de El Cedro la disputa es entre Clan del Golfo y el ELN que es los que han hecho presencia en el sector", detalló el mandatario a Blu Radio.Mientras esta situación es atendida en coordinación con la fuerza pública y autoridades departamentales, avanzan las gestiones para trasladar los cinco cuerpos sin vida que en las últimas horas fueron identificados en vía pública del corregimiento Loma de Ochalí.Entre las víctimas estarían dos combatientes y tres civiles, de los cuales ya dos fueron identificados como Viviana Danerys Vera Areiza y Olga Lineth Moreno Vera, de 36 y 20 años de edad respectivamente, las mujeres que habían sido sacadas de sus casas en la zona donde se reportaron hostilidades en Briceño y fueron retenidas por hombres que pertenecerían al Clan Golfo.
Los enfrentamientos entre el Clan del Golfo, las disidencias y el ELN siguen generando repercusiones en la población del Norte de Antioquia, esta vez por las personas que se vieron forzadas a salir de sus viviendas en el corregimiento de Pueblo Nuevo del municipio de Briceño.Según el más reciente reporte entregado a Blu Radio por parte de Luis Eduardo Valencia, secretario de Gobierno del municipio, ya son 137 las personas que han llegado hasta el casco urbano huyendo de las confrontaciones entre los ilegales por el control del territorio y otras rentas. De este número han sido identificadas 73 mujeres y 64 hombres, entre los cuales también hay 41 menores de edad."La situación está consolidada, El Ejército ya está llegando a la zona donde los actores armados ya se replegaron, inclusive desde el mismo día del enfrentamiento en la tarde-noche, y los que tenemos acá, pues la gran mayoría han manifestado la intención de regresar", señaló el funcionario.Pero al tiempo que avanzan estas labores, se confirmó que fueron halladas sin vida en el corregimiento Loma de Ochalí del vecino municipio de Yarumal, Viviana Danerys Vera Areiza y Olga Lineth Moreno Vera, de 36 y 20 años de edad respectivamente, las mujeres que habían sido sacadas de sus casas y fueron retenidas por hombres que pertenecerían al Clan Golfo. Sin embargo, el alcalde de Briceño, Noe De Jesús Espinosa, amplió que en el sitio donde fueron halladas las mujeres hay un cuerpo más de un civil masculino y otros dos que serían combatientes, para un total de cinco personas asesinadas."Ya el asunto está confirmado por parte de la Cruz Roja y de algunos líderes de la región y se está organizando todo para trasladar las víctimas hacia el municipio de Yarumal", destacó el mandatario.En horas de la mañana de este sábado hasta la localidad del Norte de Antioquia viajaron el gobernador Andrés Julián Rendón y el secretario de Seguridad, Luis Eduardo Martínez, para sostener una reunión con autoridades locales y la fuerza pública para conocer detalladamente la situación y tomar medidas que permitan garantizar la seguridad de la zona y el pronto retorno de los desplazados.
En un hecho que ha generado gran conmoción en el departamento de Bolívar, las autoridades confirmaron la muerte en confusos hechos del comandante de la estación de Policía del municipio de Zambrano, el subteniente Nicolás Reyes Valencia.El uniformado recibió varios impactos de bala cuando realizaba un procedimiento de acompañamiento a una empresa transportadora de dinero, que arribó en helicóptero durante el mediodía de este viernes al municipio ubicado en los Montes de María.El secretario de Seguridad de Bolívar, Manuel Berrio, explicó que, aunque todo es materia de investigación, lo que conoce preliminarmente es que uno de los escoltas que se transportaba en el helicóptero disparó en contra del oficial.“Cuando el subteniente, con todo el equipo de Policía del municipio, se disponía a brindar el acompañamiento a la empresa Prosegur, uno de los escoltas desde el helicóptero le dispara en repetidas ocasiones, lo que resulta en su instantáneo fallecimiento (…) posteriormente el helicóptero despega dejando tendido a nuestro uniformado”, dijo en declaración a medios de comunicación el funcionario.Según detalló el secretario de seguridad, el helicóptero y el escolta que disparó el arma fueron aprehendidos por las autoridades en el aeropuerto del municipio de Corozal, Sucre.“Lo que conocemos es que la persona había armado su arma de dotación para iniciar su acompañamiento, lo que pudo ocasionar su tomar y procedió a disparar en contra del uniformado (…) Estamos esperando que la investigación avance para esclarecer lo que realmente pasó porque es muy lamentable, este subteniente acababa de llegar al municipio de Zambrano”, agregó.Sobre el subteniente Reyes se conoció que hace cinco días había llegado como comandante encargado al municipio de Zambrano, y este 25 de enero cumplía 22 años. Era oriundo del municipio de Rovira, Tolima.Suspenden actividades festivas este viernes en ZambranoPor su parte, a través de un comunicado, la Alcaldía de Zambrano lamentó la muerte del subteniente Reyes Valencia, al tiempo que decretó varias medidas para garantizar el orden público.A través del decreto 004-2025012, se suspendieron las corridas de toro programadas para este viernes y se suspendió la venta de bebidas alcohol.“Suspensión de las corridas de toros de manera temporal programadas para el día de hoy viernes, 24 de enero de 2025. Cierre de los establecimientos de expendio de bebidas alcohólicas por el resto del día. Los locales de venta de alimentos podrán operar únicamente hasta las 10:00 p.m.”, detalla la comunicación.
Siendo las 2:10 de la tarde de este jueves, 23 de enero, se registró un atentado a bala en el barrio La Paz de la capital del Atlántico, en el que terminó perdiendo la vida un hombre identificado por las autoridades como Jonny Enrique Alarcón Vecino, animador de niños de 59 años y supuesto contratista de la Alcaldía de Barranquilla.De acuerdo con lo que pudo conocer este medio, “Payaso Capsulita”, como también era reconocido entre sus seguidores, se encontraba en la calle 104 con la carrera 15b cuando fue abordado por dos hombres a bordo de una motocicleta marca NKD.Estos lo identificaron con rapidez y le dispararon hasta causarle su muerte en el sitio. Logrando su cometido, se dieron a la huida con rumbo desconocido.Peritos del CTI de la Fiscalía fueron los encargados de realizar las labores forenses e iniciar las investigaciones alrededor de este nuevo homicidio en Barranquilla.Sin embargo, reportes indicaron que esta persona que portaba uniformes del Distrito al momento del ataque recibió al menos cuatro impactos de bala, tres en su espalda y uno en la pierna derecha.La Policía Metropolitana confirmó estar detrás de los responsables del hecho, sin embargo, no reveló las razones para que se diera el atentado.Muchas personas han lamentado la muerte de Jonny Enrique Alarcón por las redes sociales. Mientras tanto, sigue en pie una propuesta de realizar un consejo de seguridad extraordinario en Barranquilla para tratar temas como la creciente ola de violencia.
La difícil situación de orden público en el Catatumbo, Norte de Santander, ha provocado un incremento en el número de familias desplazadas que buscan refugio en el departamento de Santander. Según datos oficiales de la Gobernación, ya son 300 las personas atendidas tras su llegada a territorio santandereano.El secretario del Interior de Santander, Óscar Hernández, confirmó que el primer grupo masivo de desplazados, compuesto por 47 personas, arribó al municipio de El Playón, donde se instaló un albergue temporal para atender la emergencia humanitaria."Hasta ayer teníamos 290 personas atendidas y enrutadas. Inicialmente se presenta por primera vez ese desplazamiento masivo, que llegaron 47 personas en el municipio de Playón. La capacidad del municipio inicia a limitarse", explicó Hernández.El éxodo no se detiene y, ante la creciente llegada de desplazados, las autoridades también han habilitado un albergue temporal en el coliseo Edmundo Luna de Bucaramanga. Según la Alcaldía, aunque algunas de las víctimas del conflicto han encontrado refugio en casas de familiares y amigos, el coliseo servirá como punto de apoyo para aquellos que carecen de redes familiares en la región.La situación en el Catatumbo sigue siendo crítica debido a los enfrentamientos entre grupos armados ilegales, lo que ha obligado a cientos de familias a abandonar sus hogares en busca de seguridad. Aunque tradicionalmente Cúcuta y su área metropolitana han sido los principales receptores de desplazados, en las últimas semanas se ha evidenciado un flujo significativo hacia Santander.Desde la Gobernación han hecho un llamado urgente al Gobierno nacional para que se refuercen los esfuerzos humanitarios y se dispongan más recursos para atender a la creciente población desplazada. Asimismo, instaron a la comunidad internacional a prestar atención a esta crisis, que deja cada vez más víctimas invisibles del conflicto armado en Colombia.La situación requiere acciones inmediatas para garantizar los derechos fundamentales de quienes huyen de la violencia.
Tropas de la brigada 29 del Ejército sostienen fuertes combates con la estructura Jaime Martínez de las disidencias de las Farc, quienes se encontraban delinquiendo en zona cercana al río, área general de la vereda La Primavera, límite entre López de Micay, Cauca y Buenaventura, Valle del Cauca.Los delincuentes, en su afán de escapar y teniendo en cuenta las afectaciones que estaban sufriendo durante el desarrollo de la operación militar de las tropas, dispararon de forma indiscriminada contra la población civil, causando heridas a tres personas de la comunidad.Una vez resultaron heridos los civiles, enfermeros de la Armada, quienes acompañaban el movimiento de las tropas, atendieron a las personas afectadas y las transportaron al casco urbano para ser atendidas por personal médico especializado.Destaca el Ejército que, durante el registro del lugar, las tropas hallaron a uno de los miembros de esta estructura muerto, producto de la operación militar, así como material de guerra, municiones e intendencia.
La crisis humanitaria generada por la violencia en la región del Catatumbo, en Norte de Santander, ha llevado a un aumento en el número de personas desplazadas que han llegado a Bucaramanga. Según confirmó el secretario del Interior de la ciudad, Gildardo Rayo, hasta la fecha se han recepcionado 78 personas que huyen del conflicto armado.“Para el municipio de Bucaramanga, en este momento, hemos recepcionado 78 personas. De esas 78 personas tenemos a 44 adultos, 34 niños provenientes del subsector del Catatumbo, de diferentes poblaciones como Tibú, San Calixto, Teorama, Alcari, de Morales, Bolívar”, indicó Rayo.Los desplazados han buscado apoyo en entidades como la Defensoría del Pueblo y la Personería Municipal, organismos encargados de gestionar los auxilios y ayudas para las víctimas del conflicto armado.“Por parte del municipio de Bucaramanga, se han tramitado los diferentes auxilios a que corresponden estas personas víctimas del conflicto armado”, explicó el secretario del Interior.El funcionario también resaltó que las familias desplazadas cuentan con una red de apoyo en la ciudad. “¿Qué quiere decir esto? Que tienen un soporte familiar en donde ellos van a estar durante su permanencia en la ciudad de Bucaramanga”, agregó.Para garantizar que las ayudas lleguen a quienes realmente son víctimas del conflicto, las autoridades han implementado un riguroso proceso de verificación.“Lo primero que hacen las personas es acercarse al Ministerio Público, a la Personería, a la Defensoría y, por supuesto, a la Unidad de Víctimas. Allí hacen la caracterización y la entrevista inicial”, señaló el funcionario. Este procedimiento incluye la recopilación de información personal que permite determinar la situación de los desplazados y asignarles los recursos correspondientes.
La preocupación en Ciudad Bolívar sigue más latente que nunca por la situación de orden público que atraviesa el municipio y que hasta la fecha ha dejado siete personas asesinadas.Según las cifras consolidadas de los primeros días del 2025, esta localidad del suroeste antioqueño registra un incremento en los homicidios si se tiene en cuenta que para el año anterior solo se tenía el reporte de dos casos a esta misma fecha.Sobre la problemática hay que recordar que durante el último fin de semana se presentaron tres asesinatos en menos de 20 horas. Entre los casos más recientes destaca el doble homicidio de Javier Rosero y Kevin Arboleda, hombres que fueron baleados en una finca cafetera del municipio en hechos que son materia de investigación.Ante esta evidente escalada de homicidios, las autoridades locales se han reunido para tratar de poner en marcha una estrategia que permita reducir las cifras de violencia. El alcalde del municipio, León Acevedo, insistió que ya solicitaron que se refuerce a la Policía con varias motocicletas y que, además, llegue más tecnología."También vamos a pedir al Gobierno nacional que nos dote elementos como drones para que podamos atender la población", indicó el mandatario.Por otro lado y mientras se espera la llegada de las motos y los drones a este municipio, las autoridades continúan avanzando en las investigaciones correspondientes que puedan establecer por qué motivos se dieron los asesinatos. No obstante, se ha conocido de forma preliminar que algunos de ellos obedecería a temas de bandas delincuenciales.Finalmente, hay que destacar que los siete homicidios en Ciudad Bolívar han generado una fuerte alerta entre las autoridades del departamento, ya que es el segundo municipio con más asesinatos en Antioquia solo por debajo de Medellín.
Territorios como Ocaña y Cúcuta siguen recibiendo a miles de desplazados del Catatumbo, que han tenido que dejar no solo sus pertenencias, sino también la vida construida con mucho esfuerzo durante muchos años, y, a causa de la violencia, han tenido que renunciar. Los ataques del ELN no cesan y con ello el temor e incertidumbre de miles de familias que buscan un refugio para protegerse de los enfrentamientos.El encrudecimiento de violencia y los ataques del grupo armado tienen a la deriva a muchas familias y sigue siendo un tema de conversación, donde desde las diferentes entidades y alcaldías municipales solicitan el apoyo del Gobierno que permita brindar ayuda a todas esas personas que se encuentran sin hogar.Por otro lado, desde las administraciones locales dan a conocer cómo están sobrellevando la situación y qué acciones están implementando para mitigar el impacto de los desplazamientos forzados.El alcalde de Ocaña, Norte de Santander, Emiro Canizares Plata, habló en Blu Radio sobre la difícil situación que está viviendo la región donde siguen llegando una gran cantidad de desplazados al casco urbano. Cabe destacar que cerca de este territorio se encuentran municipios como San Calixto, Teorama, Convención, entre otros, zonas duramente afectadas por los grupos armados.Con la ayuda que ha brindado el Gobierno han podido brindar ayuda a algunas personas, pero, aun así, la ayuda sigue siendo necesaria, ya que el número de desplazados aumenta. Es por eso que pidió al Gobierno que pueda visibilizar la situación y brindar la ayuda humanitaria necesaria.Así llegan desplazados al casco urbano de OcañaEn diferentes imágenes se puede observar como en medios de transporte como motos, volquetas, etc, llega un gran número de desplazados al municipio de Ocaña que, por el momento, ubica a estas personas en lugares como el estadio del municipio, asi como otros espacios que la alcaldía municipal dispondrá.La situación educativa también es alarmante. En el Catatumbo, cerca de 46.000 niños han dejado de asistir a clases debido a la violencia.“El conflicto no solo expulsa a las familias de sus hogares, sino que también les roba a los niños su derecho a la educación y a una infancia tranquila”, expresó el alcalde de Ocaña.Por otro lado, la capital de Norte de Santander también sigue recibiendo desplazados que en su mayoría provienen de Tibú. El alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, dejó entrever las acciones realizadas desde la administración para salvaguardar la vida e integridad de las personas, así como el número de desplazados hasta el momento.“Ayer eran cerca de 19.000, pero ya superamos los 20.000 desplazados. Esto es una tragedia humanitaria que requiere atención inmediata”, señaló Acevedo.Los alcaldes de Cúcuta y Ocaña coincidieron en que esta situación requiere un enfoque que trascienda las ayudas inmediatas, incluyendo el desarrollo de infraestructura y la implementación de proyectos de paz a largo plazo.En moto, a pie y con banderas: cientos de personas salen del CatatumboEn Tibú la situación no es distinta. Con banderas blancas, unos a pie, en motos o vehículos, huyen de la violencia por las amenazas y enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc.